La razón por la que Liam se encuentra en esa zona, es que su hermano mayor, el príncipe heredero Alfa; Alfa Lenny, lo incriminó hace 7 años.

Le tendió una trampa a Liam dónde su padre muy enojado lo desterró brutalmente sin permitirle darle explicaciones, dónde Liam antes era aún Alfa príncipe y excelente en su área, pero su hermano Lenny siempre ha tenido envidia de él.

Por más que su estimada abuela, la patriarca Deborah intervino en la decisión del Alfa Rey, no fue escuchada, por lo que su abuela rompe lazos con su hijo el Rey

Desde entonces el Alfa Liam, construyó su propio su reino, dónde su manada guerrera de lobos son también exiliados y ha trabajado tan duro que se ganó el respeto y la admiración de los suyos.

Han pasado siete años y Liam ha pasado de ser un príncipe de 18 años que ignora el mundo a un Rogue Alfa Rey de 25 años con una rica experiencia, nadie sabe lo que ha experimentado.

—Liam, cambia de dirección, ahora ve hacia el oeste inmediatamente. —El lobo interior de Liam, Federi, de repente le dió órdenes.

—No vuelvo atrás. El territorio del oeste no es adecuado para que mis guerreros lobo hagan una emboscada.

—Algo está pasando, oye, Liam, regresa, ¡Ella está allí!

—No me distraigas, Federi, más al este hay un buen lugar para mi gente.

—Maldita sea, eres un tipo tan terco a una edad tan joven, ¡Vuelve conmigo! Ella, nuestra mate está en el oeste, necesita nuestra ayuda, ¡Apúrate!

El Alfa Liam se fue a regañadientes al oeste obedeciendo a su lobo interior, lo que era diferente de su plan original, había planeado aprovechar el solsticio de hoy, que es cuando la luna está en su punto más pequeño, este es también el momento en que todos los lobos están en su fuerza más debil y por eso no debe bajar la guardia.

Poco a poco, descubrió que el olor a su alrededor cambiaba. El aroma a verbena, limón y canela poco a poco llegó a su olfato. Su lobo Federi no mintió. Sintió que los latidos de su corazón se aceleraban y su temperatura corporal subía. Su pareja lo estaba esperando.

Pero el creciente llanto de un cachorro resonó en los pastizales occidentales, obligándolo a estar alerta: Liam había caído en la trampa del enemigo y, si su debilidad era explotada nuevamente.. ¡No! Había pagado por su impulso hacía siete años, y ahora que era el rey de los Rogue, ya no podía correr esos riesgos.

Hizo todo lo posible por reprimir el deseo del lobo Federi en su corazón y mantenerse alerta. Los llantos del niño se acercaban cada vez más, y todavía no podía evitar pensar en cuando recién nació, su madre, que no era el estado de su padre Luna, murió al dar a luz, fue su abuela, Débora, quién lo sostuvo en sus brazos, sin importar el estatus de su padre, es un hijo ilegítimo, su abuela le daba todo lo que un príncipe debería tener.

—¡¡Socorro, ayúdanos por favor!!

Una voz femenina y débil llamó a su lobo Federi.

Cuando Alfa Liam apartó los arbustos, el cabello rubio de la mujer estaba esparcido en la hierba, su rostro pálido era muy terco, pero sus ojos esmeralda parecían brillar, como si hubiera algún poder guiando a Liam a tocarla.

—Ella es muy hermosa, tócala, ¡¡Ella es nuestra Luna!!

Un poderoso impulso quería que Liam se uniera rápidamente mental y físicamente con la hermosa joven frente a él. Él quería que ella fuera su reina, su Luna, la mujer que quería al lado del trono una vez establecido su imperio, para darle un montón de hijos, aunque él ni siquiera sabía su nombre en ese momento, Liam Blackmoon comprende que su lobo interior tenía razón al guiarlo hacia la loba de su destino, él sintió una enorme excitación dominarlo, como jamás lo había sentido.

—mi hijo..David.. lo siento, hubieras sido como tu hermano, serás un príncipe, debes sobrevivir, lo harás…

Mía pensó que iba a morir y le estaba diciendo sus últimas palabras a su hijo, pero algo extraño está pasando.

Un poder cálido pareció activarse en su interior, y le pareció ver un lobo rosado ingresando a su cuerpo.

Justo en ese momento, un arbusto se está moviendo, por lo que su corazón empieza a palpitar con fuerza, y quiere correr, pero su cuerpo está vulnerable.

—Quién… ¿Quién está ahí?— pregunta con su voz temblorosa, y sosteniendo a su hijo con más fuerza.