Samuel estaba muy atareado, los planos que tenía que hacer a los japoneses lo tenían al borde, estos hombres eran muy llevados a la nueva arquitectura.Las juntas y las reuniones fuera, más el cambio de horario lo tenían muy mal, no había podido hablar muy bien con su mujer, pues cuando ella quiere hablar él tenía que salir a una reunión y su esposa ya estaba descansando, últimamente se la pasaba mucho tiempo durmiendo, aunque también la había notado un poco extraña.*Tiempo atrás*Ese mismo día, después de que Alía término de grabar, se fue a encontrar con la señora Olga, la verdad es que era una mujer rubia, muy guapa y tenía unos hermosos ojos grises azulados, tenía un parecido con alguien, pero ella no podía saber de quién era.—lo siento, me demoré un poco más, el director, a lo último nos dispuso a hacer algunas cosas y cambiar otras.— dijo Alía muy apenada, pues no sabía que se demoraría media hora más, cuando entró vio a la mujer un poco impaciente y con una mirada triste.Olg
Leer más