Amadeus les dio una fría mirada con una extraña sonrisa y luego dio la vuelta y se fue.Helene caminó hacia Itsac y le apoyó la mano en el hombro.— ¿Crees que pueda proceder esa denuncia? — le preguntó y él como única respuesta abrió el papel y lo leyó.— Podría ser — comentó — tendría que verlo mi abogado, pero parece que sí podía proceder argumentalmente que mi incapacidad puede traer grandes consecuencias para la aerolínea y como es el segundo inversionista más grande tiene todo el derecho, legalmente, hablando, a velar por los intereses de sus acciones.Tomó la hoja y la dobló perfectamente, luego se le atendió a Toro que la guardó en el bolsillo.— Todo eso que dijiste…— Es obvio que no lo siento — le dijo Helene e Itsac asintió con vehemencia. — Claro que lo sé. Tal vez fue un poco crudo, pero espero que lo hubiera asustado lo suficiente — Aurora chasqueó la lengua mientras doblaba el pequeño trajecito con falda que había llevado para el bebé de Helene e Itsac.— La verdad no
Pasaron la noche en vela. Apenas una hora después de que Helene vio la noticia, la parte exterior de la casa se llenó de periodistas paparazzis y si decenas de personas que quería la primicia de la mujer que había amenazado de muerte a un hombre tan importante como Amadeus Guerrero. El tío de Itsac había sido estúpidamente astuto, manipuló la grabación y aunque sí era la voz de Helene y ella sí había dicho todo aquello, el hombre ayudó a sacarlo de contexto dejando únicamente las partes más dramáticas, descaradamente añadió cosas que él nunca les dijo, como que le suplicó que se dejaran ayudar, donde le decía a Itsac que lo quería y que solamente quería su bienestar y donde lucía como un hombre comprensible y asustado por su familia.Las redes sociales explotaron de una forma inimaginable, las opiniones divididas y las denuncias masivas hicieron que el perfil de la red social de Helene, con tantos millones de seguidores, fuera bloqueado.A Helene no le importaban tanto los seguidores
Prensa, noticieros, periódicos, magazines, programas de chismes. Todos querían un pedazo de la noticia del momento y cuando llegó a la mañana la voz de Helene le había dado la vuelta al mundo.Las opiniones más divididas que nunca, pero la palabra salud mental era la que opacaba las primeras planas. Según Amadeus y lo que argumentaban la mayoría que estaban en su contra, era que todo lo que había tenido que vivir con el secuestro y la casi muerte de Itsac la habían enfermado mentalmente, básicamente, que estaba loca, era lo que querían decirle todos y todo pareció salirse de control. Afuera de la casa de Itsac se amontonó un centenar de periodistas. tuvieron que cerrar las persianas para que no se asomaran por las ventanas a tomarles fotografías y las opiniones están más divididas que nunca, el video que salió en el periódico ole In Pemiere, con Alexandra Tcherassi, ayudó bastante a su buen nombre.Itsac se preguntó Cómo la periodista había logrado tener una copia de la denuncia que A
Toro avanzó hacia la periodista y la tomó por los hombros.— dime que estás bromeando — pero ella lo miró mal y se apartó.— soy una de las periodistas más importantes que tiene este país, incluso más que la rubiecita esa de su amiga Aurora. Yo no digo mentiras, no tengo razón para decir alguna, las odio.— entonces, ¿cuáles son las pruebas que tienes para involucrar a Amadeus? — Alexandra caminó hacia el comedor y se sentó en una de las sillas, sacó su bolso y lo dejó sobre la mesa, luego lo abrió y le tendió unas fotografías — Helene las observó era una lista de fotografías de alguien encubierto que seguían a Amadeus por una calle. El hombre tenía una abrigo y había nieve, parecía que era invierno, pero quién sabe en qué país. En la siguientes fotografías se veía a Amadeus con otro hombre, un hombre calvo y alto, delgado con los ojos fríos como el hielo. le daba la mano luego se daban un corto abrazo y ambos entraron a un restaurante, habían más fotografías de ellos cenando.— ¿y es
Itsac se quedó un rato en silencio mientras procesaba lo que Helene le había acabado de contar, ella se quedó ahí de pie conteniendo el aliento, esperando que Itsac tal vez se enojara, que le dijera que no lo haría y que estaba loca, pero a diferencia de lo que Helene imaginó, el piloto sonrió con un poco de tristeza en los labios.— Cariño, no creo que haya nada que se pueda hacer, tus cuarzos puede que hubieran sido poderosos, Pero esto es diferente — caminó hacia donde él estaba y lo tomó por las manos, luego le dio un beso en los nudillos.— No, Itsac esto, es diferente, no es con los cuarzos, es con los hijos del bosque — Itsac apretó el entrecejo — Porque ellos ellos tienen habilidades, casi como Crepúsculo, ¿lo recuerdas? cada uno podía tener dones diferentes — Itsac negó levemente.— Yo nunca me vi esas películas — Helene chasqueó la lengua.— No importa, lo importante es que entiendas que existe la posibilidad de que te curen de una forma más segura, sin ninguna intervención
Helene esperó en la ventana, cuando vio el auto de su cuñado Carlo llegar, los periodistas se abalanzaron sobre ellos. Portia blanqueó los ojos cuando una avalancha de flashes la cegaron, así que sacó sus gafas oscuras y se las puso.Carlo era un hombre alto y fuerte, agarró a su novia de la mano y comenzó a avanzar entre el tumulto de personas que querían sacarles una entrevista, con su ancho cuerpo se le hacía muy fácil empujar a los débiles periodistas que se movían hacia los lados.Una habilidosa reportera llegó hasta Portia y le puso el micrófono en la cara.— ¿qué opina de todo lo que está pasando con su hermana? — le preguntó, pero Portia no contestó, únicamente lanzó una mueca de desdén hacia la periodista — ¿regresará al modelaje? — le preguntó después — ¿quiere revivir los viejos tiempos? — tenía el micrófono tan cerca de la cara de Portia que la gemela la empujó, agarró el micrófono y lo lanzó a unos 20 metros de distancia con todas sus fuerzas.— Sí, sí extraño esto de los
Itsac se quedó un momento ahí, el hombre que le tendió el papel se quedó con la mano estrada mientras el piloto pensabas si recibir o no lo que le ofrecía.Después de un largo minuto isa Itsac tomo la hoja y la leyó mentalmente.— esto tiene que ser una maldita broma — les dijo a los miembros de la junta que se tensaron ante la rabia del hombre — ¿por qué creen que pueden hacerme esto solamente porque mi tío se los dijo? solamente porque sus patrañas están envolviendo a todo el mundo — el hombre que le tendió la hoja caminó nuevamente hacia la silla y se sentó.— esto no es por su tío, es por la compañía, su reputación está sucia y manchada y tiene que entender que nosotros tenemos que buscar lo mejor para Aeromaya. Usted más que nadie debería entenderlo, su liderazgo ahora no solo no le sirve a la compañía, la afecta. No sé si se dio cuenta de los vuelos que se cancelaron por la falta de pasajeros.— la gente es idiota — comentó Helene y todos la miraron — aunque fuera verdad lo que
— ¿Entonces vamos a hacer esto de forma ilegal? —preguntó Helene un poco confundida y más bien asustada. Portia tampoco parecía muy convencida de aquella decisión, pero Toro lo asintió con vehemencia.— Es lo mejor que podemos hacer, ya sabemos que no podemos confiar en las autoridades, no sabemos Amadeus cuántas cosas más haya comprado con su socio dinero, así que sí, vamos a hacerlo de forma ilegal.— no sé si esta idea me convence comentó — Portia — La verdad, siento que puede ser un poco arriesgado.— ¿arriesgado? — preguntó Carlo con sarcasmo — tú te hiciste pasar por la asistente personal de un mafioso mucho más peligroso, varias veces, ¿te acuerdas? — Portia asintió.— lo sé, pero siento que aun así esto sigue siendo muy riesgoso — su novio le puso la mano en el hombro y la trajo hacia él dándole un abrazo.— vamos a estar bien, Toro fue el más buscado del país durante un tiempo, yo tengo entrenamiento de uno de los capos mafiosos más peligrosos del país y este piloto… pues sab