Capítulo 14
Un hombre y una chica me lavaron el cabello y me lo hidrataron, me lo pintaron, estaba nerviosa, nunca me había pintado el cabello, me sentía como en una película de princesa, el cambio no sería radical, solo le darían vida a mi cabello con un tono de color parecido a mi tono natural.

Ana entró, metió un par de cajas y las dejó sobre la mesa, sonreía contenta.

—En la caja pequeña hay maquillaje y en la grande ropa, ay, qué emoción —dijo.

Sentí vergüenza, no sabía que iba a pensar de todo aquello.

—Ana, es un favor que haré al señor.

—No me expliques nada, ya él me contó, los ayudaré con los detalles, peinarte, vestirte y eso.

No me reconocía en el espejo, mi cabello se veía con vida, el chico que me arreglaba el cabello me sonrió en el espejo admirando su trabajo.

—Lista, estás lista, querida —dijo, la chica que lo acompañaba sonrió y asintió mirándome.

—Gracias, muchas gracias.

—Debes mantenerlo hidratado con cremas.

Salieron de la habitación después de que Ana les pagó. Me sentía tan
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP