—Por supuesto que me arrepiento.

—Si así fuera, estarías haciendo algo para recompensarlo… —suspira—. Como me encantaría que sintieras lo que estoy sintiendo ahora mismo, todo es una mezcla y estaría dispuesta a vengarme solo para que estés en mi lugar, aunque el incesto sea aceptado entre hombres lobos, jamás me casaría con Ross.

—¡Me obligaron Meg, no tuve opción! —repetir.

Pero esta ciega de tanto dolor, le decepciona que no se haya entrado por mí ya su vez, le duele que Rocky este conmigo, porque ella aún lo ama.

—Tu padre es malo, pero no creo que sea capaz de mandar en tu corazón.

— ¿Qué estás insinuando?

—No creo que cediste tan fácil porque te obligaron, lo hiciste porque muy en el fondo te gusta Rocky, al fin y al cabo es tu compañero, ¿no? No puedes impedirlo.

—Ya no quiero esto.

Quería un apoyo, no una persona que me acuchillara.

—Pues como mar.

Aprieto el control del portón y salgo de ahí, otra parte de mi corazón está rota.

Me subo nuevamente en el auto y parto