Brandon abrió la puerta del departamento con frustración deseando tirar todo abajo. Había pasado por la joyería para recoger a Elyanna, pero le habían informado que ella se había marchado con Olivia y él había intentado llamarla, pero Elyanna no contestaba a sus llamadas, algo que le empezar a desesperar. Brandon estaba cansado de andar detrás de ella como un perro abandonado.Estaba preparado para empezar maldecirla y romper toda la casa cuando entró en el salón y la encontró llorando en los brazos de Olivia.–¡¿Elyanna amor que ocurre?! –Preguntó Brandon acercándose a ella con rapidez y al ver el semblante serio en su rostro se preocupó. –¿Ely estás bien?–Olivia podrías dejarnos solos por favor, necesito hablar a solas con Brandon. –Pidió Elyanna y Olivia miró al hombre con recelo, lo que dejó a Brandon intrigado por la forma como lo miraban.–¿Estás segura de que no quieres que me quede Elyanna? –Preguntó Olivia preocupada porque no confiaba en Brandon y le angustiaba dejar a Ely
Olivia cerró la puerta de la habitación después de estar segura de que Elyanna seguía dormida después de la noche tan difícil que había pasado mirando la chica con pena.Chase y ella habían decidido no revelarle toda la verdad sobre ellos y que sabían siempre habían estado al tanto de quien era Brandon Müller en realidad. Olivia todavía tenía la esperanza de poder utilizarlo para su venganza y no podía arriesgarse contándole a Elyanna toda la verdad.Cuando entró en la cocina para prepararse un café bien fuerte, encontró a Chase en la isla abriendo el teléfono móvil de Elyanna y parecía intentar meter algo dentro con una pequeña pinza.–¡Chase, ¿qué estás haciendo? –Preguntó Olivia intrigada y su hijo levantó la vista por unos segundos para mirarla, después volvió a centrar su atención en el aparato.–Estoy escondiendo en el teléfono de Elyanna un pequeño rastreador, para estar más tranquilos.–Chase no puedes hacer esto sin su autorización no es correcto. –Lo regañó Olivia y Chase fr
Chase había sentado a Elyanna sobre la encimera de la cocina intentando convencerla de comer algo, ya que pasado la mayor parte del día sin alimentarse. –No sabía que ser tan gruñón era una característica de los ángeles guardianes. –Bromeó Elyanna mientras que Chase intentaba alimentarla como si fuera una niña. –Abre la boca y deja de actuar como una niña pequeña, recuerda que llevas un bebé en esa barriguita y necesitas alimentarte bien por él. –Pidió Chase levantando la cuchara y Elyanna abrió la boca para tomar la sopa. Mientras que los dos se reían en la cocina, Patrick los miraba desde el salón viendo lo feliz que estaba su hermano al lado de Elyanna y eso le preocupó. –Parece que Chase no tiene ningún problema con el hecho de que Elyanna está embarazada de otro hombre. –Habló Patrick sentándose en el sillón que estaba delante de Olivia. –Creo que eso lo ha aprendido de tu padre. Jack lo recibió de brazos abiertos cuando lo conoció y lo protegió con todo su amor como si Chase
Cuando la policía entró en la oficina de Brandon, Paul estaba a su lado ejerciendo de abogado, algo que no solía hacer jamás, pero en aquel momento no tenías más opción. Paul observaba el rostro de Brandon para estar seguro de que mantenía la calma, pero hasta le dio escalofríos la seriedad que se veía ante aquella situación. –Sabemos que la señorita White vivía con usted en San Francisco. –Habló el detective analizándolo con la mirada. –Bueno, no vivía con ella –empezó Brandon a explicarse controlando con maestría sus nervios –era uno de mis departamentos y me gustaba tenerlo para verla de vez en cuando y me sentía más cómodo encontrándome con ella en un lugar más privado antes que en un hotel. –¿Entonces confirmas que la señorita White era su amante? –Preguntó otro detective mirándolo a los ojos y Brandon hizo un gesto positivo con la cabeza. –Sí, como podrá imaginar soy un hombre casado y debo mantener las apariencias, por eso nuestra relación era tan secreta. –Contestó Brandon
Tennessee, Diez años antes.–No hay nada que me duela más que verte tan triste. –Murmuró Elyanna mirando con tristeza al chico que tanto amaba.–Todo por dinero Ely, mi madre dejó de tratarse porque ya no teníamos como pagar sus tratamientos, si no fuese por el maldito dinero ahora mi madre estaría viva. –Contestó Brandon apretando los dientes con rabia, recordando todas las veces que su padre tuvo que humillarse intentando conseguir un préstamo para que salvarán la vida de su mujer. –No sabes cuanto odio ser un pobre muerto de hambre.–No digas esto mi amor, eres maravilloso Bran y el dinero no es importante, ayuda es cierto. –Habló Madison abrazándolo y lo vio negar con la cabeza frustrado.–Sabes muy bien que tengo razón, tú no lo entiendes porque tu familia tiene dinero. Para tu padre yo no soy lo suficiente para ti, para él no soy nada. – Replicó con frustración, recordando el motivo por el cual tenía que ver a su chica a escondidas.–A mí no importa eso Bran, con dinero o sin él
Después de unas horas Cyrus se quedó completamente dormido y Brandon miró su reloj. Cuando vio la hora que era se levantó despacio para ir a la cabaña del lago, seguro de que Elyanna estaría esperando por él y así fue.Brando entró a la cabaña y Elyanna estaba encendiendo unas velas, porque no había electricidad en el lugar. Cuando ella se giró para verlo no dijo nada y Brandon la miró con curiosidad porque parecía diferente. Entonces Elyanna desató los tirantes de su vestido que iban a atados detrás de su nuca y lo dejó caer al suelo, quedándose completamente desnuda delante de él.–Quiero ser tuya esta noche. –Murmuró y Brandon pudo notar el nerviosismo en su voz, pero en su mirada solo había determinación.Elyanna comenzó a temblar cuando Brandon se acercó a ella deslizando las manos por sus brazos y la besó suavemente.–No quiero que te sientas obligada a hacerlo Ely, te amo con toda mi alma y eres la mujer de mi vida, pero nada me dolería más que verte arrepentida después de que
Durante la noche Brandon estaba delante de la estación de autobús caminando de un lado a otro preocupado, porque ya había pasado una hora y Elyanna todavía no había aparecido. Llovía mucho aquella noche y él estaba entero mojado a penas con una mochila en la espalda con lo poco que tenía, cuando de repente una camioneta vieja que Brandon conocía muy bien se paró delante de él.–¡¡¿Es que te has vuelto loco muchacho?!!– Exclamó Cyrus bajándose de la camioneta acercándose a su hijo. –¿Te ibas a marchar dejándome solamente una carta despidiéndose?–No intentes impedírmelo papá, me iré muy lejos de aquí con Ely. Nadie nos impedirá de ser felices juntos. –Habló Brandon con vehemencia y su padre miró alrededor.–¿Y dónde se supone qué está tu princesa, que no la veo aquí contigo?–No lo sé papá, se habrá retrasado, pero yo sé que vendrá, Elyanna me ama y quiere estar conmigo. –Contestó Brandon angustiado porque Elyanna todavía no había llegado.–Ella no vendrá Brandon, Elyanna jamás abandon
San Francisco, en la actualidad.Elyanna estaba agachada en medio de la calle recogiendo todas las cosas que se habían caído de su bolso, después de que un hombre se hubiera chocado con ella y ni siquiera se hubiese molestado en ayudarla. La chica miraba con inquietud la parada donde estaba el autobús, que debería coger para volver a su casa y lo peor es que era el último que pasaba aquellas horas de la noche.Cuando todas sus cosas ya estaban guardadas en el bolso, Elyanna corrió lo más rápido que pudo para llegar a la parada, pero cuando estaba casi llegando el autobús se marchó dejándola sola en aquella calle sola.La chica resopló con cansancio porque debería coger otro autobús que la dejaría a unas cuantas calles de su casa, que infelizmente estaba en un barrio muy peligroso de San Francisco, entonces miró el reloj para ver la hora y se preocupó porque eran casi las once de la noche. En aquel día había muchísimo trabajo en la empresa, todos los empleados estaban como locos para e