Preparo algo sustancioso, no entendía porque el imbécil no pedía servicio a la habitación, aunque algo le decía que lo hacía solo para molestarla, miró lo que había preparado y se mordió el labio dudosa, cocinaba bien, lo sabía, había aprendido desde pequeña y aún con la falta de ingredientes se sabía defender, pero el imbécil era el heredero de la segunda cadena de restaurantes más prestigiosa del país y casi mundialmente conocida, allí cocinaban los mejores chef del mundo, ella no podía compararse con eso por más que supiera cocinar, jamás podría hacerlo pero aun asi le tenía que cocinar, acomodó los alimentos en una bandeja para llevársela.Había preparado algo simple, pero era lo que mejor le quedaba e hizo un gran esfuerzo con lo poco que tenia, todo le había quedado bastante bien o eso esperaba, suspiro y tomo la bandeja para ir a la habitación deseando que el joven estuviera de mejor humor que en la mañana o tendría que volver a ponerlo en su lugar si intentaba cumplir con su a
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