Cristal. Desde que nací me destinaron para ser reina, crecí rodeada de lujos y cosas hermosas, todo era mejor cuando era pequeña no sabía el mal que me rodeaba pero aprendí que el mundo es cruel demasiado joven incluso aún para comprenderlo y ahora me doy cuenta, comenzaron a instruirme en cómo actuar, como sentarme, cómo comer, cómo vestir, como hablar, querían manejar cada aspecto de mi vida ni siquiera era libre de reírme a mi antojo siempre tenía que mantener una expresión serena y calma, no podía hacer nada sola siempre había alguien vigilándome decían que tenían que cuidar a la futura emperatriz, nunca tuve amigos siempre estuve sola a pesar de que estaba rodeada de sirvientes, los únicos respiros que tenía era cuando miraba a mi madre que no era muy seguido me instruyó y me enseñó todo lo que sabía, al crecer más me empezaron a instruir en la política para ayudar y aconsejar al emperador todo eso fue una estupidez y una pérdida de tiempo horas que desperdicie inútilmente, cuan
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