Capítulo 4

Edrik

—Blossom, creí que estabas ocupada...—aquel hombre de anchos hombros y sonrisa llena de picardía entraba a la oficina con aires de superioridad. Y quién no se sentiría de tal manera, si es él quien tiene a la mujer más maravillosa del mundo a su lado.

—Sí estoy ocupada, Harding...Como ya habrás notado —el tono de su voz cambió de inmediato, parece que ella juega a ser otra persona cuando está con él. No perdí mi tiempo en ponerme de pie y acercarme a él.—Siento no poder atenderte en este momento, pero si gustas voy a hacerlo en un momento.

—Soy Edrik Maxwell. El nuevo director del departamento de Privacidad y seguridad de datos, Capital Privada y Bienes raíces. Es un gusto conocerte.

—Harding Gibson...Un placer —extendió su mano y no pude hacer otra cosa que aceptarlo.

—Sí me disculpas, Harding, hay un par de cosas que necesito terminar de explicarle a Edrik acerca del trabajo que debe desempeñar en la empresa...Si me permites diez minutos, estaré allí contigo —le indicó con una sonrisa de amargura.—Por favor, te pido que me esperes.

—Te veré en la oficina de tu padre, debo hablar contigo sobre un tema importante...—me dolió en el alma imaginar que ella iba a estar a solas con otro hombre que no era yo. Él volvió a estar ausente y fijé mi mirada en Blossom, quien estaba a punto de empezar a llorar.

Siento que ella se vea afectada por nuestros sentimientos y lamento irrumpir en su vida de forma tan violenta.

Amor amargo que envenena el corazón y mata el sentimiento.

—No voy a ser el otro, Blossom, jamás aceptaré quedarme como tu segunda opción —solté con molestia—No vine aquí para escuchar esto, no vine aquí para que hagas conmigo lo que se te venga en gana.

—Nunca vas a ser mi segunda opción, Edrik Maxwell...Tan solo necesito que comprendas que no has venido en el mejor momento de mi vida y que no puedo dejar todo a un lado por tu sola presencia —a este punto, ya ni siquiera podía mirarme a los ojos sin sentir remordimiento alguno.

—¿Acaso no eras de ese tipo de persona que cree ciegamente en que uno debe dejarlo todo por el amor? Y ahora mírate, buscando miles de excusas para no abrir tu corazón...Solo debes ir con él y pedirle que todo se acabe de una vez, y prometo que te daré todo lo que necesitas. Nunca voy a hacerte daño, y jamás voy a hacer que tú dudes del amor que sientes por mí...Nunca voy a ser como él, pero, parece ser que no puedes entenderlo.

—Edrik...Por favor...Por favor, te ruego que me entiendas y que por un minuto te pongas en mis zapatos —lloró, y a pesar que eso me rompió el corazón, no podía romper la barrera que había entre ella y yo.

—No soy capaz de soportar esta situación...Simplemente hagamos como que nada de esto sucedió y sigamos con nuestra vida, cada quien por su lado como lo hemos hecho desde siempre —señalé. A pesar que esa idea no fuera de mi total agrado, no había nada que pudiera hacer al respecto.

—Eres alguien para mí porque he estado pensando en ti, llevando el mismo sentimiento dentro de mi corazón desde el día en que te conocí...Lamento nunca haber hablado contigo sobre esto —farfulló—Lamento que mi falta de honestidad nos haya afectado a tal punto que ya no hay nada que pueda hacer por nosotros...Espero que algún día puedas perdonarme.

—Supongo que no hay nada que deba perdonarte, Blossom, solo espero que no te estés mintiendo a ti misma en este instante, no quiero que actúes contrariamente a lo que sientes y que cuando te sientas arrepentida de las decisiones que tomas hoy, no sea demasiado tarde para mí. Sabes que el amor no tiene leyes y que el amor mucho menos espera, y que aunque se ame con todo el corazón, aquello no es suficiente para ser capaz de salir adelante —me apresuré en plantar un beso en su mejilla y abrazarla con delicadeza, sin perder ni un solo minuto más, me encargué de salir de ese lugar antes de que acabara con mi estabilidad emocional.

—Ya puedes pasar Harding, ella ha terminado de explicarlo todo —le comenté y él sonrió. Puede que no le tenga buena fe porque está saliendo con la mujer a la que amo, aunque pienso que está escondiendo algo y no quiero adelantarme a hacer suposiciones. Sé bien que si me atrevo a decir algo que deje en una mala posición a Harding y muestro mis evidentes sentimientos hacia Blossom, los demás solo van a pensar que lo hago debido a mis problemas personales.

—Gracias, Edrik. Qué tengas un buen día —me sonríe con autosuficiencia y desaparece de mi vista en tan solo unos instantes.

Créeme que este es el peor día de mi vida.

Tuve que dejar ir a la mujer que adoro y ahora, debo soportar a su pareja a cada instante.

Qué vida la mía.

Lleno de frustración, me dirigí hacia mi oficina, no obstante, en medio del camino me encontré con alguien que no esperaba ver en lo absoluto y a quien dejé de ver hacia varios atrás. Parece que no ha cambiado demasiado en todo este tiempo.

—¿Edrik Maxwell? —Ashley Stevens, a quien yo recordaba como una gran amiga de Blossom desde la universidad. Era una chica mordaz, inteligente y que estudiaba negocios internacionales puesto que aquello era su más grande pasión—No puedo creerlo...¿Qué haces acá?

—Ashley, ha pasado un tiempo...—le sonreí, acercándome a dejar un beso en su mejilla—Y respondiendo a tu pregunta, ahora trabajo aquí.

—¿Hace cuánto tiempo volviste? Emmet me ha dicho alguna vez que decidiste irte a Estados Unidos cuando te faltaba muy poco para terminar tu carrera y trabajaste un tiempo por allá —ella no había dejado de poseer esa fría mirada que podía ponerte nervioso de repente y aún conservaba esa cálida voz que era como recibir un precioso abrazo del cielo.

—Volví hace menos de un mes y mira que he tenido suerte al encontrar un puesto de trabajo en un sitio tan extraordinario como este, por supuesto que esta es una gran oportunidad para mí —le mencioné—El bufete de abogados Vaughan es el mejor en todo Londres.

—He venido porque mi jefe desea comprar un terreno de gran valor para colocar una sucursal de su empresa allí...Y debido a que confío en esta firma de abogados en particular, decidí que este era el lugar adecuado.

—¿A qué se dedica tu jefe, Ashley? Si te parece, podemos pasar a mi oficina para poder conversar con mayor comodidad. Para tu suerte, soy el nuevo jefe del departamento de bienes raíces y la persona idónea para tu caso —le indiqué y ella asintió, permitiendo que llegáramos al lugar antes mencionado.

—El hombre tiene una empresa enorme de venta de automóviles, sin embargo, es un maldito desastre con las bienes raíces...Lo que necesitamos es que nos ayudes a verificar que todo sea legal y que no se esté vulnerando sus derechos...—me respondió. Le acerco un asiento para que pueda estar más cómoda, y yo por el contrario opto por tomar asiento en la silla de mi escritorio.

—¿Y él te ha pedido que le ayudes con esto? —Interrogué con curiosidad.

—Bueno, mejor no preguntes...—se sonrojó y pude caer en cuenta que lo que ella tenía con su jefe iba mucho más allá de una simple amistad—Entonces, he venido a buscar un buen asesoramiento sobre el tema...Y qué buena suerte que es encontrarme contigo.

—Supongo que debes haber traído los documentos pertinentes para poder ayudarlos con la compra...—mencioné y ella asintió mostrándome una carpeta color lila que rápidamente extendió en mis manos—Llámale a tu jefe y dile que a las cuatro de la tarde podemos ir a visitar ese terreno y verificar que cumpla con lo prometido.

—Ese no es un problema, le llamaré ya mismo a avisarle...—sonrió— ¿Y Blossom? ¿Ha sucedido algo con ella o es que han estado actuando como si nada pasara? No comprendo la razón por la cual ella no me ha comentado sobre tu regreso.

—Blossom está con otro hombre, y ya no hay nada más que decir además de eso —suspiré, terminando de revisar el valor del terreno, pareciéndome que era muy razonable.

—Harding es un cero a la izquierda en la vida de Blossom, por lo que no debe ser un impedimento para ti —supo decirme con honestidad —Es igual que decir que ella se encuentra sin pareja. Harding es de todo menos un impedimento, créeme que nada me haría más feliz que él desaparezca de la vida de mi amiga tan pronto como sea posible.

—Lamento que mi falta de honestidad nos haya afectado a tal punto que ya no hay nada que pueda hacer por nosotros...Espero que algún día puedas perdonarme...Eso es todo lo que ella pudo decirme...—traté de restarle importancia al asunto a pesar que eso me estuviera doliendo como si clavaran un cuchillo en mi pecho mientras repetía sus palabras.—Créeme que quien ha perdido toda esperanza en nuestra relación es ella más no yo, pero eso al mismo tiempo termina con toda la historia entre nosotros.

Amor amargo que envenena el corazón y mata el sentimiento.

Aquello no había dejado de rondar en mi mente, ver una vez más a Blossom Vaughan frente a mí y darme cuenta que pecho no ha dejado de latir por ella en ningún momento ha sido como un disparo al corazón.

—Me llenaría de alegría saber que podrías volver a estar con ella si ambos deciden luchar por su relación...En el pasado, ustedes tuvieron que sentirse atraídos por el otro en secreto por demasiado tiempo y después cuando pudieron confesarse con el otro, pasaron muchas cosas que no les permitieron continuar como una pareja cuando había pasado muy poco desde que descubrieron que se amaban y que estaban muy enamorados del otro...Pienso que cuando se tiene la oportunidad de volver a ver a una persona a la que se amó con el alma en un pasado y sigues teniendo el mismo sentimiento, es evidente que aquello es obra del destino. Sería un gran pecado que ustedes dos desperdiciaran esta oportunidad.

—Ashley, te aconsejo que todo esto se lo repitas a Blossom quien es la que está equivocada desde su mala posición —le recordé.—Y no quiero ser grosero contigo, para nada, pero, hoy he tenido un día de m****a y seguir hablando de Blossom ahora mismo hace que mi vida luzca aun más miserable.

—Déjame decir una última cosa por hoy y prometo que daré el tema como finalizado...Juro que le voy a poner un punto y aparte a todo este asunto y que no volveremos a hablar de Blossom Vaughan...Solo lo haremos si es que tú me lo pides o lo requieres en algún momento —suspira, cruzqndo sus piernas y acercándose hacia mí—Si lo que hace falta es encontrar una prueba de que ella sigue estando enamorada de ti o si quieres que al fin se atreva a arriesgarse por su amor, más vale que empieces a idear el plan perfecto para ello. Estoy completamente segura que si ella llega a verte con una mujer que no sea ella en algún momento, va a volverse loca hasta el punto de perder los estribos...Es una pena, sin embargo, Blossom solo admite y se arriesga cuando se da cuenta que está a punto de perder todo lo que le interesa. Si llega a verte con otra mujer, y al menos finges que estás muy enamorado de esa persona, vas a ver como estará contigo en un abrir y cerrar de ojos. Y si no deseas usar ese método y ella no abre los ojos para ver la realidad, temo que van a terminar perdiéndose.

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