Rara vez su mente se desviaba y la llevaba a pensar en él, pues le costó mucho aceptar que lo suyo terminó en el momento que él no la escogió a ella. Entendía que él la amaba, pero no estaban en la misma página porque siempre quisieron cosas diferentes. Clarisse incluso estaba dispuesta a renunciar a su deseo de ser madre por él, pero Soren fue incapaz de considerar la idea de irse con ella.¿Por qué lo que él quería era más importante?¿Por qué siempre debía ser ella la que cediera?En una relación estable hay momentos en los que uno haga algo que el otro quiera, aunque no le guste. Un ejemplo claro de eso eran Tessa y Galen que, a pesar de que tenían muchas cosas en común, también tenían otras que los llevaba a una bifurcación. Esos eran los momentos en los que uno cedía para hacer feliz al otro y luego viceversaSin embargo, era algo que debía nacerle a Soren, ella nunca lo iba a obligar a hacer algo que no quisiera, incluso cuando era algo que esa anhelaba. Por supuesto que él ten
Brion no había podido dormir en toda la noche, era difícil considerando que podría ser asesinado mientras descansaba, así que la ansiedad no lo dejó pegar ni un ojo. Pasó toda la noche sentado en el borde de su cama viendo su habitación que le sorprendió que siguiese exactamente igual que cuando se marchó. La verdad llegó a pensar que e algún momento tirarían toda esa ala para construir algo nuevo, pero ahí estaba todo igual.Una repisa estaba llena de todos los libros que leyó durante muchos años, mientras que otra contenía sus trofeos de equitación, sus reconocimientos de piano y violín. También encontró un pequeño hipopótamo morado de peluche, un juguete que le regaló su padre cuando era muy pequeño. No tenía una marca, no había costado millones, sólo era un juguete viejo que lo acompaño durante su infancia.Sin embargo, había algo en eso que no tenía sentido.—Siempre te gustó ese juguete —el chico se giró para encontrar a su tía Seniah en la entrada. Llevaba una taza de café hume
—La verdad se siente muy extraño. ¿Soy la única que piensa que nos están vigilando? —Patrice miró su alrededor con desconfianza.—No, sin duda nos están observando —Owen apuntó con la mirada las cámaras de seguridad—. Me sorprende que aún no estemos acorralados por el resto de esta familia de dementes.—Pareces algo…, agitado. ¿Pudiste dormir algo anoche?—Soy el jefe de su equipo de seguridad. Debo permanecer alerta en todo momento para resguardarlos —declaró con más seriedad de lo habitual en él, lo cual resultaba extraño para sus amigos.Jeremy se acercó y colocó la mano sobre su hombro para después darle un ligero apretón amigable. El trigueño lo miró cabizbajo, pero no dijo nada más.—Soren… Brion nos contó todo, incluso lo que le pasó a tu hermana… —el chico desvió la mirada. No quería hablar sobre eso—. Lamento lo que le pasó y que tengas que estar en esta situación. Debe ser horrible el estar tan cerca de quién asesinó a tu hermana y no poder hacer nada para que pague.—Él pag
—¡¿Qué significó eso?! —bramó Zadriel, colérico.Luego del gran anuncio que dio la reina ante todos los medios de comunicación la rueda de prensa simplemente terminó y ante una gestó de la reina, los guardias desalojaron a todos. Para cuando la familia real reaccionó ante lo que estaba pasando se giraron a ver a Brion sin saber cómo actuar.—¡¿Cómo se te ocurre hacer eso?! —exclamó Verona—. ¡No puedes hacerlo!—¡Él es un traidor! —gritó Carmina—. ¡No tienes derecho para traer un maldito traidor al palacio y decirles a todos que será rey! ¡¿Tienes idea de cómo eso nos hará ver ante la sociedad?! ¡Nuestra imagen es lo primordial y la has de arruinar con esto!—¡Brion no será rey! ¡Daliah será coronada y no hay ninguna discusión sobre eso! —declaró Zadriel. Sus venas se marcaban por todo su cuello enrojecido—. ¡Tú, bastardo de mierda, no permitiré que destruyas todo lo que representa a esta familia! ¡No tiene ningún derecho sobre la corona después de que renunciaste a todo lo que implica
—¡Es viernes y el cuerpo lo sabe, amigos míos! —exclamó la pelirroja al entrar al apartamento, se detuvo a bailar un poco en la puerta y luego siguió hasta la sala—. Llamen a una niñera para el mocoso, hoy es viernes de Lorna.—¡No soy un mocoso, vieja! —le gritó el niño.—¡A callar, gnomo de jardín!—¡Vieja gritona!—¡Y tú eres un niño tonto que aún se hace pipí en la cama! ¡Le diré a tus compañeros de clase y se burlaran de ti!—¡Mamá, la vieja vecina me está molestando! —se quejó casi que a gritos.—¡Mírenlo llorar! ¡Está llamando a su mami! ¡Eres un llorón cómo el desastre que tienes cómo padre! —se burló en plena carcajada, pero pronto un cojín aterrizó contra su cara—. ¡¿Quién fue?!—¡Ya deja los gritos, por amor a todo lo decente en este mundo! ¡Me vas a volver loco! —Galen le reclamó y le lanzó otro cojín—. ¡¿Y a quién llamaste desastre?! ¡¿Acaso ya te fijaste en cómo está tu habitación?! ¡Parece que ahí vive un cerdo de doscientos kilos?!—¡¿Acabas de llamarme gorda, tú tonto
Bebió de un trago el líquido oscuro del vaso y pidió otro.No estaba seguro desde cuando estaba bebiendo, sólo sabía que en se sentía malditamente bien con cada trago. Era cómo si el alcohol ahogara todas sus preocupaciones y paulatinamente fuese olvidándose de todos los problemas que surgieron en sólo un día. No es que fuese del tipo de persona que cree que todo se soluciona con lo que hay al fondo de una botella, pero en ese momento lo único que quería era olvidar quién era, donde estaba y lo que pasaba.Toda su vida, todo por lo que luchó se había ido al carajo en sólo un momento. Parece que nadie en su familia comprendía las razones por las que él se marchó, lo único que querían era que luchara en su estúpida guerra. Estaba arto de esa vida, estaba arto de todas las responsabilidades con las que tenía que cargar, no quería nada de eso. Él lo único que quería era volver a Seattle y ser Soren Oversax otra vez.Si era necesario tener que dejar de cazarlos cómo estuvo haciéndolo, ento
La noche era una completa maravilla, las rondas de bebidas no dejaban de llegar, las bromas y las risas tampoco paraban. Hace varias semanas que no salían de esa manera, y extrañaba mucho eso, pero ahora no podía parar las carcajadas. El plan inicialmente no era ir a beber, se suponía que iría a cenar tranquilamente y luego por una película, pero cómo siempre que Lorna organizaba las salidas, todo terminaba improvisado.Cantaban a todo pulmón canciones de todos los estilos, a pesar de que muchas no la conocían o peor aún, que estuvieran en velgharo. Apenas podían hablar el idioma de esa nación, por lo que sin duda terminaban pronunciando todo mal.El alcohol también había hecho de las suya en ese punto, por lo que hablaba arrastrando algunas palabras. Sus inhibiciones habían disminuido tanto que para ese entonces no le afectaba en lo absoluto si hacía o no el ridículo ante todas las personas del bar. Nunca había sido muy tolerante al alcohol, sin embargo, al estar siempre rodeada de s
Sus cuerpos se movían por si solos, cualquier pensamiento racional que pudiese tener no era para nada bienvenido en aquel momento en el que se comían ansiosamente uno al otro. No podían parar ante aquello que se apoderó de ellos desde el instante que se vieron en la calle. Antes de que siquiera pudiese notarlo ya estaba en el apartamento de la pelinegra en una lucha de besos y caricias.Brion literalmente le arrancó la blusa a la chica, destrozándose con sus manos, y sus labios descendieron por su cuello dejando un camino de besos y mordidas. Clarisse no lo entendía, pero ese hombre de extraños ojos poseía la capacidad de hacerla perder la cabeza con sólo tocarla. De laguna manera él presionaba los puntos justos para hacerla delirar y pedir más. Le arrancaba el aliento con cada beso y se lo devolvía al mismo tiempo cómo si fuese un simple juego de tira y afloja con su corazón.¿Por qué se dejaba llevar por él?Lo que debía hacer era confrontarlo, saber cómo es que llegó a Velghary y d