Esa noche no pude dormir, me esforcé en hacerlo, aunque en realidad lo que deseaba era morir y no sentir tan inmenso dolor, un horrible abismo se había abierto en mi pecho, mi rostro estaba tenso en los momentos en que no podía llorar, creo que esa noche agoté todas las lágrimas que habían en mi ser, porque han pasado casi siete años, en los cuales solo he llorado una vez… sucedió cuando me dijeron que mi bebé nació muerto.
Cuando Daren rompió conmigo y me echó de su vida, yo no sabía que estaba embarazada. Intenté continuar con mi vida, no le conté a nadie lo que me había pasado, mis padres ignoraban que la diosa había ligado mi alma a la Daren, el heredero de la prestigiosa familia Castell, para quienes ellos trabajaban y formaban parte del personal del servicio de su mansión. Cuando estuve entusiasmada con Daren no les conté porque supuse que ellos me lo reprocharįa, jamás estarían de acuerdo, ellos sabían que las familias Alfas de la manada no solían obedecer a la diosa en cuanto a la unión con parejas de clases sociales diferentes, un chico rico como Daren tenía como ideal una hembra Alfa y rica, o una Omega proveniente de una familia de héroes o guerreros poderosos, mi familia estaba lejos de poseer el prestigio. Pasó el fin de semana, permanecí encerrada en mi habitación, no quise salir y encontrarme con Daren dentro de los linderos de su mansión. Tomé mi laptop y dediqué todo el fin de semana a realizar los trabajos de la universidad y a estudiar para exámen. Yo estaba cursando el segundo año en administración de empresas, Petrer Castell, el tío de Daren, me otorgó una beca por parte de la embajada, él era el presidente. Mis padres estaban muy agradecidos, no solo por la beca, sino también por el dinero que le había prestado a papá para el tratamiento de mi hermana. Le teníamos mucho respeto, aunque Gabriel en ocasiones solía tener muy mal carácter, cuando quería le hacía reproches a mi padre, en eso entonces yo nunca presencié nada, solo me entraba cuando papá llegaba a casa afligido y nos contaba a mi hermana y a mí qué había pasado un mal día. El lunes saqué fuerzas para ir a clases, yo estudiaba en la misma universidad donde asistía Daren, por gracia de los dioses él ya estaba por graduarse a finales de la primavera, en cambio yo debía permanecer tres años más. Me daba alivio pensar que en algunas semanas él y sus amigos se marcharían y ya no me iba a topar con alguno de ellos. Mientras ese momento llegaba, debía ingeniárselas para no encontrarmelos. Me alisté temprano para ir a clase, me vestí como solía hacerlo siempre, me puse un vaquero y una blusa holgada que caía casi en mis rodillas y unas tenis. De maquillaje solo polvo sobre mi rostro y un labial rosa; no era vanidosa, pero sentía que no necesitaba más maquillaje, así estaba bien, aunque esa mañana por dentro me sentía fatal, creo que me puse más polvo de lo habitual para disimular el quebranto en mi rostro. Luego agarré mi bolso y la libreta, suspiré hasta lo más hondo, había llegado la hora de salir a la luz. Para evitar un desagradable encuentro con Daren, le pedí a George, el chófer de la familia que me llevara en el auto hasta la estación del autobús, ya que había que caminar un tramo como de 80 metros para salir de la mansión, lo menos que deseaba era que Daren saliera en su lujoso auto y pasara por mi lado, eso me haría sentír un tanto peor, por eso estaba tan a la defensiva, no quería de nuevo ser la misma víctima del día anterior, no, no estaba dispuesta a sufrir otra decepción ni otra humillación; deseaba superar ese horrible momento y continuar adelante, como lo hace todo el mundo, reponerse ante las vicisitudes de la vida, aprender y seguir adelante, había leído libros de desarrollo personal, resiliencia, sentía que dentro de mí había una loba fuerte y capaz, aunque también me estaba muriendo de dolor y despecho, pero tenía muchas esperanzas de que podría seguir adelante, así pensaba para entonces… pero no tenía idea de lo que se aproximaba, no sabía la maldad que se estaba gestando en mi contra y los intereses que tenían ciertas personas con respecto a Daren, gente muy mala haría de todo para destruirme y hacer que él y yo jamás volvieramos a estar juntos. *** Logré llegar ilesa a mi aula de clases, pasé con normalidad la primera hora de clase, después nos dieron media hora de descanso, Hilary y Rachel, mis dos mejores amigas, quisieron ir a la fuente a beber algo como siempre lo habíamos acostumbrado, pero yo no quise. —Vayan ustedes, yo tengo que estudiar un poco más para el exámen que tendremos en la segunda hora. —Hilary insistió. —¿Pero cómo vas a quedarte sola? —No soy la única que alguna ves lo ha hecho. No me atreví a contarles lo que me había pasado, mi supuesto noviazgo con Daren sucedió en la oscuridad, supuestamente íbamos a esperar el momento indicado para contarles a todos que estábamos juntos. Rachel también insistió. —Vamos. —Me jaló del brazo y me sacó al pasillo, yo me enojé. —¡Basta! ¿Acaso no entienden que no deseo ir a la fuente? Ambas me miraron desconcentradas, yo jamás me había comportado así. —¿Qué te sucede? —dijo Hilary. —No quiero ir, eso es todo. —Algo grave debe estar pasando contigo y no nos iremos de aquí hasta que nos cuentes. —fruncí el ceño. —No sucede nada —entré al salón y tomé mi bolso, tenía coraje contra mis amigos, pero decidí acompañarlas para que dejaran de indagar, preferí toparme con Daren o sus amigos antes que tener que contarles a mis a ellas lo que me había sucedido.Han pasado 7 largos años, Aurora y Daren nos cuentan todo lo que sucedió y los eventos que cambiaron sus vidas desde que él la rechazó. Aurora Me miro al espejo y maquillo mis labios de color rojo, llevo puesto un costoso vestido que fue diseñado especialmente para mi en la mejor casa modista de la región donde vivo con Gabriel, mi esposo. Se acerca el día de mi reaparición en la manada OchFinster, aunque ninguno sabrá quién soy en realidad, porque ahora me llamo Luna y mi nuevo nombre proviene de una imponente manada llamada Grauer Mond, en la que he vivido por seis largos e interminables años. El único que conoce mi verdadero origen es Gabriel, él sabe quién es mi padre. Nuestro matrimonio solo es un negocio, mi padre le debía mucho dinero, y Gabriel necesitaba aumentar su poder y prestigio en la manada OchFinster y las manadas aliadas. Él aprovechó el fatal accidente donde murió un importante ministro de Grauer Mond, Erock Meyer y su hija, Luna. Yo viajaba con ellos,
Era el día de la sucesión, Daren recibiría la corona, él y su familia se encontraban en el ala este del palacio, aún faltaban algunas horas para dicho evento que seria realizado en la noche.Daren y su primo y mejor amigo Caliope, fueron a la terraza a charlar algunos asuntos acerca de la compañía de la familia, puesto que Calíope asumiría la presidencia ahora que Daren se convertiría en el alfa.Llevaron sus copas de vino y ambos bebieron un sorbo y degustaron, Calíope comentó:—Así que el tío Gabriel te envió este vino. —Daren puso la copa frente a su rostro y la movió observando el cuerpo del vino. —Si, envió un barco exclusivamente a traer este vino, quiere que se sirva en la celebración de mi ascenso. Es extraño, mi tío debería estar enojado porque él es quien debería recibir el trono y no yo, en cambio ha enviado este vino para deleitar a todos los políticos y personas influyentes de la manada.—Quizás es su esposa quien lo tiene apaciguado, la hija del ministro debe ser una
Daren Estoy en una inmensa habitación del palacio, al menos dos docenas de personas me rodean, están aquí para prepararme para la coronación. Me encuentro de pie, hay tres inmensos espejos frente a mí, éstos me permiten ver mi transformación, desde ahora ha comenzado el ritual, me estoy convirtiendo en el alfa de la manada HochFinster. Ya me pusieron una túnica y un cinturón dorado que mide quince centímetros de ancho, con grabados que aluden a las proezas de nuestros ancestros en los campos de batalla por la liberación de nuestra manada de sus opresores. Este cinturón les recuerda al alfa y a todos los políticos que debemos mantener en la memoria los héroes del pasado y seguir como ejemplo su amor por la manada. Intentaré recuperar todo lo que hemos perdido en la última batalla y vengaré la muerte de todos nuestros líderes, las manadas enemigas van a pagar con sangre el daño que nos han causado, eso es lo que tengo en mente hacer ahora que tan de repente me tocó asumir est
Creí que Gabriel y yo iríamos en la limusina como él siempre acostumbra a viajar conmigo a todos los eventos públicos, pero no, esta vez decidió que iríamos solos en su convertible, el último que compró antes de marcharse a Europa, un auto único en el mundo, hecho con especificaciones de su dueño.Subí al asiento de copiloto, el hombre de confianza que Gabriel asignó para que me cuidara abrió mi puerta mientras Gabriel rodeó el auto y subió a su asiento. Mi agudo olfato percibió el aroma a nuevo, aunque han pasado varios años, aun conserva el aroma característico del cuero de los asientos sin usar.—¿Te gusta mi convertible? —él sabe que no me interesan sus juguetes costosos.—Está bonito. —respondí sin fingir especial interés, Gabriel bajó sus ojos hacia mi pecho, le encanta el escote atrevido de mi vestido, fue su voluntad que el diseñador lo hiciera así para mi, para exhibirme en público, pues a él le gusta alardear acerca de todo lo que tiene, de sus juguetes caros, sus casas l
Aurora.Gabriel y yo fuimos recibidos con honores en el palacio, hace siete años, ¿Quién iba a pensar que yo, una chica cualquiera, hija de los sirvientes de la familia estaría entre los invitados. Un par de escoltas nos llevó hasta el salón de ceremonias, hay mucha gente por todo el lugar, todos con sus mejores atuendos y relucientes joyas, parecen estar muy felices, quizás están conformes con su nuevo alfa, a pesar de que hace menos de un año murieron varios miembros de la familia alfa de la manada y hombres del ejército; por eso dicen que a rey muerto, rey puesto; la vida continúa para todos los que pueden, mientras que otros yacen bajo tierra y quedan en el olvido, también hay otros que siguen vivos, pero sus almas están enterradas, como yo lo estuve por tantos años… hasta que supe que mi hijo vivía, ese día mi alma resucitó, emergí convertida en una mujer muy fuerte, y capaz de todo por recuperar a mi bebé; juro por la diosa que nada ni nadie podrá impedir que me lleve a mi hij
Gabriel me acercó a ella y me las presentó.—Querida, ven que quiero presentarte a algunas parientes políticas. Antes de voltear a mirar saqué mi pecho y enderecé mis hombros, asumo un talante erguido como una diosa empoderada. Observo a esas malditas, las miro como si les tuviera admiración y sonrío.—Ellas son Valca y Libeyka, ya te he hablado de ellas. —Me aseguro de hablar con mi acento italiano.—Encantada queridas, mucho gusto de conocerlas.Valka al parecer no se ha percatado de mi parecido con la niña Aurora, a la que desterró. Libeyka en cambio no puede disimular su asombro, sus párpados están tensos, ni siquiera puede parpadear, no deja de mirarme, debe estar llena de dudas, se supone que estoy muerta. Le sonrío de manera muy cordial.—Eres una mujer muy hermosa, supongo que el alfa no deja que ningún lobo se te acerque, me refiero, es familia de mi esposo, Gabriel es muy celoso, supongo que todos los Castell lo son. Veo como agacha la mirada, significa que acerté e
Después del mediodía llegué a mi casa, por el camino había decidido que me marcharía, iba a regresar a mi manada de origen, con todo mi dolor tendría que abandonar a mis padres, tendría que dejarlos junto a mi hermana que estaba muy enferma. También dejaría mi carrera universitaria, tan solo me faltaba dos años para graduarme… lo había perdido todo en un instante, y todo por confiar en Daren, mi corazón se llenó de rencor, tenía tanto dolor.Cuando llegué a mi casa encontré a mis padres en la sala, ellos me estaban esperándome; vi angustia en el rostro de mi mamá, en cambio papá tenía una dura expresión, me miraba con enojo y con una voz ronca me dijo:—Hasta que al fin te dignas a regresar, ¿dónde demonios estabas metida? —Con una voz vacilante respondí:—Estaba en la biblioteca de la municipalidad, es que…—¡Mentiras! —gritó—. Acabo de volver de la universidad, el rector me citó urgente y me puso al tanto de todo lo que has estado haciendo. —Temblé por dentro.—¿El rector?—Si,
Daren.Ha llegado el momento de marcharme al salón ceremonial, la guardia real del alfa está aquí, han venido por mí. Le beso la frente a mi hijo, él se ha quedado dormido oyendo un cuento de lobos legendarios que le encanta. Me levanto del lado de la cama y me dirijo a la puerta, luego camino todo el pasillo escoltado por una docena de guardias, hoy portan sus trajes rojos de gala.Debo entrar por la puerta principal del salón ceremonial, todas las demás están cerradas, a partir de este momento hasta mi coronación nadie puede entrar excepto yo y los guardias.Hay un silencio sepulcral, de pronto al fondo del salón sonó una campana, la cual rompió dicho silencio, enseguida todos se levantaron de sus asientos, se pusieron de pie y voltearon a mirar hacia donde yo me encuentro.Inicio mi marcha en medio de todos, me dirijo hacia la tribuna, dónde se encuentra el sacerdocio de la luna y los ministros políticos de la manada.Me detengo justo al frente de la tribuna, hay tres escalones