Amanda, salió del ascensor y se dirigió hacia su destino con una actitud empoderada, parecía estar modelando en una pasarela ante todos estos matones armados, que la miraban perplejos por su actitud, y, su belleza, el tipo con traje la miraba de arriba hacía abajo, analizando cada detalle de ella, y cuando la tuvo frente a ella, le dijo:—Quítate la gorra, y dame el arma que tienen en la espalda…Amanda obedeció sin reproches, le entrego ambas cosas, el tipo las tomó y dijo:— ¿Con que un 38, eh? Interesante elección para una dama tan hermosa como Ud., no sería mejor una más pequeña, más fácil de usar, no se… una… —el sujeto hablaba con ironía, pero fue interrumpido por Amanda.— ¿Una 22 quizás ¿ No gracias, me quedo con mi 38, con la que le partí el cráneo a Rigo, y con la que te partiré el tuyo si tengo oportunidad — Amanda hablaba con fiereza pero con calma, termino guiñándole el ojo al tipo.Este río, y abrió la puerta del apartamento y dijo:—Sí, señorita, seguro que si — se mofa
Amanda, quedó realmente impactada al escuchar esto, al igual que Garo, y también, el sujeto de traje, que no lo tomó para nada bien.—Espera Profesor, ¿qué has dicho? — reclamó alzando un poco la voz.El profesor, sin siquiera verlo, respondió mirando a Amanda.—Ah, sí. Les presento a Jairo, el popular Cundo, él es mi mano derecha, siempre lo ha sido…— ¿Qué es lo que crees que estás haciendo? ¿Acabas de decir mi nombre? ¿Pero que es lo que pasa contigo? — Cundo estaba realmente enfadado.— ¡Oh vamos, Cundo! Todo el mundo sabe que tu nombre es Jairo Ayala, — El profesor se encogía de hombros —. Si cualquier persona coloca tu alias en google lo primero que verá será: Jairo Ayala Alias Cundo Narcotraficante de “Los pilares”Cundo parecía no poder responder por la irá que sentía.—Siempre te dije que fueras del 10% de los narcos que triunfan, tu te enfocaste en ser del 90%, pues ya no puedes tapar el sol con un dedo, no te enfades, afróntalo — El profesor hablaba con serenidad.— ¿Te cre
Luego de que la ciudad se alarmara por el gran tiroteo en el edificio en donde vivía Garo; se dio a conocer en los medios que habían fallecido varias personas en lo que denominaron: “Enfrentamiento entre bandas rivales”; la cuestión está, en que nadie sospechaba que este enfrentamiento fué algo disparejo en los números, debido a que eran 12 integrantes de la banda del norte, (Los Pilares) contra el que hasta ese mismo día, era su lider, alias: El Profesor, y con él, lo que desde ese mismo día considero su arma secreta, Garo, El Halcón, sicario élite de la recién formada nueva línea de la banda del Sur, NAFTA; sin embargo, aún así, lo que Cundo pensó que sería solo disparar algunas balas resultó ser una piedra gigantesca en sus zapatos de cuero fino; debido a que cuando Amanda y él dejaron el edificio, y para su angustia, pasaba y pasaban los minutos sin recibir noticias, sin que le confirmaran la muerte de quien había sido su maestro y guía en el mundo del narcotráfico, el abanico de
Sebastián, avanzaba despacio hacia la puerta principal de su casa, con él arma de su padre en su mano; a sus espaldas, el enfrentamiento entre los sujetos de ambas bandas rivales se disipaba, las dos partes parecían querer huir de la escena antes de querer eliminar a los contrarios, luego de que Garo, entrara custodiado a una camioneta blindada, sus refuerzos emprendieron la retirada; y los sujetos de la banda rival no se fueron tras ellos, mantuvieron su posición, esperaban a Cundo, que aún no salía de la casa. Sebastián, tenía la mirada perdida, y apretaba fuertemente el arma en su mano, luego de que entro en la casa, caminó despacio hasta pararse en el centro de la sala, con su vista puesta en el suelo; frente a él, se encontraba Cundo recostado en la pared, con el arma entre su pantalón y su cadera, y haciendo presión con su mano izquierda al bicep derecho, que brotaba sangre con mediana fluidez, este, ver a Sebastián con el arma en su mano, trató de disimular sus nervios.“¿Sera
Amanda y Sebastián tuvieron una cena espectacular, los platillos fueron cocinados a laperfección y la banda tocó sus canciones favoritas. Ninguno de los dos pudo resistirse,Sebastián tomó la mano de Amanda y la llevó a la pista de baile, donde bailaron hasta quemartodas las calorías consumidas.El hecho que “El miñón dorado” cocinara sus platillos favoritos y pusieran la música que lesgustaba no fue una sorpresa; Amanda era dueña de ese restaurante, mejor dicho la banda deAmanda era dueña de “El miñón dorado”.Cuando salieron del restaurante, Amanda estaba tan feliz que podía dar una voltereta. No lohizo, todavía conservaba malos recuerdos de la ultima vez que lo intentó. Tenía diez años yquería impresionar a unas futuras amigas, se fracturó las muñecas. Ese hecho probó quiereseran sus verdaderas amigas porque durante varias semanas, Amanda no podía ni siquieracomer sola.Amanda estaba apoyada en el hombro de Sebastián, un hombre, una cabeza, más alto queella. Amanda amaba a
Rodrigo Cerna estaba sentado cerca de su escritorio en una pequeña oficina. El exceso demuebles y periódicos usados le daban un aire mucho más pequeño, solo había un espaciodonde se podía caminar con libertad y se encontraba frente a la puerta. Rodrigo jugaba con unhabano, lo pasaba por sus dedos. Primero de la mano izquierda, era zurdo, y luego de la manoderecha. El habano era solo un objeto de distracción hasta que decidiera fumarlo. Ese díallegará una vez haya asesinado a la persona que más odia en todo el mundo.Amanda Montesinos.Rodrigo Cerna era hermano de Rigoberto Cerna, Rigo para los amigos, una de las cabezas de laorganización NAFTA, especializada en producir la cocaína de mejor calidad y a bajos costos.Rigo tenía que ir al restaurante “The Fish” para poder arreglar unas cuentas con uno de sustrabajadores más insubordinados. Cada vez que recordaba esa historia, Rodrigo no podíaevitar pensar en lo estúpido y poco creativo que era el nombre del restaurante que servir
— ¿Una mesa para dos? — preguntó la anfitriona del restaurant, mientras regalaba una sonrisa a Sebastián y Amanda.—Si es tan amable, por favor — respondió Sebastián y le regresó una sonrisa cariñosa.La anfitriona, los dejó en servicio de una mesera, que con gran amabilidad guiaba a la pareja entre las mesas del restaurante hacia la mesa indicada para ellos; Sebastián y Amanda, caminaban despacio y agarrados de la mano observando el agradable ambiente del restaurante que habían elegido entre ambos; en el transcurso, tanto como Amanda como Sebastián eran observados por muchas de los comensales que allí estaban; Sebastián, apretó un poco la mano de Amanda, que lo miró, se acercó a él y se recostó un poco en su hombro.« No puedo culparlos, la verdad, Amanda está hermosa hoy, bueno, como todos los días, pero hoy, hoy está radiante. »Los pensamientos de Sebastián lo hicieron suspirar y sentir el abrazo que aunque fueran solo los brazos de ella, rodeando al de él, sentía tanto afecto de
La mesera, luego de que Amanda pidiera también su plato típico de ensalada cesar, y entre la pareja escogiera un buen vino, se alejó con la orden.—Tanta fanfarronería para terminar pidiendo lo mismo, el típico filete de miñón — reía Amanda.—Hay cosas en la vida que siempre son buenas, aunque estén en distintas presentaciones, un buen filete de miñón, por ejemplo, son uno de esos gustos que siempre te dejarán satisfecho — Sebastián suspiró, y luego prosiguió —. Tú también te has decantado por tu fiel ensalada cesar.—Pues claro, querido. Siempre bailo al ritmo que me toques, siempre estaré allí, a tu lado, ¿no es así? — preguntó Amanda rápidamente.Sebastián, luego de hacer una muesca con su cara, respondió con sinceridad:—Pues sí, la verdad es que si… supongo que sí.—Entonces, si mi novio pide su plato favorito en nuestro tercer aniversario, siendo lo tradicional en nuestras citas, pues, no me voy a poner a inventar a pedir algo exótico para mí, ¿no crees?Amanda sacaba conversaci