Una información que para el millonario era como ese brebaje caliente que apaciguaba los malestares de su cuerpo y alma, todos esos miedos que acumulo por tanto tiempo se esfumaban, al fin iba a contar con el heredero que tanto deseaba, lo demás tenía poca importancia delante de esto.Por tantos años tuvo tanto miedo de convertirse en padre por la incapacidad que sentía de querer a alguien ajeno a él, pero a medida que los años iban pasando y que se fue percatando que el tiempo para engendrarlo se reducía, fue cuando se empecino con la idea notando que si no lo ejecutaba cuanto antes lo más probable es que ya no pudiera hacerlo.Sin mucho éxito fueron sus intentos, esas nuevas ideas de padres subrogados y afines no eran para él, si iba a ingresar en la paternidad lo haría del modo tradicional y sino era una señal del universo que le gritaba a los cuatro vientos que eso no era para él. Lindsay, el ser que Dios coloco a su lado para que despertara de la indolencia en la que vivía, para a
Se despidieron con un gran beso en los labios y con las miradas eran capaces de expresar todos los sentimientos posibles, los dos estaban enamorados y el fruto de esto crecía dentro de ella como las semillas que planto en la casa de su padre. Los días pasaron y el momento de la prórroga había llegado, el millonario, en compañía de su abogado llegaron puntualmente al lugar en donde estaba pautada la cita mirando con un aire de superioridad al par de mujeres.Al llegar el fiscal todos pasaron a la sala, tenían la palabra las damas y en pocos segundos expreso de forma detallada como había pruebas fidedignas de los engaños sistemáticos de este hombre hacia Sofía presentando como evidencia una prueba de embarazo de la última de sus parejas, el fiscal se volvió ante el con una mirada de desilusión. Esta evidencia se trataba de algo contundente y si traían a la chica ya la estarían involucrando en todo esto, lo único que le quedaba era declararse culpable de los hechos que se le acusaban y a
A lo largo de un recorrido una persona puede experimentar ciertos cambios de mentalidad que le de a poco lo saquen de inconvenientes que por audaz, egocéntrico, avaricioso o lujurioso incurrió, incluso a nivel religioso se dice que un ser supremo existe y si te encuentras lo suficientemente arrepentido de lo que hiciste puede perdonarte sin importar la magnitud de los actos realizados.No obstante, en el caso específico del millonario Harry Smith, si bien ahora era un poco más sensible en cuanto a las necesidades de los demás, confiaba en las palabras de Lindsay, estaba dichoso por la idea de ser padre, el mismo no se arrepentía en absoluto de cegarle la vida a unas mujeres que si bien no se encontraban en los lineamientos morales, cívicos o religiosos no le correspondía a él hacer ese trabajo. Lejos de dolerse por una vida que arranco, por quitarle la oportunidad a un ser humano de cambiar y reflexionar por su cuenta en el fondo, en la intimidad de su habitación cada que lo recordaba
A lo lejos ese tal jefe los miraba fijamente, nunca fue del agrado del millonario, se trataba de un desviado de los que el magnate mantenía un mal concepto ya que era bueno juzgando las acciones de los demás y tapándose los ojos para no ver las suyas.—¿Vengo a buscarlas mañana? —Finiquitó este molestándose un poco por todos los rodeos.—Yo te llamo —Fue lo que su novia le respondió retirándose de su lado y volviendo a su lugar de trabajo.Ese tipo de respuestas inciertas que solía entregarle ella le molestaban sobre manera no se trataba de una persona paciente que se encontrara dispuesto a esperar a que el resto decidiera que hacer con su vida, aunque con el caso específico de la chica conocía que no se trataba de una mujer igual a todos, no podía simplemente sobornarla con darle dinero o no comprarle ese vestido que tanto desea. Ella no mantiene cosas materiales que la aten a permanecer al lado de nadie y lejos de ser como el siempre buscar tomar decisiones, aunque en el momento no
Unas piernas largas en la acera caminaban de un lado a otro con un vestido de lentejuelas ajustado que dejaba entrever una esbelta silueta que hasta hace poco adornaba las portadas de las revistas más importantes del mundo, pero está belleza al igual que otras tantas cosas fue dejada de lado por un mundo malvado que la arrastró a los vicios.Mismo que ahora, era que ellos lideraban sus pasos le cierran las puertas en la cara, llevándola a estar aquí en esta noche sin luna por la cantidad de nubes que hay en lo más alto del cielo, esperando las luces de un auto y al verlo le hace saber, extendiendo su mano, que está de servicio.Uno de los empleos más antiguos del mundo y ahora era su profesión, no esperaba nada de la vida, ella le dio todo y se lo quitó en un segundo, conocía gran parte del mundo, tuvo el tiempo y dinero suficiente para recorrerlo, tuvo joyas, autos, casas de lujo y ropa de diseñador. Aún quedaban algunos pequeños indicios de esta vida lujosa que todavía los vicios no
Al abrirlo se trataba de un cuarto rojo con paredes de gamuza, esposas en el techo, mesas con artilugios excéntricos incluso creyó ver un cuchillo en una de ellas, en ese momento su corazón se aceleró y quiso salir apresuradamente de allí, no había dinero suficiente de por medio para que alguien viniera a dañarla.—Si lo que usted busca es alguien a quien herir lo mejor es que rompamos el trato, no estoy dispuesta a permitirlo —Indicó ella mientras el sudor bajaba por su frente.El hombre se dio cuenta que ella era diferente a todas las mujeres de la calle que había llevado a esa misma habitación, aunque estuviera vendiendo su cuerpo en las aceras se trataba de una mujer a la que le gustaba ser tratada con cariño y respeto, inusual en las avenidas oscuras donde solía buscar su diversión, no le importaba la negativa de ella, todo lo contrario, eso lo haría incluso mejor.—No te molestes, solo quería que vieras este salón al que le llamo el cuarto bohemio —Se excusó el mostrando su gran
La joven noto como cerraba la puerta con llave, pero aun así se acercó para comprobarlo por ella misma y en efecto al mover la manija está se encontraba bajo llave ¿Esto era un trabajo o se trataba de un secuestro? Busco su bolso en todas direcciones y no lo vio ¿Cómo había sido tan loca de dejar sus pertenencias en el auto? Se encontraba en el cuarto de un desconocido sin que las pocas amigas que tenía supieran su paradero, eso parecía digno de uno de esos titulares horribles que narraban historias de imprudente en la parte de sucesos.¿Para qué gritaría? Su cliente vendría para decirle que no era para tanto, que no se pusiera histérica o peor, respondería de forma violenta, lo mejor era seguir sus parámetros y esperar lo mejor, después de todo ya se involucró en esta locura. Se colocó el pijama seleccionado y se metió de nuevo entre las sábanas con la mirada fija en la puerta principal, cualquier movimiento que pudiera escuchar, eso fue factible hasta que el cansancio se apoderó de
Muchas horas sin que a su cuerpo ingresarán sus vicios habituales, esos que la hacían sentir tranquila y olvidar todas las carencias emocionales que siempre tuvo, sudaba de forma desenfrenada, sus ojos estaban desorbitados, su corazón acelerado y su cuerpo tembloroso, estaba pasando la peor de las abstinencias desde que comenzó en ese mundo. Este era un destino del cual difícilmente se podría escapar, veía a todas partes con una ansiedad tan fuerte que comenzó a morderse efusivamente los labios.—¿Qué te sucede cariño? —Consultó su esposo falso al verla.Con la camiseta quedaba al descubierto sus brazos bastante amoratados por sus prácticas habituales, al verlo supo el porqué de su actitud, pero él quería una esposa perfecta, sin vicios ni mañas por lo que no le permitiría hacer eso de nuevo. Se bajaron en una exclusiva tienda Chanel y allí les pidió a los empleados que la hicieran probarse todo lo que le quedará, para que ella eligiera los artículos.Al principio en la mente de la jo