El Alfa Liam, respira profundamente llenando sus fosas nasales del olor a sangre que se filtra por las heridas de Mía, por lo tanto, decide no hacerle daño a sus órganos frágiles.
Cómo todo un Alfa que cuida lo que es suyo, saca un medicamento hemostático de su mochila. En ese justo momento, Mía cierra sus piernas porque no confía, piensa que le hará daño. —abre tus piernas— ordena pero ella nuevamente se niega, así que no tuvo remedio que usar su fuerza, al tener acceso mete su cabeza para examinar más la herida, así que sin más, le aplica y no le dice en lo absoluto lo que fue lo que le aplicó.Ella mantuvo sus ojos cerrados, porque cuando sintió la mano de Liam divagar en su intimidad, pensó que se iba aprovechar para hacerla suya, pero no fue así, por lo que ella cae en cuenta de que Liam no es un villano.Pero el lobo de Liam le sigue exigiendo domar a Mía, sin embargo el Alfa reprime el deseo de su lobo.—gracias…— susurra, no puede ser descortés después de que le salvó la vida—te ayudaré a sentarte— Liam se acerca, colocando una mano en el cuello de Mía y otra en la espalda, y justo en ese momento el alfa deja su marca en el cuello de su loba predestinada para impedir que ella lo abandoné.—¿Qué me has hecho? — Mia sintió una sensación de hormigueo en el cuello, no sabía qué era, pero Liam la tomo desprevenida y la beso, ella no odiaba su beso, su loba se despertó, ella no podía controlar al deseo de la loba que quería al lobo de este hombre, ella seguía concentrándose frente a un hombre tan extraño, es tan vergonzoso.Liam no podía explicar nada, deja de besarla.—No es nada, es solo que eres tan hermosa.Liam la observa detenidamente y ella a él.Mía parecía muy joven, aunque se casó con Domenik cuando tenía 18 años, y ahora solo tiene 20, sin embargo a esa edad ahora es madre soltera por lo que su vida es difícil.Al analizarla con la mirada, Liam pensó en el destino de su hijo ilegítimo y se juró cuidar bien de Mía y su cachorro.—serás solo mía, no pienso renunciar a tí— dijo Liam mentalmente.La noche fue algo incómoda para Mía, al estar cerca de Liam, pero era porque su loba deseaba ser poseída por él, sin embargo, ambos reprimieron aquellos deseos.Pero el sueño la venció, y se quedó dormida profundamente junto a su cachorro, pero como la noche es fría, Liam se acerca a ella y la abraza brindando su calor, y fue algo que la hizo dormir plácidamente.Antes que amaneciera, Liam carga a Mía entre sus brazos, para luego admirar el rostro delicado de su loba. Es hermosa, cejas pobladas, piel blanca, labios carnosos, y su cabello, su hermosa melena moverse con el viento la hace verse como una diosa, robándose el corazón del Alfa.Camino al territorio de los Rogue del sur, Liam no dejaba de estar preocupado, a todo momento miraba el rostro de Mía y también al cachorro con el cual sintió una conexión.—¡Tu deber era aparear a tu loba!— el lobo interior de Liam bufo, pues no está de acuerdo con Liam—Primero su salud, para todo eso habrá tiempo.—¡Debías hacerlo para que te diera un cachorro! ¡Eres un rey, necesitas un heredero!— espetó furioso—estoy haciendo lo correcto, no me molestes mas— Liam ignora a su lobo por lo tanto desapareceAl llegar a la propiedad de su abuela, Liam se detiene y Beta se acerca, estaba a una pequeña distancia. —Beta, ordena a la manada Rogue de confianza, que oculte mi verdadera identidad, nadie puede saber que somos los lobos Rogue por los momentos—como ordené mi Alfa— Beta se marcha rápidamenteLiam suspiró profundamente antes de ingresar a la casa. Ya que Liam piensa refugiar a Mía en la casa de La abuela Debora, la viuda recluida por enfrentar a su hijo y nieto blackmoon, vive cerca del reino que queda oculto entre los árboles.Son las 4 AM y a esta hora la abuela Debora está despierta, al escuchar el sonido de la puerta se asoma inmediatamente a la sala principal para ver a su querido nieto traer entre sus brazos a una mujer y un cachorro.—abuela Debora, necesito que cuides de estar mujer y que la sanes.—¿Pero quién es? ¿Y ese cachorro?—Es su hijo, ayúdales mientras recupere fuerzas, se viene una gran batalla.