Amelia.
Hoy será el día en que el duque Fenrick regresara a la casa Wide y todos los empleados están muy nerviosos por su regreso solo escucho comentarios de que es un hombre muy peligroso pero realmente guapo, a veces pienso que solo les importa la apariencia de una persona y no su seguridad pero pensando en hombres guapos recuerdo al hombre que me encontré afuera de la joyería era realmente guapo con sus peculiares ojos marrones rojizos aunque creo que era mudo, me hubiera gustado poder hablar con él, todos nos reunimos en el salón principal de la casa para recibir a Fenrick y al verlo me doy cuenta que es el hombre que me tope el otro día solo que ahora su cabello es rubio claro, al darme cuenta de que si es él me inclino asía Isabela. -¿ Isabela segura que es tu primo ? -claro que si. Isabela me responde disfrutando de unos delicioso postres y me doy cuenta de que este hombre se ve mucho más guapo que rubio, me percató de que me esta mirando de reojo y siento que mi estómago se revuelve y un sentimiento de vergüenza nace en mi pecho. -¿ Amelia estas bien ? -si no te preocupes. Me doy cuenta que Fenrick se aproxima a nosotras y me mira fijamente. -¿ Isabela que le ocurre a tu amiga ? -solo esta nerviosa por todos los rumores que revuelan a tu alrededor. Fenrick se cruza de brazos y mira a Isabela fijamente. -te puedo asegurar que esta ves no mate a nadie ni e causado problemas. -¿ seguro primo ? -claro ya que los queme desafían no viven mucho tiempo ya que los divido en dos. -¿ cuantas eran esta vez ? -tal ves unas cincuentas. Bajo la mirada y me lamento mentalmente por no haber puesto una escusa para no venir hoy aquí ya que no comprendo nada de lo que está pasando y no se como pueden están hablando de esta manera con tanta libertad, en toda la recepción no me separo de Isabela por mi propia seguridad, cuando por fin termina me apresuró a irme a mi carruaje y tengo que excusar me con la duquesa que insiste en que me quede pero le respondo de la forma más educada qué ya me e divertido la suficiente y que de seguro desea pasar tiempo con su sobrino, cuando por fin subo a mi carruaje me recargo en el asiento y doy un suspiró de alivió de por fin haber salido de esa casa con vida. -¿ creíste que te iba a matar ? ¿ verdad ? Doy un brinco en mi lugar al escuchar la vos del duque Fenrick que esta sentado frente a mi con los brazos cruzados y mirándome fijamente, me calmo y me acerco a la cortina para poder salir del carruaje si es necesario. -me sorprende que Isabela tenga una amiga teniendo una carácter tan horrible. Me sorprende que el propio primo de Isabela habla así de él pero debo de concentrarme y calmarme. -disculpé que le pregunte pero ¿ que así aquí? -relájate no te haré daño solo deseo comprobar algo. Fenrick extiende la mano así mi. -por favor podría darme la mano señorita. No se si hacer esto a no pero no tengo otra opción, coloco su mano sobre la de él y me doy cuenta que Fenrick se queda serio y pensativo durante algunos minutos para después verme directamente a los ojos. -¿ quien eres ? No comprendo a que se refiere y me quedo muy dudosa en que responder asta que recuerdo que esta familia esta llena de magos que sirven al emperador y que él es el mago maestro de la torre. -solo soy una persona común. -¿ en serio ? que interesante en ese caso seras más interesante. Me comienzo a imaginar que interés podria tener Fenrick en mi y recuerdo los rumores de que el tortura personas en experimentos mágicos. -pero pospondremos esto para la próxima ya que es muy tarde y usted se ve cansada. Veo con asombro que Fenrick chasquea los dedos y desaparecer frente a mis ojos, entonces así fue como entro al carruaje, me recuesto de nuevo en el asiento y no puedo creer que allá venido aquí para preguntarme si soy algún tipo de mago si él es el mago más fuerte de todo el imperio y nadie se puede oponer a su fuerza es tenebroso pensar que un hombre tan guapo sea tan peligroso.Amelia. Estoy en la biblioteca y no puedo creer que después de vivir diecinueve años pasando desapercibida para los demás valla a morir acusa de las investigaciones que Fenrick a iniciado sobre mi, mi preocupación no pasa desapercibida para Isaac qué me esta acompañando.-¿ que ocurre Amelia ?Al ver el hermoso rostro de Isaac tan dulce y afectuoso se me olvida que el también es un mago de lata categoría me pregunto por que Fenrick no puede ser tan amistoso como él.-Isaac ¿ los magos siente algo en especial ?-supongo que Isabela ya te a mencionado qué a Fenrick le dan una fuertes migrañas desde ase años que lo asen esta casi siempre molesto.Isaac me da una dulce sonrisa y me extiende un libro para que lo tome.-me siento muy cómodo a tu lado Amelia. -claro somos amigos.-pero me siento así desde la primera vez que te vi al igual que a Isabela, se hicieron amigas casi al instante.-debo de admitir que también me sentí así desde la primera vez que la conocí.Y la verdad me siento m
