CAPÍTULO 41
Terminó su rutina de ejercicio y, sintiéndose mareada, al punto de tener náuseas y de ver un poco oscuro, se tiró en el tapete en que había iniciado esa rutina, haciendo un poco de yoga para estirar y calentar.

Odiaba hacer ejercicio, pero no tanto como cuidar lo que comía, porque en serio amaba toda la comida y, como no quería privarse demasiado de ella, decidió hacer bastante ejercicio por las mañanas, siguiendo ese plan de ejercicios que le preparó un entrenador del gimnasio del club al que alguna vez Alejando asistió, y que era amigo de este mismo.

Faltaba un mes para su boda, y con Alexa de casi siete meses, ella casi tenía el cuerpo con el que quería lucir el precioso vestido que había mandado diseñar porque no encontró en ninguna parte un vestido que recordaba haber visto en una revista cuando tenía trece años, junto a su madre y su abuela, así que medio lo dibujó y un diseñador lo mejoró un poco y lo confeccionó para ella.

Esta vez, a diferencia de su primera boda por el civil,
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP