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III. Buscando a Ana.

Narra Jean.

Ha pasado una semana desde que conocí a Ana, es una chica hermosa con una apariencia exótica y para mí, poco común. He fantaseado con volver a verla pero no ha sido así, es una pena que no me haya querido dar su número telefónico y no se me ocurrió preguntar si tenía otro nombre o cuál era su apellido, hay demasiadas mujeres llamadas Ana en el F******k que viven en New York, parece imposible conseguirla.

Dejó de trabajar en el restaurant y ninguno de sus ex compañeros de trabajo me quiso dar información, imagino que parezco un acosador o algo así.

No soy de actuar de esa forma, pero  la manera en que la conocí me pareció una señal de la vida, que me alertaba de lo mal que habían estado las cosas en mi relación forzada con María y de lo prometedor que sería estar con alguien que realmente me interesara.

Pero ni modo, da igual, no la he conseguido y no me voy a obsesionar…

Mañana inician las actividades en la universidad, iniciaré mi primer año de estudios en negocios, aunque mi hermano mayor Luis es quien dirigirá la empresa, estoy destinado a ser su mano derecha y vicepresidente de la compañía, y si sabemos trabajar bien, tal vez algún día volvamos a tener el 100% de las acciones de la empresa. Por los momentos, Carlos Bracamonte el padre de María tiene el 40 % de las acciones y mi familia el 60%, cuando mi padre sufrió un accidente automovilístico que casi le quita la vida, enfrentamos un gran defalco y también demandas que solo con el apoyo de Carlos pudimos solventar, aunque eso nos costó venderle el 40% de las acciones.

Desde entonces mi familia ha fantaseado con la idea de casarme con María cosa que no va a suceder, esta semana ha buscado la forma de meterse en mi cama y de aliarse con mi madre, es tonta al creer que así conseguirá algo de mí lo único que ha logrado es que la aborrezca.

Es viernes y me siento ansioso por la vida que me espera y también  por el conflicto que pronto tendré, mi madre había arreglado que María y yo estudiáramos juntos administración de empresas en el New York Institute of tecnology de manera que sigamos viviendo en nuestras casas y viajaramos juntos cada mañana, pero estoy harto de eso, así que arreglé una reunión con mi hermano y luego con mi padre y ellos me apoyaron a ir a una universidad de mayor prestigio, a la Universidad de New York, también he decidido vivir en el campus y vivir mis propias experiencias lejos de mi familia, estoy seguro que eso me dará mayores oportunidades para relacionarme con personas y me ayudará a enfrentarme al mundo laboral cuando me gradúe. Decidimos no decirle nada a mi madre hasta hoy, que es el momento en el que me iré de casa, para iniciar el lunes las actividades académicas.

Tengo lista mi maleta, me doy una ducha me visto con un jeans color negro, un polo blanco un tanto ajustado y zapatos deportivos blancos, tomo mis lentes de sol, me coloco perfume y ajusto mi reloj de edición limitada que lleva el nombre de mi deportista favorito Lionel Messi.

Bajo las escaleras con mi maleta en mano para despedirme y para mi mala suerte se encuentra María junto a mi madre, se alarman al verme y me preguntan por la maleta.

- Mamá me voy a la universidad, hoy es el día en que me alojaré y mañana será la fiesta de bienvenida.

-¿De qué hablas Jean?, eso no es lo que hemos planeado con María.

- Lo sé pero sabes bien que ya no tengo nada con María, me voy a otra universidad y viviré en el campus.

-¿Pero de qué hablas hijo?, tu eres adinerado, no tienes que vivir de esa forma.

- Es mi elección, ya respétala.

- Jean ¿por qué me haces esto?- dice María con cara de tragedia.

- No te estoy haciendo nada si estás aquí es por tu amistad con mi madre, tu y yo ya no tenemos nada, así que deja el drama y por favor no te metas en esta conversación.

- Jean hijo ¿por qué eres tan grosero?.

-Lo siento madre, no soy un niño, espero que ambas lo entiendan y no dejaré que controlen mi vida.

- Daniel haz algo por favor- dice mi madre al ver que mi padre se acerca.

- Apoyo totalmente a Jean es un hombre, deja que tome sus decisiones- dice mi padre mientras me acompaña a la puerta de la casa.

-Tranquilo hijo ya lo entenderá, avísame cuando llegues a la universidad- me despido con un abrazo y me voy al garaje donde mi hermano me espera junto a su auto.

-¿Y? ¿cómo estuvo el drama ahí adentro?.

- Intenso hermano- respondo mientras coloco la maleta dentro del auto.

- Tienes que ser más distante con Charlotte para que aprenda a no querer controlar tu vida.

- Lo sé de verdad mamá ha estado muy dominante últimamente- respondo mientras nos subimos al auto.

-Creo que su historia con papá se parece a la de María contigo y no lo ha superado, pero no te dejes dominar o estarás perdido.

- La universidad me hará bien- digo con una sonrisa en los labios mientras emprendemos el camino.

- Si hermano haz lo que yo hice, conoce muchas chicas, ten mucho sexo y no te enamores, ha y cuídate no queremos un bastardo en la familia.

- Espero conocer chicas hermosas pero sabes que no soy como tú.

- Hermano cuando estemos enfrente de la empresa tendremos mucho estrés, la vida de estudiante es la mejor y hay muchas chicas que no quieren compromisos, solo pasarla bien, disfruta de tu juventud que más adelante será el tiempo de enseriarse, hiciste bien en dejar a esa María, la verdad no la soporto.

- Yo tampoco.

- Recién me gradué y ahora iniciaré el trabajo en la empresa y sé que extrañaré estar en tu lugar, así que aprovecha esta etapa de tu vida- me dice Luis con los ojos puestos en el camino.

Durante el camino Luis y yo hablamos de los deportes que más nos gustan y cómo aprovecharemos las próximas vacaciones que tengamos para navegar y surfear, mi hermano y yo somos muy unidos, nos la llevamos bien y siempre lo he admirado.

Luis me acompañó a mi habitación, me ayudó a ver el espacio para saber que otras cosas puedo traer de mi habitación y también se ofreció a pagarme un departamento de estudiante cerca de la universidad si no llego a encajar bien con mi compañero de cuarto, después de un rato se despidió y yo bajé a caminar por las áreas verdes y ver los folletos de las actividades complementarias que ofrecen y la información de las distintas fraternidades.

A lo lejos veo a un grupo de chicas hermosas pero hay una que capta en especial mi atención ¿será Ana?, debo acercarme y confirmar.

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