El viernes llegó, después de una semana de subidas y bajadas, estaba emocionada que iría a ver a mis padres, era algo que me hacia ilusion y sabia que estando alla, me sentiria tranquila y segura de cualquier pensamiento con Varys. no quería generar ninguna expectativa con absolutamente nada, nada había pasado, así que simplemente, todo era cuestión de respirar, desatar nudos y avanzar. No quería enredarme en las redes del amor y más si no era correspondido. Saliendo del hotel con una pequeña maleta para el fin de semana en casa, veo que cruzando la calle está la camioneta de Varys estacionada, por un momento pensé que estaba equivocada, no había recibido una llamada suya por ningún motivo, debía ser un error, pero nuevamente, estaba equivocada. - ¿Te vas ? Giro sobre mí y veo a Varys saliendo detrás de una de las columnas de entrada al hotel caminando hacia mi. Mi corazón en ese momento empezó a latir con más fuerza, con más rapidez, creo que cualquiera que estuviera cerca a mí
El fin de semana en casa paso muy lento, pase tiempo con mi familia, visite a mis amigos y pude pensar mucho en aquel suceso con Varys, por más que hiciera, no podía sacarlo de mi cabeza, en todo momento estuve pensando en él y en sus besos, su cuerpo, su olor. todo de él se había apoderado de mí… La idea de él, de como era, ya estaba impregnada en mi. Recuerdo que al despedirse esa noche, ya había abordado el autobús que me conduciría a casa, recibí su primer mensaje: "Piensa en mí, yo, sin duda lo haré. me gustas mucho". Me llené de mucha emocion y alegria; no daba crédito a que el hombre que me gustaba, sintiera algo por mi, era algo tan maravilloso que lo atesoraba tan cuidadosamente que pensé en ese momento, que esa noche con Varys en aquella calle oscura de luces amarillas había sido sin dudas la declaración de cariño que atesoraria para toda la vida. *********** - ¿Me vas a contar o te vas a quedar mirando lejos todo el día? Sonreí. - Clara, No tengo idea por donde em
Nuestro juego de novios a escondidas siguió por mucho tiempo, siempre que teníamos tiempo a solas nos desvivíamos adentrándonos en nuestras pasiones y nuestros sentires. yo me sentía en una burbuja, frágil pero poderosa, me parecía maravillosamente mágico estar así, siendo amantes, novios y amigos a escondidas, de noche, en silencio, éramos solos nosotros, el resto del mundo dejaba de existir cuando y solo eramos nosotros en nuestro pedazo de cielo. Una de tantas noches de pasión fue interrumpida por un golpe en la puerta de mi habitación, al solicitar saber quien osaba interrumpir en nuestra sucursal del cielo; nos sorprendimos al escuchar la voz y el nombre de quién llamada. - Soy Jorge. Ambos nos miramos las caras, entre sustos y risas nos quedamos un instante sin saber que hacer, una vez reaccionamos, le dije a Varys que aguardara en la habitación y yo recibiría a Jorge en la sala. Me coloque una bata y salí a recibirlo. - ¡Jorge! que bueno verte, ¿como estas? - Disculpa p
Una noche en que ambos estábamos desnudos a la luz de una lámpara que intentaba disimular su luz con la intención de no molestar nuestro encuentro; al terminar las caricias y el acto del amor, nos dimos cuenta que ya teniamos mucho más de un año amandonos a escondidas, de cómo el tiempo había pasado tan discretamente que no lo habíamos detallado; y aunque celebramos cada mes juntos notamos que el tiempo se nos estaba yendo en noches apasionadas y escapes furtivos a lugares que ya asumimos como nuestros escondites de amor. para nosotros las mañanas no existían, eran prohibidas en nuestra relación, tener que estar todos los días como desconocidos, como compañeros en el trabajo, ya se nos estaba dando tan natural que parecíamos desconocidos; mientras, al llegar la noche, nos rendimos a nuestros cuerpos y nuestras almas, éramos uno. y eso era lo más hermoso que teníamos, nuestro amor... en secreto... en silencio. - ¿No estás cansada de estar así? - No puedo negar que a veces me encantar
Queridos lectores, espero que les esté gustando esta bella historia que he realizado con mucho amor para todos ustedes, esperen a los siguientes capitulos que estaran llenos de muchas sensaciones que los haran vibrar. Les agradezco, SUSCRIBIRSE y pueden dejar todos sus comentarios en la descripción y tambien en cada capítulo, y me gusta, asi sabré que tanto disfrutan esta obra y me sentiré más cerca de ustedes. Acompañenme en el camino!! Gracias totales!!! R.R
En tres semanas que habían pasado desde nuestra despedida, no había respuesta de Varys por ningún lado. Jorge me decía que hablaba mucho con Karl por teléfono y con él muy pocas veces llamaba por algún detalle en particular. Yo seguía trabajando normalmente, pero con una nube de incertidumbre en mi cabeza; no se que pasaria en su cabeza, no se como todo cambio de un momento a otro Varys se esfumó y yo quedé echa polvo. Mis preocupaciones de vez en cuando se notaban; Jorge en ocasiones me molestaba diciendo que las constantes indirectas de Karl me tenían perdida y que ya no sabía ni lo que hacía en el trabajo. En ocasiones quería salir corriendo de allí y gritar; Eso era lo más triste amar, amar en soledad, en silencio. Era un amor cruel y desesperado, me sentía desgarrada por dentro, sentía rabia y temor. Varys había era mi gran amor pero también fue mi gran temor. Una mañana después de varias semana sin tener noticias suyas, nuevamente llegó, una tarde, cuando ya todos estábamo
La mañana siguiente hice un intento de ocultar mi rostro hinchado de llorar con maquillaje. aunque parecía sutil, se podía notar lo maltratado de mi rostro. Sin más magia en mis bolsillos me dispuse a salir del hotel a pedir un taxi en el lobby. No pasaron ni dos minutos cuando lo vi, su camioneta estaba en la acera del frente estacionada, eso quería decir que Varys estaría en el hotel, pero no lo veía. De repente lo sentí, pude sentir su calor y su perfume detrás de mí. doy media vuelta y allí estaba. Se vía cansado, incómodo, su cabello un poco desordenado y me atrevía a pensar que era la mismas ropas que tenía puestas aquella tarde en la oficina. - Te llamé. - Dijo con voz cansada. Lo miré con enojo. - No llevaba mi teléfono conmigo. - Respondí fríamente. - ¿Donde estabas? Te estuve esperando aquí toda la noche. ¡te llamé mil veces! ¡Estaba desesperado! Le respondí con tono muy frío y cruel. - ¡ahora ya sabes como he estado yo todas estas semanas! Me miró. En su
Al salir a buscar mis cosas y salir de la oficina, pude ver a Varys en su despacho caminando de un lado a otro hablando por teléfono. Se notaba inquieto, con rabia, sus ojos se veían envenenados de ira. Pensé en hablar con él en ese momento, pero lo dude, de repente sentí sus ojos cruzarse con los míos. Simplemente lo mire, tomé mi bolso y me fui de aquel lugar, no miré atras, no se como quedó Varys, no se que vio, no se que pensó en ese momento, quizás, quizás lo mejor fue irme y no pensar más en lo que había pasado. En el hotel me di una ducha y cené un poco, me dispuse ir a la cama temprano, ya habían pasado unos días desde aquel encuentro con Varys en la puerta del hotel, sentía que ya podía hablar con él, ya podía enfrentar cualquier cosa. aún no dejaba de pensar en lo que pasó en la oficina, su mirada, en que podia estar pensando, no estaba segura si fue por el comentario de Karl o si era otra cosa, pero definitivamente Varys, hoy no se parecia al Varys que yo amaba. Esa n