No voy a caer.

Quince minutos después, el cansancio la venció y cuando Ángel volteó, se dio cuenta de que se había dormida. Así que la cubrió con su abrigo, y bajó el aire acondicionado.

—Rubén, conduce más despacio, no tengo prisa. Ángel también reclinó el asiento y cerró los ojos.

*******Mientras tanto, en el aeropuerto, un joven salió del lugar y abordó un taxi. El joven era de piel trigueña, sus ojos son de color café, y la barba bien recortada.

—¡Caballero, déjame en el hotel Empire, escuché que es el mejor del lugar! Al parecer, ese joven nunca ha visitado Estados Unidos..

—¡No le mintieron, pero una noche en ese hotel, cuesta un ojo de la cara, es un hotel de cinco estrellas! El conductor del taxi detalló minuciosamente al joven y pensó que probablemente podría estafar al muchacho, pues se nota que tiene dinero.

—¡Cada vez que mi familia viene, se hospeda en ese hotel, ellos son los mejores abogados, y por supuesto que yo les seguí los pasos!

Los panes del chofer se vinieron abajo, jamás
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