Sostenía con fuerza su muñeca luego de lograr atraparla de milagro, debajo de ella solo estaba el vacío que la llevaría a una muerte segura.— ¡Erick, No me sueltes! — El grito ahogado salió de su garganta, viendo a su ex jefe al borde de la ventana con una inusual expresión angustiada, él estaba sujetándose de la pared para evitar que su peso lo jalara también.— ¡¿Ahora sí tienes miedo de morir?! ¡¿Qué creíste que iba a pasar si te caías?! — Exclamó, de no haber sido por su agilidad al atraparla ella ni siquiera hubiera tenido oportunidad de escuchar su regaño. Erick continuaba sujetándola con fuerza, tratando de alzarla. — ¡¿Por qué pesas tanto?!Anastasia decidió ignorar su orgullo herido por el comentario.Erick tomó aire, con las manos ocupadas y sin la oportunidad de llamar a alguien buscando auxilio trata de buscar una forma segura de subir a Anastasia; se le ocurre una idea bastante arriesgada...— Escúchame bien, a la cuenta de tres voy a soltarme para sujetarte con ambas ma
Las horas pasaban, interminables, a su parecer.De tanto tiempo que llevaba sentada se le entumecieron las piernas, pero Gael le prohibía cualquier tipo de movimiento brusco mientras la trataba como a su conejillo de indias.— Esta mascarilla rejuvenecerá tu piel y te verás como de treinta otra vez ¿No es maravilloso?— T-tengo veinticinco. — Contesta Anastasia en voz baja.— ¿En serio? — Avergonzada por la reacción sorprendida de Gael, ella asintió. — Cielos, que jodida estás ¡Roxanne, necesitaremos más tratamientos rejuvenecedores! ... Y cera para depilar- Mucha cera — Gritó a su asistente principal, quien salió corriendo a buscarlo. — Tranquila, niña, estás en buenas manos.Esas ''Buenas manos'' eran lo que más le preocupaban.Probablemente los gritos de dolor y agonía por parte de Anastasia cuando le retiraban de golpe la cera traspasaban las paredes hasta el punto en que se escuchaban por todo el edificio, múltiples veces habían entrado guardias de seguridad confirmando que no es
Habían pasado tanto tiempo con Gael que el atardecer cayó encima de ellos cuando salieron del edificio, Erick iba distraído contestando mensajes mientras Anastasia caminaba a unos pasos de distancia, recordando el consejo de Gael cada vez que se sentía inferior al mirar al imponente Erick.— ¿RCO es una de las compañías de tu padre? — Preguntó de la nada. —Lo había estado pensando, RCO en realidad significa Russo's Company ¿Verdad? Leí un par de artículos sobre ella en internet, es el número uno en cuanto al entretenimiento y el modelaje, una verdadera joya que perseguir. Pero tu nombre no aparecía en los registros hasta hace poco, en tu lugar había otra persona... Uhm, ¿Cuál era su nombre? — Lo vio detenerse, lo cual le dio la oportunidad de alcanzarlo — ¿Marcos? ¿Matthew? ¡Ah, ya sé! Se llama Máxim... ¡Ugh!— Escúchame bien porque esto solo pienso decírtelo una vez: Nunca en tu vida vuelvas a mencionar ese nombre ¿Me escuchaste? Jamás. — El odio con el que Erick apretaba su cuello y
Esa simple pregunta fue más que suficiente para que la criada se llenara de cierto pánico, no quedándole más opción que ceder las llaves para ahorrarse problemas. Sin embargo, los oídos de Erick atravesaban paredes, por lo que Anastasia –Pese a no haber hecho nada- no sabía que aquella sería la última vez que vería a aquella mucama.Erick estaba ahí dentro de la habitación, en un enorme sillón con un cigarro en la mano, un vasito de tequila en la otra y los ojos cerrados.— ¿Qué te trae por aquí? No sé si te habrán hecho llegar la noticia de que estoy cansado y no quiero recibir a nadie, así que, sé buena y márchate ahora.Anastasia no iba a permitirse ser echada tan lamentablemente así que no le hizo caso— Deja de usar pretextos para evitar tener que enfrentarme, sabes perfectamente a qué vine hoy. — No era momento de retractarse y salir corriendo, Anastasia debía ser valiente. — ¿Por qué soy la única persona que no sabía que la boda será este fin de semana? ¿Acaso no soy la novia?
