—Entonces descansamos, mañana tengo mucho trabajo, pero antes debo recibir una visita.—¿De quién se trata? ¿Deseas que mande a preparar algo especial? —Miriam se iba en complacencias, quería ser una buena esposa.—No, Miriam, es solo un amigo que viene de paso y no tardará, me traerá unos compuestos que necesito para mi investigación.—Dado que es así, no cancelaré mi visita a casa de mis padres.—No lo hagas cariño —la palabra “cariño” Caden la profundizó, había sonado algo irónico, sin embargo, Miriam no notó ese detalle, estaba tan feliz en su esfera de felicidad que nada la perturbaba.Apenas el sol se coló por la ventana, Caden se levantó, se aseó y arregló. Luego, giró para ver a Miriam, quien aún dormía. Sintió la necesidad de salir de aquella alcoba con rapidez, la presencia de su esposa lo sofocaba.—¡Debo abandonar este infierno lo antes posible! —. Salió de la alcoba y bajó las escaleras hacia la sala, donde uno de los sirvientes le saludó, le dio el periódico y le pregunt
El domingo había llegado y Angelina odio eso, no quería marcharse, deseaba con todo su corazón seguir junto a Michael, pero su breve sueño ya estaba por terminar y la realidad la reclamaba.—Por favor, Angelina, no te hagas dependiente de él —se repetía de esta manera mientras se arreglaba para bajar a la sala.Clara arribó a la sala inicial, antes de que su hija, Michael, la esperaba en su despacho para abordar el asunto que habían dejado sin concluir.—Siéntate, Clara —le solicitó Michael con amabilidad. Ella tomó la palabra y posteriormente la detalló con precisión. Mientras lo llevaba a cabo con atención, no podía negar el hecho de que se había convertido en un individuo de gran belleza, aunque previamente lo era, ahora se profundizaba aún más, lo cual la hizo temer por Angelina. Su hija podía sentir mucho más dolor de lo que experimentó con Caden y no por el hecho de que Michael fuera malo, todo lo contrario. Las cosas eran ahora diferentes, el entorno que lo envolvía ya no era u
La rabia de Alyssa era cada vez más profunda, en su mente se repetía una y otra vez la imagen de Angelina bailando con el duque.—Qué es lo que tiene esa infeliz que enloquece a los hombres —Alyssa se rebanaba el cerebro examinando qué era lo que Angelina tenía, quien la hacía especial, su hermano había perdido el juicio por ella, y el duque de St. Moritz la observaba esa noche con admiración. —¡No soy Míriam!, no me quedaré con este impacto bajo, te lo devolveré con fuerza Angelina Elliot.Jazmines se dirigió hacia el jardín donde Alyssa se encontraba conversando con sus vivencias. La expresión de la joven le inquietó, ya eran muchos años de experiencia para comprender con precisión cuándo una persona estaba pasando por el trago amargo de la desilusión y su nieta Alyssa, por muy orgullosa y egoísta que fuera, era un ser humano que sentía y padecía.—Querida —dijo estando cerca de ella, después le colocó una mano sobre su hombro, Alyssa giró y miró a su abuela que la miraba con dulzur
Días después.El vendedor le entregó las llaves de la casa a Caden, manifestó que había adquirido una propiedad de excelente calidad. El doctor Greenwood sonrío.—Espero que cumpla con todos los acuerdos que hemos establecido.—No lo olvidaré, señor Alexander —. Gilbert observaba y escuchaba en silencio; el hombre no se sorprendió por el nombre que había usado su jefe; Caden muchas veces se presentaba como Alexander o Alex. Luego de que el vendedor se marchara, Caden entró con Gilbert al interior de la propiedad, se había enamorado por completo de la hermosa cabaña. Las torres octagonales que dominaban el paisaje, en conjunto con las ventanas y las puertas profusamente decoradas en variedad de color y texturas, alegraban su vista. No obstante, lo que más le cautivó era lo lejos que se encontraba de la ciudad, a dos días de camino para ser más exactos.El interior de la cabaña era espacioso y cómodo, constaba de cinco habitaciones, una sala amplia con una hermosa chimenea y cocina, tam
