¿Queeeeee?? Los interrumpen de nuevo !!! creo que ya es una misión de parte de todos no dejarlos tranquilos, pero que creen que quiera el Alfa Emilio.
Oleika respira profundo necesita mantenerse con calma.Ya no estaba dispuesta a tolerarlo más, no piensa dirigirle la palabra a Malcolm.Aún siente su piel hormiguear ante tanta necesidad ignorada, ante la sensación de ser abandonada a pesar de haberse entregado en cada beso, en cada caricia.Alfa Líder Malcolm se acerca a ella en su forma lobuna, después del mensaje que habían recibido de parte del Alfa Líder Emilio, Malcolm había decidido iniciar el viaje, esta era la oportunidad que necesitaba desde hacía tantas décadas.Pero Oleika se había mantenido siempre en silencio, metida en un pequeño auto que sería utilizado para cuando Clara se cansara.Con su forma de labuna, Malcolm tenía prácticamente imposible comunicarse con Oleika pero sus señales eran claras, se mantenía con los ojos en cualquier otra dirección menos en la de él, los brazos cruzados en su pecho y una actitud poco pacificadora.~Necesito descansar~ dice Clara por el enlace mental conteniendo lo humillada que se se
Malcolm llegó ansioso hasta el campamento, llamó la atención de absolutamente todos los presentes.— Malcolm ¿qué pasa?— cuestionó Clara quien ya estaba en su forma humana.— Oleika, no se siente bien— dijo Malcolm acercándose de nuevo al auto, agradeciéndole a Mila por ser tan precavida.Justo antes de salir, la joven curandera había llegado con un morral en el que había distintas sustancias, curas y antídotos.Recordó las indicaciones.“Cada uno tiene una nota no las combines, solo observa los síntomas y utiliza la que creas que es mejor”— Solo lo hace para llamar la atención, no se las des— dijo Clara caminando detrás del Alfa Líder con paso déspota y los brazos cruzados en el pecho.Malcolm sonrió esta vez sin gracia.— Tócala ¿te parece esto una especie de chantaje?— cuestionó Malcolm dando solamente una fracción de segundo para que Clara viera el estado de la pelirroja.En este punto, los ojos de Oleika estaban completamente blancos, su cuerpo sudaba y temblaba ante la temperat
Mientras el enfrentamiento de ambos machos ocurría, Clara se mantenía en segundo plano observando el fuego que se avivaba en los ojos de ellos.Los observó salir, deseosos de probar su punto contra el otro, pero ella también tenía cosas en las que pensar.Desde el otro lado de la cueva, Clara observó que Oleika aún estaba enferma.Su cuerpo temblaba, su respiración se escuchaba agitada e intentaba agarrarse a cualquier cosa para apretarla por el dolor que la consumía.“Pobrecita pelirroja, esta calentura creo que no te gusta tanto como la que te quitas con mi pareja desgraciada” pensó la Luna de la manada.Se mantuvo en absoluto silencio, inmediatamente después para observar la estructura de la cueva y al otro lado de la entrada se encontraban rocas sueltas, graba diminuta caía brincando de una roca en otra hasta llegar al suelo, donde ya había mas acumuladas, indicando inestabilidad— Perfecto —jadeo con una sonrisa.Clara se acercó a la pelirroja.— ¿Te encuentras bien?— le preguntó
Año 1500En una noche oscura y llena de frio, en medio del bosque en el que cada quien debe luchar por mantenerse con vida, se llevaría cabo una lucha ensangrentada entre dos razas que solían coexistir con una superflua paz.Hombres Lobos y brujas.En específico un aquelarre… Leiia.El cual es uno muy especial, ya que son del linaje más antiguo de brujas, por lo tanto pueden obtener respaldo y poder de sus antecesoras.Un linaje que pasó de generación en generación, donde este don solo lo podían tener las mujeres, a los hombres se les trataba como seres inferiores. En medio del cambio de estación en época de celo los hombres lobos después de varias noches, comenzaron a desaparecer sin dejar rastro alguno, ninguna manera de localizarlos, sin cuerpos por identificar.A pesar de los intentos exhaustivos de los compañeros de manada, nada daba resultado.Hasta que una noche una información clave llegó a los oídos del alfa de la manada Garra dorada.— Hijo necesito de tu apoyo, no podemo
Actualidad— Solo quiero llegar a casa, hoy es el día, hoy es...— Se decía Oleika emocionada a pesar del cansancio que la consumía, con unos cuantos conejos en sus manos.Al tener veintidós años y no tener una loba, se sentía frustrada y sobajada por todos en la manada Brisa Nocturna, todos los integrantes de la manada cumplían una función.Cazar, construir, ser parte del servicio imperial o entrenar para ser guerreros, pero en cada una de las tareas la pequeña y frágil Oleika no podía llegar a término, siempre se agotaba y alguien más debía pagar por su ineptitud.Sin tener a su loba de apoyo físico y emocional, muchas de las cosas eran prácticamente imposibles para ella.Además de siempre ser vista con desdén y recibir malos tratos de muchas personas que la rodeaban.Golpes, desprecios, burlas, siempre mantenía la mirada en alto, sin importar lo difícil que fuera…Pero estaba dispuesta a ganarse su lugar en la manada.Por lo tanto había desarrollado distintas estrategias para compe
Cuando Oleika levantó la mirada, se encontró con su madre, quien la veía con determinación aunque siempre la había mirado de forma diferente a como lo hacía con su hermano, en este momento, ella le provocaba un escalofrío.— Mamá— Susurró ella al mismo tiempo que daba un paso hacia atrás discretamente.— Oleika, esta es mi recompensa para ti. La trampa que diseñaste es realmente útil.— Ella elogióAl oír esto, Oleika se levantó a pesar del dolor, levantó las flores en sus brazos y dijo— Mamá, estas son para ti. No están rotas.—¡Jajajaja! ¡Es tan estúpida! —Fraly agarró el ramo de flores silvestres y lo arrojó a sus pies—. ¿Todavía no lo entiendes? No eres más que una inútil. ¡Solo sirves para ser una esclava! Pero no te preocupes, hemos encontrado un comprador para ti.Provocando que Oleika cayera en el suelo después del impacto, un escalofrío contundente la atravesó por completo.— ¡Ah! pero ¿por qué?— Cuestionó Oleika al mismo tiempo que buscaba la mirada de su madre, pero lo que
La noche arreció y Oleika sentía mucho más frio, la jaula estaba llena de mujeres lobas, a pesar de estar en horribles condiciones, seguramente eran más fuertes que ella.De manera discreta se acercó a la loba que tenía a su lado y en cuanto tocó su piel un escalofrío satisfactorio la recorrió.Después de sentir que casi se congelaba un poco de calor era solo una esperanza en medio de tanto dolor.Pero el descanso duró poco, un golpe fuerte la hizo que se impactara de lleno con uno de los barrotes que tenía a su lado.— ¡Ah! — Gritó ella ante el dolor del impacto.— Aléjate de mí— ordenó la loba, quien a pesar de encontrarse en las mismas condiciones que ella, siendo una esclava, amarrada de manera humillante, la veía con superioridad.— te… tengo fri… frio— tartamudeó la chica.— ¡Silencio!- Gritó uno de los guardias que custodiaban la jaula.Un momento después Oleika apretó los dientes para no gritar, acababa de recibir una cubeta con agua helada como castigo, si sentía que le dolía
El clima se siente perfecto, los rayos del sol son de la temperatura idónea para sentirlos sobre la piel.— Patrick te he extrañado demasiado— Le dice Oleika con una sonrisa en el rostro al verlo llegar desde la densidad de los pinos— mira nuestro pequeño cachorro ya puede hablar.Un niño pequeño de poco más de un año, idéntico a Patrick está jugando con unos juguetes que Oleika le había hecho con sus propias manos.Oleika se siente feliz, en su cabaña llena de flores y con mucho amor.Su mate la abraza y la besa con mucha pasión y ella no puede evitar suspirar al no poder contener tanta felicidad en ella.Entre sus brazos se sentía plena y segura.De pronto escucha una palabra que la desconcierta.— ¡A todos, arránquenles el corazón! — ese grito hace que Oleika cierre los ojos impactada por lo que escucha y el tono tan grueso de la voz, pero gira la mirada y no nota nada distinto.La mirada de Patrick es alegre y su sonrisa es grande. ¿Se lo estaría imaginando?— ¡AH! ¡Maldito!— De n