Entre sus manos reposaba una fotografía y el nombre de una mujer.— ''Raquel'' — Releyó por milésima vez dentro del colgante que había tomado sin que Erick se diera cuenta el día en que fue al sótano, la mujer de la fotografía era hermosa, tenía una piel juvenil y un sedoso cabello rubio cuyos mechones revueltos por la brisa casi le cubrían la cara, con una sonrisa impecable, contagiosa y un sombrero que se sujetaba para que no saliera volando.Probablemente la fotografía había sido realizada en la playa.Anastasia había deducido que se trataba del verdadero amor de Erick, ¿Por qué otro motivo guardaría la foto de una chica entre sus cosas preciadas? Tal vez ella lo abandonó y la decepción de un corazón roto lo llevó a buscar consuelo en las demás mujeres, o quizá era su amor no correspondido, podría tratarse también de una amiga de la infancia.Entre las actas de divorcio y demandas no encontró ningún documento con el nombre de Raquel, por lo cual era poco probable que hayan estado c
El vehículo aceleró y se marchó con Félix en él, llevándose todas las esperanzas que le quedaban a Anastasia.— ¿Qué decías sobre el amor que todo lo puede? — La burla en el tono de voz de Erick la sacó de quicio.— ¡Eres un descorazonado! ¡¿Por qué tienes que arruinarlo todo?! — Dentro de su mismo dolor y las lágrimas que no dejaban de caer por sus ojos tristes comenzó a lanzar golpes contra el pecho de Erick, quien no se movió en lo más mínimo. — ¿Por qué siempre tienes que salirte con la tuya?Sintió los brazos de Erick rodeándola en cuanto su llanto se hizo casi imparable, transmitiéndole el calor de su cuerpo. — Eso es porque sigues confiando en las personas equivocadas.— ¿Y en quién se supone que debería confiar? ¿En ti? No me hagas reír — Anastasia lo apartó, secándose las lágrimas combinadas con maquillaje corrido en su rostro. — Lo conseguiste, me has capturado ¿Estás contento ahora? ¡Bien! Continuemos con esta maldita farsa y terminemos con todo ¡¿Qué más da?! Ya arruinaste
Aunque la causa de la visita familiar había tenido un propósito diferente.Zathrian, Hunter y Kailani habían llegado hora y media antes de que Anastasia bajara hasta encontrarse con ellos, Erick se encontraba trabajando en su estudio cuando la noticia le fue dada. Llevaba un tiempo largo sin entablar conversación con alguien de su familia que no fuera su padre, sin embargo, no era como si no los estuviera esperando.— ¿Debería decirles que regresen otro día? — Preguntó Emily.— No se irán hasta que alguien les dé la respuesta que necesitan saber. — Erick tuvo que dejar todo de lado para ponerse de pie, aún era temprano por la mañana. — Preparen el desayuno para todos, incluida Ana, despertará en cualquier momento.Sus odiosos hermanos ya lo estaban esperando, cada uno con un interrogatorio diferente para él.— Hasta que por fin te dignas en dar la cara. — Zathrian fue el primero en hablar, de brazos cruzados. Fue el único que no se puso de pie cuando Erick llegó — No muestras tu rostr
La situación se volvió delicada de un momento a otro, Anastasia podía sentir la presión en el ambiente con solo observar la mirada insistente que le dedicaba aquella mujer, ¿Quién era y qué quería?— No sé de qué hablas. — Giró la cabeza hacia otro lado, suspirando de por medio. Al menos debía ser lo suficientemente valiente como para no quedar en un callejón sin salida tan rápido. — ¿Qué tendría yo para esconder?— Porque durante tu boda tenías cara de ser la mujer más desafortunada de todo el mundo, y créeme, cariño, con Erick algo como eso simplemente no pasa. Aunque hayas engañado a los demás poniendo una sonrisa de niña buena ten por seguro que no soy como todo el mundo y nada se escapa de mi ojo de halcón, cuando sospecho algo NUNCA fallo. — La familiaridad con la que hablaba le confirmó el hecho de que no se trataba de cualquier mujer. — Algo están ocultando ustedes dos.Pero Anastasia no se dejó acusar tan fácilmente.— ¿Qué es lo que pretende insinuarme al decirme todo esto?