33. HANNAH.

Los dolores eran fuertes y constantes. Después de romper fuente mi madre y Clara llamaron al hospital para notificar que iría en camino, me cambié de ropa y en coche nos dirigimos al hospital, en ese momento las contracciones eran menos dolores y soportables. Mientras me registré y subí al área de parto me despedí de mi madre y Clara, que se quedaron en sala de espera, mientras una enfermera me conducía en una silla de ruedas por un gran pasillo con puertas de lado y lado, al fondo había una gran puerta blanca dividida en la mitad, se escuchaban gritos desgarradores a medida que llegaba a la puerta, por un momento me sentí nerviosa, ingresé a una de las habitaciones que estaba antes de la gran puerta.

Los gritos aún se escuchaban, la enfermera como adivinando mí preocupación por aquellos quejidos, me sonrió y me consoló - No se preocupe, es el sonido más bello del mundo-. dijo. Me hizo pasarme para la cama, prometiendo que el doctor ya venía a verme.
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo