Una maravillosa familia.

Audrey llegaba también a la villa de su hermano, sus padres y ella se pusieron cómodos en el jardín, La mansión era bella en su totalidad.

Dentro Fiorela entraba a la habitación de su prometido.

— ¿Necesitas algo Adriano? Puedo traerte agua o algún bocadillo, solo pídelo.

— Si necesito algo, entra al armario y saca una de mis pijamas, quiero que me ayudes a cambiarme, este pantalón me tiene incómodo.

La jóven oriental vaciló un poco en hacer lo que se le pedía, más al final fue por una fina pijama y la trajo.

— Adriano, ¿Creés que sea adecuado que sea yo quien te ayude a cambiarte? Tú padre está aquí, podemos hablarle y...

— No, yo quiero que me ayudes tú, anda, desabrocharme el pantalón, me está ligando por este lado.

— Fiorela estaba sonrojada, con manos inexpertas comenzó a desabrochar el botón del pantalón y a bajar el cierre. Ella trataba de no mirar pero no tenía mucho éxito.

— Es bueno que vayas practicando para nuestra noche de bodas. Cómo yo estaré ocupado
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP