Capítulo 24. Negocios
Canción: Teoremas, etc. – José Madero
Durante todo el transcurso de la noche, ambos durmieron tan plácidamente que, cuando el sol comenzó a asomarse, ninguno se molestó. Rodrigo había despertado hacía ya media hora como de costumbre, pero se sentía tan en paz que no le molestaba estar ahí acostado junto a Nara. La chica se cubría del sol con el cuerpo de su novio, Rodrigo la veía con ternura: Era una dulce y amable chica, muy educada y atenta, al mismo tiempo sabía cómo imponerse, no dejarse intimidar y claro, era otra cuando estaban en la cama.
Conocer todas sus fases era ahora su misión. Había pasado ya mucho tiempo desde que había intentado entablar una relación seria, las fiestas, el compromiso del trabajo y estar todos los días al pie del cañón para hacer nuevas estrategias de venta, nuevos productos, abrir fronteras…. Era mucho para él, pero ahora tenía la convicción de que podía
Capítulo 1. TambaleanteNara se había despertado temprano, se encontraba arreglándose el cabello. Repetía una y otra vez, tablas de multiplicar. Si, tablas de multiplicar, ¿Raro no? Pero desde pequeña su papá le había enseñado a contar cada vez que se sentía estresada o nerviosa por algún acontecimiento próximo. Había dejado sus papeles dos días después de recibir la llamada y ya estaba tramitándolos, asegurándose de que su título llegara sano y salvo a casa.Observó las tarjetas de presentación que había hecho en hojas negras: Ingeniera Nara del Valle Olivera. Qué bien se sentía aquello, su número telefónico en la tarjeta había tomado unos cursos de edición y fotografía en sus años de prepa, no era perfecta la tarjeta, pero pensar que la hab&i
Capítulo 2 Inesperado Nara había salido de aquel lugar tan rápido como sus altos tacones le permitieron, la chica estaba más roja que cuando salía a disfrutar del frío en Navidad, había caminado sin mirar hacia atrás. Prácticamente corrió hasta que estuvo cerca de una estación de autobús, llegó entonces hasta el centro de la ciudad: Bellas Artes. Una hermosa locación en el corazón de la capital había un palacio lleno de historia, lleno de tiempo, lleno de arquitectura para contar el paso de la historia sobre el y acudía ahí seguido cuando necesitaba un respiro: había librerías, cafeterías, había familias paseando con sus hijos y algunos paseando a sus perros, restaurantes y miles de cosas más. En la explanada del Palacio de Bellas Artes, había un montón de personas con talento: Personas improvisando con sólo una bocina (Nara siempre se preguntaban cómo es que habían logrado conseguir rimar con cualquier objeto que se les ponía en frente), bailarines
Capítulo 3. Sorpresa Canción: Iris – Goo Goo Dolls Nara repitió los pasos de su primera entrevista para Genética Lab pero estaba más nerviosa que ese día, no quería fracasar en su segunda entrevista en la misma semana (nadie quiere, para ser sinceros) se calzó ahora unos tacones de pulsera de gamuza negros, un vestido hasta la rodilla color vino, con un saco completo negro y un cinturón a la cintura con la hebilla plateada. Se echó la mayor parte del cabello hacia la derecha, con un pasador con una mariposa de cristal se sujetó el cabello hacia allá se puso una cadena pequeñita, la única de oro que tenía con una medallita de la virgencita que le había dado su abuelita. Uno de sus tesoros. Se maquilló lo más natural los ojos, limpió sus gafas antes de salir y sus labios ya no eran rojos encendidos, eran granate… oscuros. Nadie la escuchó salir y fue un alivio, esperaba no tener otro fracaso cuando regresara a casa; por la mañana le ha
