31: Caprichos

Era indescriptible lo que Carl sentía en esos momentos, todo lo que le había hecho a Anastasia era imperdonable y dudaba mucho que ella lo llegase a perdonar. Prácticamente lo había echado y no deseaba hablar con él.

Sentía deseos de matarlo con sus propias manos, su estúpida e hipócrita sonrisa no hacían sino aumentar más la rabia que iba creciendo en su interior.

—Eres un maldito.

Él se iba abalanzar en contra de Anastasio pero Máximo fue más rápido y lo retuvo.

—¡Suéltame Máximo¡ — exclamó enfadado — Quiero matar a ese infeliz por todo lo que nos hizo. Lo pagaras caro Anastasio.

Anastasio esbozó una media sonrisa, avanzando cada vez más lento hacia la ventana, arrastrando consigo la silla que tenía en frente de él.

—Pero si yo no fui el culpable de hacer sufrir a tu esposa — dijo él — Tú solito te encargaste de eso.

—¡Por tu maldita culpa! — seguía forcejeando para liberarse. — Si algo le pasa a ella y al bebé que espera te asesinaré y créeme, no quedará rastro de ti.

—Inténtalo —
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo