PARTE SEIS: QUÉDATE A MI LADO

CAPÍTULO UNO

¿Qué se podría decir del corazón que palpitaba sin realmente hacerlo? El deseo, la magia y todo ese paraíso con el que ella soñó estaba en ella. Ya lo había dicho, ya no había nada después de ese momento y lo peor de todo es que Diego había logrado descubrir que no toda la gente era así, como el pensaba, jóvenes ricas que buscaban comprarlo todo. Y aunque en un principio pudo haber sido de esa manera.

Diego no pudo hacer otra cosa más que bajar la mirada. La mujer frente a él llevaba su hijo, un hijo que él jamás iba a conocer, un hijo que jamás vería crecer como había visto crecer a la hija que no era realmente suya pero que logró ser el milagro de su vida.

Al menos, en este mundo él había hecho algo bueno por una persona. Andrea iba a hacer su sueño realidad de ser madre.

— ¿Acaso no dirás nada? —Preguntó Andrea con gracia.

Lo que parecía ante sus ojos era que él ya sabía lo que eso significaba. El acuerdo era ese, Diego no iba a ir a n