Si bien no estaba seguro de hacer lo correcto, Charlie iba a intentarlo con la famosa maestra Sunny. La ha citado en una cafetería para quitarle un poco de intensidad a la situación y esperaba no solo conocerla, también en realidad tomarla como una candidata para el puesto, después de todo entre los requerimientos de su jefe nunca mencionó que ella no podía serlo ¿o sí? ¿Qué tan mal podría salir si llega esta mujer a la casa de los Upton a hacer de niñera? Se puso a reír porque sabe bien que será despedido junto con ella apenas Darcy Upton la vea, pero bueno, ya estaba ahí y aunque ha tomado la decisión guiado por los consejos de una pequeña de diez años, puede que las cosas al final no funcionen y ella no cumpla los requisitos como tal. Se encontraba pidiendo un café con un pequeño panecillo cuando vio a esta guapísima castaña llegar al lugar. Delicada, esbelta, cabello suelto y grandes ojos marrones parecía confundida viendo a ambos lados, ciertamente era joven
No regresó a su casa con la mejor de las emociones y apenas pudo comerse la galleta, que le supo deliciosa, en el camino. De alguna manera se le hacía como una burla de la vida o el destino, no sabía a cuál culpar realmente, la idea de que la única oportunidad de trabajo que le ha salido en estos días, en esta últimas semanas esté relacionada con ese hombre que la trató tan mal cuando solo hacía una buena acción. Y claro que puede justificarlo, puede rebuscar en su mente la forma correcta de mantener el respeto hacia Darcy Upton, porque sí, aun cuando la buena acción haya salido sin una sola mala intención y ciertamente jamás le haría daño a unas menores, puede entender que para él como padre todo el panorama debió verse como algo aterrador. Deja a sus hijas en la escuela para que reciban dos horas de gimnasia, pero cuando envía por ellas ya no están. Estaba justificado en perder la cabeza, eso lo acepta y entiende, pero no lo puede justificar por completo cuando
Al observarse al espejo solo pudo suspirar de manera pesada. Ha decidido peinar su largo cabello castaño en una coleta que le despeja el rostro y se puso una de sus mejores blusas, con un pantalón de tela un poco gruesa por el frío. No quiere lucir demasiado formal, pero tampoco que no se ha tomado la oferta con seriedad, ya que después de mucho pensarlo ciertamente ha decidido que la quiere y va a luchar por ella. Aplicó de su perfume de supermercado, uno que viene usando desde hace mucho en los lugares que ha aprendido de su abuela, y tras un suspiro buscó la salida, tomando su bolso, las llaves de su viejo automóvil y fue bajando hasta encontrarse con su hermano y abuela cargados de emoción y grandes ojos brillantes. Aunque hubiera deseado no dar la noticia hasta que fuera real, su padre no se ha guardado nada y su pequeña familia ya sabía lo que sucedería ese día. Su sonrisa fue encantadora cuando miró el desayuno servido en el comedor. Su padre ha salido hac
De manera inmediata el ceño se frunció en ese hombre cuando vio a la delgada y pequeña mujer cargar a su hija. Siempre ha sabido que las gemelas tienen una estatura bastante por encima de la normal para su edad y es por él mismo, por lo que aquella acción lo tomó desprevenido, pero aun más ver como iba con toda la seguridad hacía la habitación de las mismas siendo guiada por una nerviosa Zarah que no ha soltado su peluche. El padre estaba impávido, viendo a sus empleados y el mismo Charlie ingresar antes que él a la habitación, pero la que llevaba el control era la famosa maestra Sunny, quien no solo pidió que se encendiera el aire acondicionado de la habitación, también que se abrieran ventanas para dejar entrar un poco de frío. —Si tiene frio, ¿Por qué le daremos más frío?—consultó con seriedad, viendo la mirada asesina que se posó en él. —Tiene frío porque la fiebre se lo causa. Cubrir a una personas con fiebre es un grave error, no permite que el cu
Tras el retiro del doctor, quien anunció que la condición de Zoey estaba mejorando, pero ciertamente había que estar pendiente de las fiebres o cualquier otro síntoma. Hizo una revisión también de Zarah, que al igual que su hermana se mantuvo agarra de la mano de su maestra quien al final amplió la sonrisa cuando las dos niñas felices la buscaron en un apretado abrazo. Darcy fue testigo de lo mismo y ante lo que ya ha dicho no puede hacer nada más que hablar con la mujer que ha logrado una clara mejoría en el semblante de Zoey y ha dibujado enormes sonrisas en Zarah. Las dos menores comieron de manera animada en la habitación, contándole a su maestra como ha sido esas dos primeras semanas de vacaciones que han pasado. Claro que no dejaban de señalar lo felices que ambas estaban ahora que papá ha aceptado que ella se quede como su niñera y claro que los planes no se hicieron esperar, en especial aquellos que incluían juegos, paseos, y conocer lugares las tres, por
La celebración en la habitación de la pequeña fue inmediata cuando la maestra regresó a darle la noticia de que efectivamente había conseguido el puesto que la convertiría en su niñera. Zarah en el piso daba vueltas para dejar que su vestido volado se abriera como una encantadora campana, mientras Zoey en la cama se movía de un lado a otro hasta que la tos la invadió. De inmediato Susannah tuvo que atenderla. Ciertamente ha sido de los días más felices para las solitarias niñas que al verse envueltas en la dulzura y trato de la encantadora maestra Sunny, el rayito de sol, no dudaron en abrazarla las dos al mismo tiempo hasta que se vio tirada en la cama de la enferma entre las dos chiquillas. Se mantuvo en ese espacio solo suspirando de forma pesada, para luego hacer un gesto de asco cuando agarró lo que parecía un pañuelo de mocos, lo que de inmediato liberó las risas infantiles, pero Zarah no dudo en bajar de la cama y pasarle no solo alcohol, también unas toal
En el moderno edificio en el centro de la ciudad se han unificado cinco empresas para cubrir la renta del mismo, pero perfumerías Upton tenía dos pisos, donde se daba el área de atención al cliente, talleres de perfumerías, mercadeo y campañas publicitarias, siendo el corazón completo de la línea de la reconocida perfumería nicho que parecía intentar recuperarse de esa larga ausencia a la que fue sometida cuando se dio la perdida de uno de sus miembros más importantes. Con ese andar distinguido Darcy Upton se fue moviendo en los pasillos que conocía con los ojos cerrados, dirigiéndose hacia la sala de juntas donde tenía una reunión con Wesley Hale, uno de los socios que se ha quedado con él incluso en el peor momento. Si bien Upton era una empresa de carácter familiar, cuando llegó a las manos de Darcy, el mismo se dio a la tarea de buscar aliados que disfrutarán del rubro y le ayudarán a expandir aún más su alcance, Wesley fue una de esas personas. La reunión ta
Cuando llegó al restaurante su alta figura captó la atención de manera inmediata, en especial de las féminas en el lugar. Sin dudarlo se movió hacia la pelirroja que ha elevado su mano y ya de pie aguardaba por él. Portia solo amplió la sonrisa encontrándose con el apuesto Darcy Upton, a quien no dudo en retener en un abrazo un poco largo y hasta le dejó doble beso, viéndole la tibia sonrisa que dibujó. Tomó su lugar junto a ella, recibiendo con educación el menú que el mesero dejó para él, ordenando de inmediato una copa de vino blanco, de sus favoritos, pero la final Portia le tomó la mano entusiasmada de saberse al fin teniendo ese almuerzo del que le venía como alertando desde hace varios meses. —Que delicia verte—indicó la guapa mujer viéndolo con una amplia sonrisa—pero veo que ya ese ceño fruncido te ha dejado marcas cariño—le tocó la frente donde parecido limpiar esa que al parecer se ha vuelto una arruga permanente en Darcy—cuéntame, ¿Cómo estás?¿cómo es