Fenrick. No veo nada sobresaliente en la señorita Amelia, no siento ningun poder mágico provenir de ella pero me intriga saber como solo al estar cerca de ella mi migraña a desaparecido. -es cierto que sufre de migrañas constantes. -si pero se a vuelvo menos intensas y son muy irritantes. Extiendo la mano asía la señorita Amelia que me mira con un poco de duda y sorpresa, le hago una seña de que la tome y después de unos segundos la toma, una leve sonrisa aparece en mi rostro al darme cuenta de que la migraña a desaparecido por completo al tocar su mano cosa que ni las mejores pociones curativas funcionaron. -¿ como lo has hecho ? -le guro que no lo sé duque Fenrick. -en ese caso le pediré que se reúna conmigo de ves en cuando para aliviar un poco mi dolor asta que descubra otra manera y claro en este lugar si a mi prima no le molesta. Miro temor en los ojos de Amelia pero después me da una sonrisa dulce y me responde con mucha alegría. -no será ningún problema si
Amelia. Me siento un poco ofendida por las palabras de Fenrick pero tampoco puedo decirle nada al respecto ya que podría tomarlo a mal. -la verdad le agradezco que haga esto por mi, cuando estoy cerca de ti el dolor disminuye pero al tocar tu mando desaparece durante algunas horas y hoy el dolor era insoportable. Me sorprende que Fenrick tenga que soportar esto todos los días y me ase feliz saber que puedo ayudar a una persona tan importante para el imperio, Fenrick me regresa con Isabela que esta furiosa por haberme llevado de su lado después de calmarla proseguimos en calma y solas con nuestra tarde, al llegar a mi casa me voy a mi habitación donde me pregunto si no habla alguna manera de aumentan el efecto calmante, me mira la mano y tal ves si usamos algún otro tipo de contacto pueda servir pero no quiero experimentar con el contacto físico, me doy la vuelta en la cama y espanto esos pensamientos de mi mente por que si aun lo pudiera lograr no deseo acerco, tomo de nuevo la ba
Fenrick.Me recuesto en el sillón mirando el techo disfrutando de la calma que me trae la presencia de Amelia que esta leyendo un libro a mi lado en completó silencio, tal ves tome su mando de nuevo antes de irme pero me da vergüenza que Isabela me mire fijamente cuando lo hago como si no tuviera nada que hacer en otro lado de la casa, escucho su conversación sin decirle nada y solo veo de reojo a Amelia como le sonríe a Isabela, todavía no comprendo como logra curar mis migrañas, me pregunto que pasara por su mente cuando me toma de la mano ya que puedo ver en sus ojos un poco de miedo pero no retrocede ante mi.Amelia.Al atardecer me dirijo a mi casa pero al llegar me encuentro a mis padres adoptivos esperándome en el recibidor, mi madre se ve molesta cruzada de brazos detrás de mi padrastro que se ve molesto.-hija me han dicho que el mago de la torre te a dado un presente y deseo verlo.Veo que mi madrastra me a delatado pero no tengo de otra más que obedecer, voy a mi habitación
Amelia. Esta mañana al abrir uno de mis cajones me doy cuenta que mi varita no se encuentra en el lugar donde la deje el día anterior, me dirijo a las sirvientas que se encargan de la limpieza para saber que alguna la movió de lugar pero todas niegan y dicen que no la han visto, doy un suspiro cansada ydejo que se retiran, una de ella se me acerca con un poco de preocupación en la mirada. -disculpe señorita pero mire cuando su madre la tomo y se la llevo de la habitación. Me apresuró y voy asía el comedor donde abro las puerta de par en par, miro a mis padrastro muy tranquilos desayunando, mi madrastra me voltea a ver con seriedad y frialdad. -¿ que ocurre Amelia ? ¿ por que el escándalo ? Mi madrastra me habla con calma y totao frialdad, intento calmarme para poder hablar con claridad y calma y no perder la compostura frente a mis padrastros. -¿ madre donde esta mi varita ?Mi madrastra ve a mi padrastro para después verme con una sonrisa calmada-la tome anoche y la vendimos.