—Cuéntanos Míriam, desahógate con nosotras —le pidió Emma.—Caden lleva dos días sin dormir en la casa —Emma puso una mano sobre su boca, Alyssa puso una expresión severa.—¿No te dijo si saldría con Henry Stanley? Últimamente, él y ese medicucho son uña y mugre.—El doctor Stanley está en el hospital, mi madre me lo comentó hoy que fui a verla antes de venir a tu casa, así que Caden no está con él… Mi esposo tiene que estar con ella —el semblante de Míriam se llenó de ira y el de Alyssa también adquirió la misma expresión.—¿Con quién está mi primo? —Quiso saber Emma.—Con la desdichada de Angelina —le respondió Alyssa con un profundo
Alyssa había llegado a la mansión del duque. Un grupo de sirvientes abrió el portón de la propiedad con el fin de permitir que el carruaje pudiera acceder. En el interior de la propiedad, uno de los sirvientes brindó su asistencia para descender y guiarla hasta la entrada. Emilia observó la llegada de Alyssa desde la ventana de su dormitorio, supo que William caminaba por el jardín, por lo que no dudó ni un instante en que la vería; y así fue. William observó el carruaje de Alyssa Greenwood llegar a la propiedad desde la distancia.—Alianza Greenwood —expresó con incredulidad, se acercó con atención para observar de manera más precisa a la dama que descendía del carruaje, y, en verdad, se trataba de Alyssa Greenwood. —Michael no me comunicó que la había invitado. Esto debe ser responsabilidad de Emilia —reflexionó, mientras recordaba los sucesos acontecidos con Arianna y la acción en que Emilia le había solicitado que permaneciera en Edimburgo.—Carlos —dijo William llamando al jardin
Caden observaba las calles, faltaba poco para llegar a casa de Angelina hasta que observó a Vanessa salir de un establecimiento y, más adelante, a Angelina.—¡Detén el carruaje! —Le ordenó a Gilbert. Luego, en completo silencio, la observó mientras cruzaba la acera. Detalló su sonrisa, lo hermosa y esbelta que se veía. No pudo evitar sentir celos, incluso del aire que le acariciaba la piel y el cabello. Caden descendió del carruaje y caminó con rapidez para encontrarse con Angelina. Vanessa giró y se percató de que Caden se dirigía hacia su dirección.—Angelina no voltees, y camina rápido.—¿Qué sucede?—Caden venía tras de nosotros —Angelina se puso tensa y apresuró el paso, pero fue inútil, Caden ya estaba cerca de ella.—Angelina —la llamó, pero ella lo ignoro. Él se sintió impotente ante el rechazo y quiso tomarla del brazo, pero en el instante en que lo iba a hacer, dos hombres salieron de la nada y lo impidieron tocarla.—¡Suéltenme desgraciados! —riño Caden con rabia, Gilbert q
El deseo intenso de desaparecer que experimentaba Míriam era muy profundo, su madre, al ver el rostro de su hija, no pudo evitar preocuparse, la examinó y notó que había adelgazado. —Miriam, querida ¿Por qué tu esposo no ha venido contigo? Habíamos planeado una cena para ustedes —Míriam no contestó a su madre inmediatamente, estaba absorta, hundida en su mundo de dolor y decepción.—¿Piensas que fue adecuado que me casara con Caden? —Preguntó de repente sin mirar a su madre, la mujer al ver cómo su hija comenzaba a quebrarse se le acercó rápidamente. —¡Caden está saliendo otra vez con esa mujer! —No, madre, pero su fantasma permanece vivo entre nosotros dos. El llanto de Míriam se intensificó —dime madre, ¿cómo puedo recuperar algo que nunca fue mío? ¡No sabes cómo me arrepiento de haber sido tan obstinada y caprichosa, debí haberme alejado!—No cariño, no digas eso. Sé que te sonará muy repetido lo que te voy a decir, pero la experiencia me ha enseñado que muchas veces el amor lle