Capítulo 409
Pablo, jugueteando con su teléfono, no pudo evitar reír:

—Al menos yo no traigo a mis conquistas a nuestra casa.

Camila quiso responder, pero Pablo interrumpió sacando de su bolsillo una serie de fotos y lanzándolas sobre la cama:

—Mira tus escándalos, cada foto con un hombre distinto. Sin ellas, jamás hubiera conocido la verdadera naturaleza de mi esposa ni cuánto disfruta.

Camila, recogiendo las fotos una a una, quedó petrificada. Cuando finalmente habló, su voz era un susurro suplicante:

—Pablo, me siento increíblemente sola. Te imploro, no dejes que mi padre vea estas fotos; me mataría.

Ella conocía la crueldad de Pablo; durante años la había sometido a incontables torturas sin piedad.

Camila se arrastró hasta el pie de la cama y abrazó las piernas de Pablo. Intentando seducirlo para reconciliarse, apoyó su rostro en el muslo de él y murmuró con una voz suave y cálida:

—Pablo, ¿podemos olvidar el pasado y empezar de nuevo? Prometo ser fiel, seré la señora Morales que esperas, no me
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP