122. Las visitas

Hadriel sintió una mezcla compleja de emociones. Había una especie de alivio al saber que, al menos por un tiempo, las cosas habían vuelto a la normalidad. Pero también había una renovada determinación. Arthur seguía siendo un rival formidable, y aunque ahora estaban en paz, esa paz era temporal. Respetaba a Arthur, quizá más que antes, pero también sabía que no podía bajar la guardia. Esta rivalidad era lo que mantenía afilados sus instintos, lo que lo impulsaba a ser mejor, a no conformarse.

En el fondo, Hadriel también sentía una gratitud silenciosa hacia Arthur. Había manejado la empresa en su ausencia, había tomado decisiones difíciles y, al final, había demostrado un nivel de honor que Hadriel no podía ignorar. Pero esa gratitud no mitigaba la realidad de que, eventualmente, volverían a estar en lados opuestos. La competencia entre ellos era inevitable, pero también era una de las cosas que definía su relación.

Al terminar la conversación, Hadriel se sintió más centrado que nunc
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo