Él se encuentra dispuesto a salir del hoyo donde se encuentra, a superar sus traumas y a curar su corazón.Confundido y agobiado obedece a sus instintos aceptando que puede comenzar de nuevo. Aclarar un poco su oscuridad.Y entonces apareció ella, hermosa inocente, rebelde e intocable, desobediente y reacia; una mezcla de ansiedad y emoción embarga los pedazos de corazón que esparcidos vibran con el solo timbre de su voz. ¿Será ella ese Ángel que alguien le dijo encontraría? ¿Será ella esa tabla de salvación para su vida? ¿Encontrará en ella su expiación por todos los errores cometidos? Solo lo sabrá viviendo, amando y volviendo a sentir. Acompañemos a Napoleón McCarty en este tercer viaje en busca de su felicidad. ¡¡Y de nuevo gracias por leer!! J'kty...
Leer másHola, holaaaaa preciosuras… En esta nueva etapa de nuestro Napoleón, quiero dejar claro algunos puntos. Por los momentos se cierra esta fase, pero no se preocupen porque viene el desenlace de esta historia en la edición: Llegaste a Mí. Libro 3.1. Un Ángel en mi Infierno (Kathryna Petrova) está es la etapa crucial en la vida de nuestro niño, pero necesito que tengan claro los pormenores respecto a la existencia de la chica con la cual desea pasar el resto de su vida. Allí entre locuras y malos momentos, al igual que felices y amargos, todos descubriremos los secretos guardados en esta bella historia. Espero que mis preciosuras – las que hayan llegado hasta aquí –, atesoren y amen cada uno de estos capítulos así como yo lo he hecho al escribirlos. “Nos vemos pronto". Por los momentos les dejo un poquito de esta historia. Llegaste a mi. Libro 3.1. Un Ángel en mi Infierno. Kathryna Petrova.
Kathryna baja la escalera luciendo un vestido azul cielo muy ajustado, con un escote estilo corazón y una abertura que llegaba a la mitad del muslo, las sandalias en el mísmo tono son altísimas y los accesorios incluyendo el pequeño bolso peludo, parece que los sacaron de una colección de algún Orfebre o Gemólogo reconocido. Lleva el cabello suelto y poco maquillaje como siempre, apenas un brillo de labios y algo de negro en los ojos - la cosa que se corre - ¡se ve fantástica!¿Cómo se supone que uno mantenga el control?¡Las mujeres se visten para provocar!Sonríe y se acerca a mí, huele delicioso. Se para de puntitas y besa mis labios, cierro los ojos porque soy un manojo de emociones ya que es nuestra primera salida formal y como dice mi padre: somos figuras públicas. Debemos mostrarnos para las fotografías y los comentar
El día en la oficina estuvo horroroso, nunca había visto tanto trabajo junto ¡y no tiene nada que ver con que no me guste! pero es que se acumuló el trabajo de casi una semana y parece el de un mes ¡uf! necesito descansar. Las cuatro de la tarde y el reloj parece que se encuentra detenido en la Videoconferencia que tengo con Tokio. El traductor me habla y yo le respondo en piloto automático, estoy cansado y hambriento porque no almorcé. la cabeza me duele y quiero salir de aquí.— ... exclusivamente preparado para futuros contratos y los asuntos legales de nuestra empresa en particular ¿qué opina Sr. McCarty? - pregunta el Chino del cual no recuerdo el nombre.— Me parece que todo va a engranar perfectamente si cuidamos los detalles del contrato, se ofrecen exigencias que sobrepasan los límites laborales ya que no podría viajar sinó, una vez cada tres meses. Opino que deberían tratar de solventar los inconvenientes con la conciencia de que nos encontramos al otro lado del mund
Una vez en la casa, al entrar al parqueadero subterráneo me giré deteniendo el vehículo.— ¿Si creen que se salvaron de darme las explicaciones pertinentes? Se equivocan, hoy hablamos ¡y en mi estudio! porque no me interesa ser un chismoso - mis hermanos asintieron pero, la ojiceleste odiosa no; por supuesto ella se cruzó de brazos — ¿Podrían bajar y dejarme un minuto a solas con esta fiera por favor? - asintieron y bajarron.Al escuchar el sonido de la puerta separé el asiento y tinté un poco más los vidrios. tiré de su brazo y la senté nuevamente a horcajadas, el vestido subió hasta la cintura y yo de manera sádica no le permití juntar su centro con mi hombría, se quejó y lloriqueó malcriada tratando de tocarme y tampoco se lo permití, entre pucheros y lloriqueos la besé y saboreé su deliciosa boquita, peque&
¡Uf, una semana agotadora! entre mi Sol con su oído y mi padre que le otorgaron el alta el lunes y cierta chica acosadora que me besa furtivamente y no solo eso sino que el sábado es la fiesta de cumpleaños de esa misma chica desobediente, mi cuerpo necesita relajarse, hoy es jueves y necesito un trago, quizás dos. Entro a rastras a la ducha para tratar de lavar mi cansancio, me quedo por mucho rato bajo el chorro. Salgo enrrollado en la toalla y brinco de la sorpresa al encontrar a cierta diablita sentada en el centro de la misma con rostro seductor y su labio inferior mordido, se que es para no reírse pero igual mi cuerpo traidor se revela y la excitación me recorre. Pongo los ojos en blanco y busco la ropa para vestirme en el baño. La ignoro y recorro el lugar frente a sus ojos para que sufra ¡listo, ya tengo todo! vuelvo al baño y me arreglo para salir.— ¿Saldrás? - observo sus preciosos ojos que me miran insistentes.— ¡Si cielo, voy por algunas copas! e
Tengo sueño, no descansé nada ya que mi Sol de Verano lloró desesperada y no podía dormir, el dolor en su oído era casi inaguantable. Mi madre la revisó y me hizo la receta para comprarla pero cuando se enteró de la ampolla empeoró su genio, llorándo a gritos por el miedo. Alma Natalia lloraba tratando de calmarla y yo me sentía desesperado, ni siquiera con mi madre aceptaba estar y sus sollozos me fragmentaban el pecho.— ¿Jen, quieres conmigo? - ella giró su carita llena de lágrimas y asintió. Se la entregué para poder salir a la farmacia. Modulé un "gracias" y Kath asintió llevándosela a su habitació.Me fuí con Et a las dos y diez de la mañana a buscar los medicamentos ya que los habidos en la casa eran para adultos y era peligroso, mientras la chica de la farmacia babeaba al mirarnos yo ponía los ojos en blanco por la tontería, me sentía cansado y exasperado. Quiero que mi Sol se sienta mejor.— Tenga su pedido señor - extendió el paquete y lo recibí.—
Falta poco para las nueve de la noche y yo muero de sueño, quería despedirme de Kath pero la veo entretenida con su telefono y tecleando en la compu. Estos chicos son muy raros, hay ocaciones en que mi Alma se encuentra en su habitación con el televisor encendido, tecleando en su mini laptop y conversando con alguien por teléfono ¡que horror! eso debe ser algo de mujeres porque mi madre y mi cuñada Kathy tienen dos Smartphone cada una y mantienen sus oídos ocupados también atendiendo a sus pacientes igual por esa vía.Subo las escaleras para dirigirme a la alcoba de mis hijas para despedirme y arroparlas, abro la puerta encontrándolas rendidas, mi Sol de Verano en posición fetal con colita arriba y mi Alma arropada sólo hasta la cintura, deduzco que esperando mi llegada para terminar de hacerlo. Las beso a ambas en sus preciosas cabecitas y aspiro el aroma que desprenden, quiero llevármelas a mi habitación para que duerman conmigo porque me fascina como huelen. Sin embargo me
Duncan McCarty debía estar recluido en la Clínica PetroMc's cuatro días, dijo que era injusto que la pequeña Petrova no festejase su cumpleaños por él, ya que ella mísma les informó a todos que se quedaría con mi padre el sábado y el domingo. Ese día la llevé a almorzar y fuimos un rato a caminar, en ese momento aproveché la oportunidad de expresarle mi preocupación por sus estudios; aunque yo no era su padre ¡le exigía! que volviera a la Universidad. Dijo que sí. Ella sólo besó mis labios y dijo — Está bien cielo, volveré - y entonces mi pecho dolió porque pensé en retarla pues juraba que no iba a ceder. Su sumisión me conmovió a tal punto que la dejé conducir mi Porshe de colección y hasta la dejé comportarse como una adolescente dentro del auto, permitiéndole
Siento un dolor profundo en el pecho y es la angustia de no saber nada aún, mi madre llegó a la clínica desesperada y temblorosa sin embargo, guardó la compostura hasta que yo como siempre de maricón estaba llorando y gimiendo de miedo, me abrazó fuerte, temblando y me sentí igual que cuando tenía dieciocho años y me encontraba hospitalizado con una subida en los niveles de colesterol o de glicemia.— ¿Mami? - escuché la voz de Nathalie que era un susurro lastimero.— Tranquila mi amor, tu padre es fuerte, es un hombre con mucha salud - creo que lo dijo para convencerse ella tambien de sus palabras.— ¡Lo sé, pero igual tengo mucho miedo! Nap ¿qué sucedió? - me miró con sus ojos identicos a los míos e igul de irritados por el llanto.— Él solo estaba gritando por teléfono y... se desplomó luego de que colocara su mano en el el pecho - sollocé y me abrazó — No perdí tiempo en llamar a nadie, yo solo quería que lo revisaran y luego las llamé, Dom viene en camin