Capítulo 15

Sara se levantó más temprano de lo habitual. El coche de línea de la mañana pasaba por Cuñera a las ocho menos cuarto. Se vistió apesadumbrada por saber que Tristán finalmente desaparecería de su vida. Él sí se iría de Cuñera. Su confesión de la noche anterior le había sonado demasiado seria y dolorosa como para ser una mentira, como para que no hubiese más que querido reírse de ella.

Desayunó sola. Su padre ya habría comenzado su turno a las siete, probablemente se acaba de ir de casa. Pensó en él. Pensó en ella, cuando también quería ver fantasmas, o al menos uno, el de su madre. Hacía tiempo que había dejado de creer en ello.

Tristán había traído de vuelta todos aquellos recuerdos y ahora se los volvería a llevar.

Llegó a la pensión sobre las sie

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP