No la conocía, pero sabía que las mujeres eran seres más emocionales que los hombres y ella mucho más, porque aún era una chiquilla, con cuerpo de mujer, un cuerpo infartante, pero no dejaba de tener 22 años y posiblemente muchas veces se comportaría de forma más irracional.

-Nena, sos la mujer que más deseé en mi vida, cielo, la estábamos pasando muy bien, entiendo que esta situación no es la mejor, pero es lo que tenemos.

Piero no le podía prometer nada, aunque sabiendo que si le decía palabras más románticas, la chica cedería, no se las diría, eso sí era complicar la situación.

-Nena, sos una escultura, sos la perfección hecha mujer.

No fue romántico, pero la hizo sentir única y ella cayó con sus palabras, al fin y al cabo era una chica que no tenía tanta experiencia y sentía que Piero la llevaba a otro universo cuando le hacía el amor.

Piero se daba cuenta que los besos de Mora estaban siendo importantes para él, pero pensó que tenía el aliciente extra de saberla de Amadeo y que s