Capítulo 4. Invitación *Meses antes* Nara corría, estaba llegando tarde desde hacía un mes a clases. Sus profesores estaban al tanto de lo que le ocurría en casa, le tenían paciencia únicamente porque no había bajado su rendimiento en la escuela y sacaba buenas notas en sus exámenes; corrió por el pasillo, dobló con el cabello alborotado, la tarea en una mano, los lentes en otra y su mochila había jalado su suéter hacia la mitad de sus brazos, justo en la articulación. Las tareas de fin de ciclo son sencillamente una patada en el trasero junto con la invitación cordial a no dormir durante medio mes. O más. Entró en clase, tomó el asiento más cercano a la puerta para procurar no llamar la atención, no solía hablar mucho en clase ahora que se sentía agotada la mayor parte del tiempo así que hablaba menos, se esforzaba doble entre la escuela y lo personal sus amigos dejaban de invitarla a salir porque nunca pod
Capítulo 5. AcercamientoCuando Nara pasó su tarjeta para poner su primera asistencia estaba vuelta un mar de nervios. Lo había conseguido, había firmado ya su primer contrato y se sentía sumamente emocionada, llevaba unos tacones anchos y bajitos para poder seguir andando rumbo a su nueva oficina. No había visto a Rodrigo en toda la mañana y comenzó a preguntarse si realmente trabaja ahí diario o sólo pasa a ver si las cosas están en orden. No había deja de pensar en la fiesta, ¿Qué rayos iba a ponerse? Sabía que todos los invitados de Armendia (que buscando en la internet se dio cuenta de que es yerno de uno de los hombres más ricos del mundo) irían enfundados en trajes de Hugo Boss, vestidos de Chanel, por mencionar algunas de las marcas que ella conocía.Estaban pensando en cómo salirse del asunto sin sonar a
Capítulo 6. ConocerteNara se quedó en silencio, esperando que Rodrigo dijera algo más antes de tratar de convencerlo de lo contrario. Sé lo que estarán pensando: << ¿QUÉ?, ¿NO QUIERE IR CON RODRIGO HEREDIA A UNA CITA?>> Pues sí, así es. Nara estaba preocupada de conocer gente como aquella, podrían ser muy duros con ella, juzgar su ropa, sus nulas propiedades, su dinero inexistente al final de la semana. No quería eso, había tenido dinero, quizá no tanto como Rodrigo, mucho menos como Armendia, pero lo había tenido y ahora ya no estaba.Su madre decía que ser pobre y comenzar a escalar hasta tener éxito era maravilloso, pero si había algo peor de nunca escalar, era haberlo tenido todo y haberlo perdido de un día a otro… Tiene toda la razón del mundo. Pero, pese a que les había pas
Capítulo 7. Margarita Rodrigo tenía el cabello húmedo todavía. Estaba en su sala, tenía el televisor encendido pero no le ponía atención, aún recordaba los labios de Nara en la comisura de los suyos, no entendía qué demonios estaba haciendo… Pero no quería que se detuviera. Había dejado el teléfono arriba en su habitación, no sabía si Arturo le había respondido y sinceramente no tenía cabeza para pensar en ello. Comenzó entonces a preguntarse sobre la vida de Nara, ¿Sabría bailar?, ¿Qué le gustaba bailar?... ¿Le gustaba la música?, ¿Cantante o banda favorita? No sabía casi nada de ella y sin embargo, sentía que la conocía de tiempo atrás, quizá era porque no habían tenido al necesidad de “romper el hielo” ya que su forma de conocerse habían acabado con toda duda y pena entre los dos. Aunque ella sí se sentía algo apenada aún por haberle reclamado en su entrevista, aunque si no fuera por eso quizá no hubiera llamado su atención. Nara
Capítulo 8. Comida Canción: She wants to know – Half Moon Run. Nara tenía los ojos muy abiertos. Maricela había entrado a su oficina como si huyera de la policía. Se levantó al verla entrar corriendo tan agitada. —¿Qué sucede?—. Preguntó Nara colocando el lápiz que tenía en la mano detrás de su oreja. Maricela, una mujer más alta que ella, ligeramente robusta con el cabello corto y muy chino color rojizo, la miraba con una sonrisa. —¿Qué te dio?—Le dijo a Nara buscando cosas raras o anomalías en el escritorio hasta que posó su vista en el delicado florero rosa—. Oh por Dios… Qué delicado, es tan… Tierno. ¡Qué adorable! Lo vi. Lo vi cuando llegó, temprano como siempre, traía algo en las manos cuando pasó por el lobby, sabía que venía hacia acá y no quise interrumpir, mejor callé y pensé que entre chicas sería mejor guardar un secreto. Nara no sabía por qué, pero sabe que a Maricela le agrada y mucho. —Lo vi cua