Amelia. No se que este planeando Fenrick o que le pase por la mete pero sus palabras asen que la actitud de mis padrastros cambie totalmente a una más amable y cordial. -hay Amelia disculpanos por no avernos dado cuenta antes. -te pedimos las más sinceras disculpas. Al verlos no veo ni un solo rastro de sinceridad en sus ojos y ya estoy harta de esto. -si vendieran sus cosas no podrían no podrían pagar el valor de esta varita y por eso su acto se podría considerar un robo y lo sé lo informaré a las autoridades. El rostro de mis padrastros esta lleno de asombro, gracias al duque por fin pude hacerles frente a mis padrastros que se indignan. -pero Amelia como nos puedes hacer esto a tus padres que te cuidamos durante tanto tiempo con cariño. Sigue diciendo esa mentira a pesar de que ellos saben como me trataron, doy un suspiro y les doy una sonrisa fingida. -que esperaban de un extraño. Las autoridades correspondientes llegan muy rápido supongo por que fue Fenrick quien los l
Amelia. Me pregunto de donde se conocerán y pensándolo bien el príncipe ya esta en edad de buscar una novia y Mónica al igual que Isabela son unas muy buenas candidatas. -¿ Amelia como me miro esta noche ? La vos de Isabela me saca de mis pensamientos y la veo con una dulce sonrisa. -te ves realmente hermosa. -¿ estas segura ? -claro que si. -en ese caso por que nadie me se acerca y solo hablar con mi hermano. Antes de que responda se nos acerca la señorita Mónica con una dulce sonrisa junto con su madre que ase las presentaciones debidas, hago un leve reverencia por que ellas son condesas. -es un placer conocerla condesa Mónica. -me siento avergonzada con usted ya que noto mi mirada asía su acompañante. -no le tiene miedo al duque Fenrick condesa. -en verdad es un hombre muy guapo y no me era posible quitarle la mirada de encima aunque aquí en el baile hay muchos hombres de igual belleza. -debes de tener cuidado con ese ladrones ya que todos son monstruos por dentro y m
Fenrick. Esta mañana Isabela entro muy temprano a mi habitación a estar berreando.-eres una desgracia para la familia.-no entiendo por que estas tan molesta conmigo.-debes de estar jugando.-no y no entiendo por que me gritas.-eres un mentiroso de primera Fenrick.No se por que diablos tiene que estar tan temprano gritando es mi habitación que no podía espera a la hora del desayuno, Amelia se asoma por la puerta de segura atraída por los gritos de Isabela, no soy estúpido y recuerdo claramente lo que paso la noche anterior y la vergüenza que me da por haberle dicho esas palabras y más por que todos me escucharon, me levanto de mi asiento.-Isabela por favor ya detente como ya te dije no recuerdo nada de anoche.Me acerco a Amelia para disculparme pero las palabras no me salen de la boca mi dignidad me ase callar pero por que mi corazón late con tanta fuerza al verla.-buenos días duque Fenrick.No le puedo responder y solo paso a un lado de ella sin decirle nada, será mejor que n