El CEO Carletti sacó de inmediato su teléfono celular del interior de su saco creyendo que se trataba de Rouse, sin embargo, vió que era uno de sus amigos cercanos. "¿Que querrá ahora?" Pensó Leandro respondiendo la llamada. (— ¡Hermano! ¿Dónde estás? Escuché de tu mayordomo que saliste sin informar. — Decía el hombre animado al otro lado de la línea telefónica.) — Tienes dos minutos, si no hablas ya te voy a colgar Thom. — Exigió Leandro serio mientras le hacia un gesto a la secretaria para que saliera de la oficina. (— Me encuentro en el bar del club junto a mi querido primito Mason~ ¿Vas a venir? Me deprime que hayas querido irte solo a esa isla, pudiste irte conmigo a mi viaje a Francia o con Mason a Los Angeles.) — No gracias, me la pasé bien sin saber nada de ustedes dos~ — Reía Leandro burlista. (— Jajaja eres un desgraciado~ ¡Solo ven te estamos esperando! Tranquilo
La hermosa ex modelo estaba ahora de pie encima de la enorme cama y comenzó a tomar fotografías, una, tres, siete y muchas más hasta que perdió la cuenta y aún así seguía. Ella notó que en una de las fotografías, él hacía un gesto extraño frunciendo ligeramente el ceño. Rouse hizo una expresión de confusión y volvió a verlo, solo para darse cuenta que ese atractivo italiano tenía sus bellos ojos de color verdes esmeraldas abiertos y clavados en ella. — ¡AAHHH! — Gritó Rouse asustada dejando caer su teléfono encima de Leandro. Ella rápidamente se agachó y lo tomó con ambas manos tratando de bajar rápido de la cama, hasta que Leandro la tomó del brazo izquierdo. — ¡Espera! ¿Que estabas haciendo? — Preguntó él confundido. — ¡NADA! — Gritó Rouse nerviosa. Leandro se quedó viéndola fijamente para después reaccionar y darse cuenta que ella había estado tranquila haciendo movimie
Rouse se apartó lentamente de ese apuesto hombre italiano soltando su mano de la corbata.Leandro se le quedó viendo fijamente con esos hermosos ojos verdes para después dejar escapar una sonrisita y marcharse. Rouse se quedó sola aún sentada frente a la elegante mesa. Ella posó su mano sobre su boca delicadamente. "No me rechazó y mucho menos se molestó… No, más bien diría que él también lo quería" El corazón de la joven se emocionaba mientras continuaba su desayuno con gran alegría. ….. Solo unas horas más tarde, Rouse estaba lista para salir y tanto su asistente Alice como su guarda espaldas Harold la acompañaban. — Señorita, ¿Realmente está bien que vayamos con usted? Podríamos quedarnos en la mansión y sé que todos dirían que fuimos. — Comentaba Alice tratando de ser considerada. Rouse negó lentamente con su cabeza. — Leandro tiene muchos sirvientes y no todos guardan silencio es por eso que de una u otra manera él siempre se entera de todo lo que sucede aquí. — Decía la
Alice recordó un retrato que había visto en la mansión, justo en la pared frontal antes de bajar las escaleras dentro del salón lujoso de eventos especiales. Era una pintura enorme del retrato de la familia Carletti, uno en el que su jefe, el señor Leandro Carletti estaba pequeño al lado de sus padres. — Ese niño… ¿De quien es Rouse? — Preguntó la asistente de cabello corto oscuro. Rouse volvió a ver a Annie un poco nerviosa y está se encogió de hombros. Seguidamente, Rouse Becker confesó. — Ese niño es mi hijo. — Contestó a Alice. Tanto Alice como Harold no podían creerlo, sus expresiones de gran sorpresa lo decían todo. — ¡¿Tú hijo?! ¿Cómo es eso posible? Tú nunca habías tenido un hijo antes, ¿No? — Preguntó Alice incrédula, a la que se le fue enseñado el expediente de Rouse, que la clínica de fertilización le proporcionó a Leandro antes del contrato. — No o
El hombre rubio ingresó a la mansión siendo guiado por el mayordomo, Steven. — Tendrá que esperar a la señorita Becker en el salón de invitados especiales señor Miller, el señor Leandro me prohíbe interrumpir las actividades de ella aunque lleguen visitas. — ¿Así que eso hace? Es bastante considerado con ella. A Thomas y a mí nos dijo que ella le gustaba, ¿Puedes creerlo Steven? Jaja~ ¡Leandro declarando abiertamente sus sentimientos! Eso nunca había pasado. — La señorita Becker es alguien especial, no lo veo extraño, apoyo la relación de ambos. — ¿Relación? No sabía que ya están saliendo, solo ha pasado una semana desde que nos dijo eso. — No, aún no salen, pero sé que pronto lo harán; mi señor ha estado buscando a la mujer indicada, esa es la señorita Becker. Mason no pudo esperar más ante las palabras del mayordomo, el CEO Miller sintió una insaciable curiosidad. — ¿Sabe
••••••••••En ese mismo momento, pero en la planta baja de la mansión. — ¡No puede ser! Señor Miller, ¿Por qué está empapado? — Exclamó Steven sorprendido al ver a ese CEO completamente mojado. — Lamento darte trabajo extra Steven. — Sonrió Mason. — ¿Podrías prestarme una habitación y cambio de ropa? No he traído nada extra. Steven suspiró preocupado. — Por supuesto, pero… ¿Cómo es posible señor? Tiene que hablar con su asistente, la señora Amanda, ella es muy atenta, ¿Cómo es posible que haya olvidado dejarle su cambio de ropa? — Decía el mayordomo mientras se dirigía rumbo a la segunda planta de la mansión. Mason le seguía un poco avergonzado. — Lo sé, pero Amanda está muy enferma, ella es bastante mayor y pronto se jubilara, así qué estoy en busca de un reemplazo; necesito a alguien atenta, capaz y disponible 24/7, me está costando encontrar dicho reemplazo, así que he e
La mujer de cabello corto oscuro caminaba de un lado a otro furiosa. "¡Tiene que haber algo con lo que la pueda manipular o amenazar!" "No hay nada malo en esa mujer, Rouse, nada con lo que pueda ensuciar su nombre y reputación, nada para alejarla de mí Leandro" Pensaba ella frustrada. "Pero no es por qué ella no haya hecho nada malo, si no por que toda su información de años atrás está restringida" "¿Quién diablos la respalda y protege tanto que no se puede saber detalles más profundos aparte de los que conseguí de esa clínica?" "¿Serán los mismos de la clínica de la familia Parker? No, no creo…""¿Por qué los Parker estarían protegiendo exageradamente a una de sus empleadas?""Son una familia muy rica de médicos por generaciones, no gastarían energías en una empleada de tantas" "Aunque ellos no solo tienen conecciones en los departamentos de sa
La noche de dos días después. En la mansión de la familia Parker, se celebrará una fiesta nocturna de caridad en el salón principal de eventos. Los importantes invitados caminaban sonrientes vestidos de gala con sus acompañantes de un lado a otro, sin dejar de jactarse de sus "muy buenas obras" llenándose de halagos los unos a los otros. Rouse ingresó al salón principal del evento, el cual poseía una glamurosa decoración y una orquesta tocando armoniosa musica que parecían caricias a sus oídos.Ella no iba sola, su brazo tomaba el de ese alto y apuesto hombre que la acompañaba, el italiano y dueño de todos los negocios de los Carletti, Leandro. — No sabía que los Parker tenían una mansión tan hermosa y… Tan lujosa, aunque no es más grande que la tuya, es sin duda bellísima. — Opinó Rouse volviendo a ver a Leandro. — ¿No lo pareciera verdad? Pero tienen mucho poder en la medicina y otros ámb