Detrás del escenario, estaban todas las chicas las menores de 25 años ocupaban un vestido simple blanco, las mayores ocupaban vestidos más reveladores de color azul.

Pero todas esas miradas de aquellas mujeres estaban pegadas en una niña de 18 años que estaba tirada en el suelo, ya le habían limpiado una herida que llevaba en la cabeza, pero hace rato que no despertaba y todas tenían miedo mientras se susurraban entre sí, ¿acaso esa sería la nueva estrategia para conseguir más mujeres?, pensaron, quizás la forma en que las conseguían era muy difícil.

Ya que era a base de comprarlas a gente que sus empresas quebraron, o eran pobres o no las querían, etc.

Una de las mujeres, llamada Carla de 30 años se acercó para despertar a Lucia, al despertarla trato de explicarle todo mientras que el rostro de ella pasaba lentamente de uno confundido a uno horrorizado, comenzando a llorar mientras que la mujer solo la abraza para contenerla, después de un rato de llanto le dijo piénsalo, quizás te toque algo mejor.

Después de dichas palabras sacaron a carla para la subasta... Lucia solo miraba como sacaban a esa dulce mujer de la sala, repasando sus palabras, la verdad es que ella tenía razón, ya no había nada peor de lo que sus padres hicieron.

Mientras tanto afuera las personas pasaban, el rato igual, todos extasiados por las hermosas mujeres que iban y venían, este negocio iba bien para el presentador, varias mujeres ya habían sido vendidas, algunos de los multimillonarios hasta ya se habían ido con las mujeres que compraron.

Ya eran las 00 a.m. y se supone que se habían acabado la subasta hasta que el presentador dijo "Bueno, ahora que somos pocos y solo quedan los más avaros y adinerados, esta es la última subasta de la noche, una chica de tan solo 18 años, la encontramos desmayada en la calle, pero por dios que es una lindura, mide 1,60, tiene un pelo cobrizo y una cintura de maravilla, así que empezaremos con un millón, quien me lo da???"

Al solo terminar la frase varios empezaron a levantar la mano y rápidamente el número fue subiendo, la chica solo estaba ahí parada oyendo la barbaridades de números que decían pero no podía ver nada por la venda de sus ojos hasta que oyó al presentador decir "entonces serán 7.5 millones a la una! A las dos y a-".

No alcanzo a terminar su frase cuando una voz conocida para esa muchacha hablo y dijo "Ofrezco 10 millones y en efectivo" la sala inundó un enorme silencio para luego el presentador decir " Y es vendida a aquel de señor por 10 millones, por favor vaya a la habitación de atrás y llevaremos su recompensa, eso es todo por hoy, tengan una excelente noche, nos vemos a la próxima!" Dijo aquel hombre para que luego las cortinas se cerraran en frente de él.

Empezó a empujar a la muchacha hacia la sala en que la esperaría su supuesto comprador, ni ella podría creerse que gastarían tanto en ella, todas las demás subastas habían máximo alcanzado los 3 millones.

De un momento a otro sintió como se detuvieron y ella se quedó quieta, le verdad tenía miedo y mucho, que pasaría con su vida de ahora en más.

Después de unos 30 minutos llegaron al lugar, había puros ricachones, tomando vinos y con varias joyas, maletines y armas con ellos, también

había guardaespaldas, mujeres hermosas que servían los cocteles, hasta que las luces se empezaron a apagar y todo mundo se quedó callado... "La subasta ha empezado mis amigos!!" se escuchó detrás de las cortinas, los aplausos empezaron al igual que los murmullos, todos ansiosos por ver que les esperaba hoy....

No paso mucho, para luego sentir como la cargaban en brazos y la sentaban con delicadeza en un cómodo asiento quería quitarse ese antifaz, era raro no poder ver, ni que ella fuera a decir algo, pero prefirió no protestar.

Así fue el viaje un tranquilo y silencioso viaje, no esperaba tanto de aquella persona, igual debía admitir que sentía miedo, esta nerviosa no podría confiar al 100 en aquel hombre que me compro, no podía bajar la guardia pero el sueño me estaba matando y tras esa oscuridad profunda que me entregaba aquel antifaz fue difícil no caer en un sueño.

El hombre vio como la muchacha se quedó dormida y la acomodo para que durmiera mejor, esto quizás era obra del destino pero estaba encantado con esto, solo esperaba no asustarla.

Se quedó mirando por la ventana sumergido en sus pensamientos, en que hará, si podrán seguir, si algún día ella lo amaría o si el en verdad estaba enamorado de ella que no había conocido hace tanto, como una mujer podía tener tan loco a un hombre con solo hacerle saber su existencia?

Suspiró y se acomodó con aquella linda y tierna chica que sentía que debía proteger, la abrazo y se acostó mientras el conductor se mantenía en silencio e iba con cuidado para no hacerle algún mal a los pasajeros, 1 o 2 horas fueron suficientes para llegar a su destino, el conductor bajo con paso ligero y despertó al caballero informándole que ya estaban en su destino.

Él le pagó a su conductor y cargo suavemente a la hermosa dama, llevándola a una habitación de invitados, la habitación era espaciosa, las paredes eran color blancas, la cama tenía sábanas blancas también, y tenía un baño privado la habitaciones, el baño no era la gran cosa, pero había suficiente espacio, para que no fuera demasiado chico.

El hombre la acostó con delicadeza en la cama y salió de la habitación después de tapar a la chica cerrando así la puerta con seguro, las ventanas no había de que preocuparse, de todas formas un salto desde donde estaban era 100% seguro que terminarías con algún hueso roto, escondió la llave de cuarto y se colocó pijama, estaba demasiado exhausto para seguir despierto y al tocar la cama cayó en un profundo sueño, sabiendo que mañana sería un nuevo día