—vamos a tu habitación— ordenó y él asiente, pero no deja de mirar a Mía, la acuesta con cuidado junto a su hijo, para luego ambos salir de la habitación—¡Dame una explicación Liam! ¿Cómo puedes cuidar a una mendiga con un niño? este niño es tuyo?—Escucha, ella no puede saber quién somos nosotros y menos que yo soy un Rey, debes inventar algo, debo irme y prepararme para la guerra. —¿De qué guerra estás hablando?—Al alfa Domenik me declaró la guerra, lo percibí.—¿Te metiste con otro Alfa por culpa de esta joven? Pero ella no es digna de tí, incluso tiene un hijo, tú eres un Alfa y ella está casada...—Mia huía de él, la descubrió y ella es mi pareja destinada.—¿¡Cómo es posible!? —No tengo tiempo abuela, si ella te llega a contar algo me informas por favor, debo marcharme, dale a Mía elixir— Liam lo saca de su mochila y se lo entrega —esto la ayudará a recuperarse más rápido— se acerca y deja un casto beso en la frente de abuela. —por favor cuídate, no olvides que eres mi tesoro— ella suspira, Liam lo es todo para la anciana. Liam sale de la choza donde su manada esperaba por él para informarle que en la zona fronteriza han habido lobos vigilando constantemente como si estuvieran analizando para poder ingresar y formar
—¿Quién lo hizo?— los ojos del Alfa se tornan con destellos rojos intensos.—la Omega Leticia— el lobo Frost sonríe levemente. —¿La que atendió el parte de Luna Mía?— Beta lo mira con extrañeza.—esa misma— confirma la información.—¡Traerla ante mí! ¡Ahora!— el Alfa Domenik se marcha, necesita estar solo, está que mata al primero que se le crucé en el camino, pues Mía sea olvidado de él, además huye y se lleva a su otro cachorroEspera impaciente la llegada de la Omega, la cual trae como una prisionera y luego la lanzan al suelo. —te preguntaré una sola vez ¿Dónde está la princesa Mía?— el cuerpo de Leticia tiembla, sabe que las cosas que se le avecinan no son buenas —¡¡Responde!!— el rugido del Alfa la exalto—mi Alfa, no lo sé...—¿No lo sabes? ¡Te has atrevido a engañarme! Mía tuvo otro bebé y la ayudaste a escapar también, así que me dices ¿Dónde está? O tu hermano morirá—no por favo,r mi señor— súplica de rodillas —mi hermano no tiene nada que ver—¡Entonces habla!—se lo juro
Por lo tanto la actitud del padre y hermano de Mía cambió, al haberse percatado de que la loba de la princesa despertó.Una vez que la loba de la princesa Mía despierta, su poder como Alfa también aumenta. De hecho el poder de Alfa es muy difícil de ser controlado por otros, incluso el Rey Alfa, no tiene la capacidad de controlar el poder de otros Alfas.Todos mantienen la paz a través de la negociación y el intercambio de beneficios. Ahora el viejo solo puede chantajear a la princesa Alfa con moralidad y deber real. Pero ahora no están tan seguros.—¿Cuándo sucedió?— pregunta curioso el príncipe Alfa Jack. Mía hace silencio, se siente avergonzada por haber estado en los brazos de otro hombre que no fuera el Alfa Domenik, no es capaz de decir la verdad. —el recorrido fue muy largo, quiero irme a descansar, no permitiré que me quiten a mi hijo.Ella le da la espalda a los dos hombres, y el príncipe Jack mira a su padre para que proceda a decir algo que la retenga. —¡Alto ahí!— ordena
Mía, no se apartaba de su cachorro ni un instante, por lo que las comadronas ingresaron para ayudarla a bañar y atenderla como toda una princesa, Mía no lo permite, no confía en nadie. Lo que hace es pedirles que se marchen para hacerse ella misma hacerse cargo de su bebé.—mi pequeño David, debemos ser fuertes para no alejarnos, tu hermanito el principito me tiene preocupada, tan solo espero poder reunirlos a ustedes dos, y que vivamos juntos y verlos crecer, darles mi amor y protección, si te apartan de mi lado, mi vida no tendrá sentido— Mía deja un casto beso en la frente de su pequeño hijotoma asiento en la orilla de cama y alimenta a su cachorro mientras le canta una hermosa canción, dejándose llevar por la melodía, cierra sus ojos divagando en sus pensamientos, dónde de repente, aparece él, Liam, aquel guapo hombre que ella no puede olvidar, lo tiene grabado perfectamente en su mente, y tiene pensamientos tan dulces, en que él la tomó entre sus brazos y la gira dónde ella extie
Mía se está maquillando, sin ánimos frente al tocador.Su corazón se sentía como un juego ardiendo y la ansiedad la estaba dominando. Su visión se torna borrosa por las lágrimas que se deslizan por sus mejillas sin el más mínimo esfuerzo.Su sexto sentido le decía que su hijo se estaba alejando cada vez más de ella físicamente, pero nadie le ayuda a rescatar a David.No esperaba que las sirvientas entrarán repentinamente a la habitación. Las cuales enviadas por el príncipe Jack la arrastraron bruscamente y la obligaron a salir de la habitación para ir a la sala. Mía llora de manera descontrolada, tanto que su cabeza da vueltas, incapaz de mantenerse de pie y mucho menos caminar.—¡Por favor, date prisa! Princesa, el alfa te está esperando— dice una de las sirvientas—no puedo ir, escuché el llanto de mi hijo, no puedo ir— dijo en susurro desgarrador—lamento si la ofendo princesa, pero si no vas al salón principal, las doncellas seran castigadas por el príncipe Jack, y azotadas hasta l
Mía, no había sentido un calor que recorriera todo su cuerpo con ese beso que le está dando Liam, ella le corresponde el beso con la misma intensidad, está que se queda sin respiración, por lo que Liam se aleja y la deja respirar. —voy a recuperar a tu cachorro, y te prometo que estaremos juntos, yo quiero hacerte feliz ¿Entiendes?— la vuelve a besar y las lágrimas de Mía se mezclan con ese beso, deseaba que Liam hubiera aparecido antes en su vida, porque él la trata con cariño y la quiere proteger.—¿Lo prometes?— preguntó ella, aunque lo ve imposible—movere cielo y tierra por tí—entonces dime la verdad— se aleja un poco —¿Quién eres?Liam suspira, y la mira fijamente —soy el príncipe desterrado, Liam Blackmoon, por una traición de mi hermano, pero eso ya no importa, ahora soy El Alfa de los Rogué—¡Tú! Pero… dicen cosas malas de tí—¿Y tú crees que eso es cierto? ¡Mírame a los ojos!— ordena y ella lo hace —jamás te haría daño Mía, pero debes confiar siempre en mí, sin importar lo
—padre— interrumpe al hermano de Liam, el príncipe Alfa Lenny.El rey Alfa, se sintió aliviado, por la forma en que Liam lo estaba mirando, era como con ganas de matarlo. —¡Oh, vaya! Las murmuraciones son ciertas, el desterrado y malagradecido está en mi manada— se burla de Liam —no pienso perder mi tiempo con un tipo como tú, y usted señor Blackmoon, tiene los días contados si no me regresa al cachorro— Liam lo fulmina con la mirada. luego mira a su hermano, al que es su sangre pero lo traicionó.—sigues siendo un canalla— Liam le dijo a su hermano al tenerlo frente a frente.—tus palabras no me afectan, siempre me has tenido envidia— sonríe ampliamente él príncipe Lenny.Liam sabe que debe controlarse, ahora, lo que debe hacer es regresar con Mía, ella también lo necesita.—¡Eso lárgate como el perdedor que siempre has sido!— gritó Lenny, pero Liam se ha marchado —¡Hay que asesinarlo!— se apresura a decir, él que su hermano aparezca años después, no le agrada.—no podemos hacerlo,
Las manos de Mía tiemblan, su angustia es inevitable y más, al ver cómo Liam se acerca a su padre y el anciano al verse acorralado, se arrastra por el suelo, retrocediendo. —¿¡Cómo te atreviste!?— la voz de Liam, es más gruesa, es intimidante, ver a su padre le repugna el alma—¡No puedes asesinarme!— el Rey Blackmoon, intentó colocarse de pie, pero Liam, le dió una patada en el estómago que le hizo perder el aireCuando Mía observa que saca su espada filosa, grita —¡No por favor! ¡No te ensucies las manos con ese maldito Rey— se acerca a Liam —¡No me hables Mía!— Liam está cegado por la rabia, la sangre le hierve, y quiere ver sangre, quiere matarlo por meterse con su loba, por lo que alza su mano, y Mía no tuvo opción que intervenir, colocándose en medio de ambos —mírame, estoy bien, me has salvado, corazón, no cometas una locura— súplica, pero Liam está endemoniado, su lobo Federi, está listo para ver sangre, para darle el poder a Liam de acabar con un Rey, su padre, su propia sa