Días más tarde.Los hermanos Santos se han recuperado satisfactoriamente luego de aquel sacrificio que tuvieron que vivir encerrados en aquella jaula y luego en medio de aquel lugar inhóspito.Los seis se encuentran previamente organizados, su objetivo es encontrar a Valery y a Aurelius para hacerles pagar por todo el daño que les habían causado; no han descansado ni un solo minuto rastreando su paradero, todo hasta que Aurelius se cansó de estar en su escondite y decidió salir a divertirse un poco, por su mala suerte fue a parar a uno de los casinos que le pertenecían a la familia Santos. Una llamada por parte del administrador del lugar encendió las alarmas en la familia Santos, y en poco menos de una hora el lugar se encontraba rodeado por todo el personal que le servía a la familia Santos.Dante se había encargado de contratar bastantes hombres para reforzar la seguridad de la familia y no permitir un nuevo suceso en su cuenta; Santino era quien había cambiado de manera drástica,
Unos cuantos minutos más tarde alrededor del hotel se encuentran los hombres de la familia Santos, de igual manera en el interior unos cuantos apoyan la presencia de sus jefes; a tardes horas de la noche regresó Valery al hotel. Los hombres que cuidaban de su espalda fueron al bar del hotel, mientras que ella se dirigió con uno de sus amantes hasta su habitación, pretendía pasar una de sus mejores noches; ingresó a la habitación junto con aquel hombre, al encender la luz se estrelló de frente con aquella realidad que le fue difícil de creer. Valery cerró con fuerza los ojos y luego los abrió, el tono de su piel cambió al instante, dio unos cuantos pasos atrás sintiendo que el piso se le había corrido. —No estás alucinando, estamos aquí para cerciorarnos que nunca más nos vuelvas a causar daño —habló Hanna sosteniendo la pistola en su mano. Enzo levantó el brazo y disparó en la frente del amante de Valery, quien cayó al piso sin vida, Dante se acercó a ella y le arrebató la pi
Tiempo después.Era un día especial en la familia Santos, ya que se celebraba el cumpleaños de los gemelos, Enzo y Hanna se han encargado de preparar todo para que sea una celebración por lo alto, aquella reunión se llevará a cabo en un espléndido salón decorado al gusto de Hanna.Dante se encontraba al frente de las empresas, ya se encontraba divorciado de Emma y vivía felizmente junto con Mía, los dos son la pareja ideal, juntos manejan una vida de negocios a la altura sin ningún inconveniente.En cuanto Santino, bueno Santino se ha inclinado en un ciento por ciento hacia aquellos negocios oscuros que solía llevar su padre, lo mejor de todo es que Emma lo acompaña y lo apoya, se siente orgullosa de ser la esposa del mafioso más poderoso y respetado en Estados Unidos. Los invitados hicieron presencia en el lugar, la música suave de fondo era perfecta para la ocasión, últimamente la familia Santos se había convertido en el centro de atención de toda la sociedad, no era para menos ya
La música alegre retumbaba en aquel sitio nocturno donde se encontraba Enzo celebrando el éxito de una de sus más grandes entregas, él es un poderoso e imponente mafioso, a pesar de que siempre permanece muy bien acompañado de los hombres que cuidan de él, suele ser un hombre solitario.Las mujeres más hermosas y cotizadas del lugar se encontraban a su alrededor, movían sus cuerpos con poca ropa tratando de llamar su atención, ellas sabían muy bien que si lograban pasar la noche con aquel hombre al día siguiente una gran suma de dinero iban a tener en sus bolsos.Mujeres, mercancía y por supuesto dinero... mucho dinero, se encontraban a diario en el entorno de Enzo, el cual era el responsable de mantener las miradas de las autoridades lejos de sus negocios.Enzo al notar la presencia de Emilio, su primo y mano derecha soltó el vaso sobre la mesa, exhaló con fuerza y luego bufó a medida que su primo se iba acercando, Enzo tensó la mandíbula y frunció el ceño. —Siéntate de una buena ve
Enzo al igual que Hanna se quedó congelado, sus miradas se conectaron atravesando sus cuerpos, por un instante el entorno se detuvo para ellos, al mismo tiempo sintieron que solo existían ellos en el lugar.—Así que tú eres Hanna Smith, la difunta esposa de Valentino Santos, la única heredera de todas sus propiedades —comentó Enzo con su voz ronca y desafinada rompiendo el silencio de aquel lugar. —Sí, soy yo, pero lo que no logro entender es ¿quién es usted y quién lo invitó a pasar? —preguntó Hanna bastante molesta mientras se cruzaba de brazos observando a Enzo de la peor manera. —Lo mejor es que te calmes, no te encuentras en posición para actuar de esta manera y menos en contra de mí; lo mejor será que hablemos en privado y no frente a tu servidumbre —Hanna bufó y luego rodó los ojos.—Claramente no tengo nada de que hablar con un extraño y menos en privado, así que haga el favor de una buena vez y márchese antes de que llame a las autoridades —Enzo levantó la mano y frotó su m
Minutos más tarde, Enzo ya se había ubicado en la casa de su hermano, el personal del servicio, quienes se habían rehusado a permitirle el ingreso a Enzo, ahora ante la presión por su parte y la de sus hombres ya le rendían pleitesía al nuevo dueño y señor de la casa.Mientras que Enzo se encontraba en la sala principal sentado de la manera más cómoda posible disfrutando de su bebida favorita, Emilio finalmente regresó con noticias, Enzo a pesar de todo dibujó una leve sonrisa en su rostro suponiendo que iban a ser las mejores.—Señor, ya tengo información sobre ella, espero que pueda servir de algo. —Enzo levantó la mano y con sus dedos le indicó que tomara asiento. —Habla y sé breve, porque la actitud de esta mujer no la pienso soportar ni un solo minuto más —gruñó Enzo.—Hanna Smith a sus treinta años lleva una vida con nada que envidiar —al escuchar aquellas palabras Enzo levantó la mirada y la fijó en su primo, quedando aquella pequeña sonrisa que había en su rostro en el olvido
Los movimientos oscuros que solía llevar Enzo en sus propiedades por largos años no eran nada fáciles de ocultar, así que su nómina de abogados era la mejor del país, él buscaba tener siempre personas a disposición sin importar cual era el momento que los fuera a necesitar. .Emilio ubico en la sala principal a los invitados, en breve se encontraba Enzo junto a sus abogados, quien encabezaba aquel grupo de hombres capaces de hacer cualquier cosa por su jefe era Tito Jones, más conocido como el abogado de la muerte, quien tenía un historial nada difícil de pasar por alto, además él era capaz de ir al infierno de ser necesario si su jefe lo ordenaba. Mientras que Enzo colocaba al tanto a sus abogados de lo que estaba sucediendo, todos escuchaban con atención, al terminar Tito se levantó y se dirigió a su jefe, con el mayor respeto antes que nada.—Señor, lamentamos la calamidad que le sucedió a tu hermano —él expresó con respeto. Ante las condolencias por parte del abogado Enzo apretó
Luego de unos cuantos minutos Enzo se levantó de aquella silla, tomó la pistola en su mano al instante Tito y los demás abogados pasaron colores en sus rostros, pero su jefe lo único que hizo fue llevar su arma de regreso a su cintura.—Todo sea por mis negocios, porque de lo contrario hubiese preferido cualquier otra cosa, ahora largo de aquí antes de que me arrepienta partida de ineptos, un próximo error y terminaré con sus mugrosas vidas, se muy bien el papel que ocupan para mis negocios y por ello agradezcan que los necesito con vida. Emilio encárgate de ellos, mientras que yo me preparo para solucionar el terrible problema que el idiota de mi hermano me dejó. Enzo acomodo los botones de su traje y luego se marchó a una de las habitaciones.Mientras tanto, en la habitación principal, Hanna se encontraba en el interior del baño, el agua recorría por su cuerpo, el llanto no se detenía, se encontraba deshecha por todo lo que le estaba sucediendo. Primero su esposo y luego todo esto.