Inicio / Romántica / Una Esposa Muda para el CEO / Capítulo 4: Una noticia preocupante
Capítulo 4: Una noticia preocupante

Lily Smith

Cuando el señor Huxley está contándome una anécdota del golf, llega al comedor una pareja joven, la mujer es muy parecida a Jake, sólo que sus ojos son marrones. El hombre es muy guapo, pero no tanto como Jake, por supuesto y sigo sin poder creer que me pidiera ser su novia.

¡Estoy flotando!

—¡Hermanito! —dice ella corriendo hacia Jake y abrazándolo con fuerza.

—¿Cómo estuvo tu luna de miel?

—¡Perfecta! —veo que se fija en mí y su mirada es de curiosidad—. ¿Y ella? ¡Oh, por Dios! ¡¿Tienes novia?! —se acerca a mí, me pongo de pie y a saludo con la mano.

—Te presento a mi novia, Lily Smith.

—¿De los Smith de Glasgow? —me sonrío por su pregunta, ella quiere saber si soy de alta cuna y no tiene idea de que mis padres me adoptaron a los dos años. Niego con educación y ella insiste—. ¡Oh, entonces los Smith de Oxford!

—Lily, ella no es de una familia importante —su hermana se asombra, pero no me mira con desdén como su madre—. Lily, ella es mi hermanita Charlotte y él es su esposo Louis Barkley.

Le doy la mano al hombre brevemente porque su mirada no me gusta para nada, me hace sentir incómoda.

—Y dime, Lily, ¿cómo es que conquistaste a mi hermano? Porque es uno de los solteros más codiciados y escurridizos de la ciudad. Mis amigas en vano quisieron acercarse, pero este hombre es un muro —me mira para esperar mi respuesta y yo veo a Jake para hacerle las señas, para que él pueda responder por mí.

—Dice que no tiene idea —responde Jake riéndose y me hace las señas diciéndome «todo de ti, preciosa, especialmente que no necesitas hablar para expresar lo que sientes, porque esos ojitos lo dicen todo».

—Jake, ¿ella es…?

—Sólo no puede hablar —le dice Jake rodeándome por la cintura y besa mi sien—. Ella te entiende perfectamente, pero no puede responderte, al menos no de la manera convencional.

—¿Y aprendiste leguaje de señas por ella? —pregunta Charlotte conmovida por completo y Jake sólo sonríe a modo de respuesta—. ¡Eres el mejor! Esto te eleva por sobre papá, ¡te lo juro que sí!

—No es la gran cosa, no exageres —dice su madre quien llega con la servidumbre que trae la cena—. Es increíble pensar que sólo porque es muda deben mirarla como alguien especial —siento a Jake que se tensa, sé que le va a responder y yo le tomo el brazo.

Le hago las señas para la respuesta y se larga a reír.

—Lily dice que te agradece que no la veas como alguien especial, porque es tan común como todos los demás, sólo que no puede gritarle groserías al chofer del autobús cuando no se detiene…

La mujer pone mala cara, nos sentamos nuevamente y la cena se vuelve muy tranquila. En cierto punto Jake me advirtió de su hermana y su cuñado, pero lo cierto es que ella es muy amable conmigo y él sólo me mira con cara de gato a la carne, lo que me molesta mucho, pero no le digo nada a Jake, porque parece de buen humor.

Estamos hablando luego del postre, ellos me han hecho parte de todo y Jake se ha convertido en un buen traductor, sólo algunas cosas no las entiende, sin embargo, logramos comunicarnos perfectamente.

Ante el primer bostezo, él se pone de pie y salimos de la casa casi corriendo, yo en medio de abrazos de todos, menos de su madre.

—¿Cómo te sentiste? —Jake me ayuda a subir a su camioneta y me coloca el cinturón, le respondo que bien y él sonríe—. Eso es bueno, nena, porque vendremos más seguido… para que tú lo sepas y para que ellos se acostumbren.

Se sube rápido, salimos de allí y coloca música para no hacer tan silencioso el trayecto, a veces me pregunto si no le molesta que sea así, pero luego de hoy creo que él me acepta tal como soy y eso no tiene precio. Tal vez por eso mi abuelo no le pone reparos a que nos veamos, aunque ahora me tocará decirle que es mi novio.

—¿Qué piensas, muñequita? —me pregunta él cuando nos detiene un semáforo. Le respondo acerca de decirle a mi abuelo y él se ríe—. Si está despierto cuando lleguemos, y estoy seguro de que así será, le diré que te he pedido ser novios. Estoy dispuesto a ser reprendido por un héroe de guerra.

Si él no tiene miedo, pues yo tampoco, así que le sonrío y seguimos el camino hasta mi casa, en donde mi abuelo está esperando en la sala, lo sé porque la luz está encendida.

—¿Dónde estabas? —pregunta mi abuelo indignado, yo frunzo el ceño y le respondo que le avisé dónde estaría con Jake—. ¡Pues no me llegó ningún mensaje! Y usted, joven, mi nieta es una muchacha decente que suele llegar temprano a casa.

—Lo sé, señor, por eso la he traído en cuanto la cena con mi familia terminó.

—No me parece…

—Pues yo creo que va a tener que acostumbrarse —le dice Jake relajado, pero con esa firmeza que sólo él tiene—. Le he pedido a Lily que sea mi novia y ella ha dicho que sí.

Mi abuelo me mira como si tuviera dos cabezas, pero me quedo tranquila, después de todo nunca he hecho nada malo y él sabe que no puede reprocharme nada, porque soy una chica bastante tranquila.

Sin embargo, las palabras que salen de su boca, me dejan helada.

—Lamento decirle que no lo permitiré… no dejaré que el heredero de una familia rica se ría de mi nieta, así que es mejor que se vaya de aquí o nos entenderemos en otros términos.

—Y yo lamento decirle que no me iré. Amo a su nieta más de lo que usted puede imaginarse, si sólo quisiera jugar con ella, no me habría molestado en aprender el lenguaje de señas y los dos sabemos que eso es lo mínimo que ella se merece, así que… dígame ahora cuáles son esos términos en los que se quiere entender.

Y yo me quedo más helada aun al oírle decir que me ama, pensando en qué pasará con los dos ahora, porque ya veo que se quieren matar a golpes y todo por mi culpa.

Jake Huxley

Mantengo mi mirada fija en el abuelo de Lily, no es algo que no hubiese hecho antes, sostenerle la mirada a alguien con quien estoy negociando, sólo que esta vez no es dinero, sino que de su aprobación depende el amor que siento por Lily.

—No me creo eso que usted me dice…

—Con que ella me crea y me acepte, para mí está bien. Pero si busco que usted lo considere es porque siento un profundo respeto por el abuelo de mi novia, pero no crea que su negativa me espantará o me hará desistir de lo que siento.

El señor Smith me mira y puedo ver cómo las lagrimas se agolpan en sus ojos, sé lo que para él puede parecer, pero nada de lo que me diga hará que me aleje de Lily, y para confirmar mis palabras, la atraigo a mi cuerpo.

—Yo amo a su nieta, con todo mi corazón, estas semanas junto a ella me hicieron ver lo maravillosa que es y lo mucho que el mundo se pierde al no darle una oportunidad.

Ella me mira emocionada, lo sé, lo veo en sus ojos tan transparentes. El señor Smith deja escapar un suspiro de resignación y nos hace pasar.

Tras oír las reglas, condiciones y advertencias, al fin logramos que nos dé su venia para ser novios. Probablemente esto no es muy de esta época, pero sé lo importante que es él para mi chica y no iba a pasar por sobre él.

Los días se nos pasan mejores y rápidos, tanto que uno de los compromisos más impostergables de mi agenda se acerca, por lo que decido invitar a Lily a quedarse conmigo toda la tarde en mi departamento, para ver películas y estar juntos sin que la gente nos moleste.

Lily se acomoda en el sofá con las piernas arriba, su cabeza en mi hombro y comiendo palomitas de un pocillo en medio de los dos. La verdad es que no le presto atención a lo que vemos sino a su belleza, esa que por primera vez es sólo para mí.

De pronto ella se pone de pie para ir por más refrescos y cuando regresa, se tropieza con la punta doblada de la alfombra, derramando la bebida sobre ella y sobre mí. La veo sacarla la blusa rápidamente, divertida y despreocupada de que yo la esté viendo sólo en brasier.

Y ese es el problema.

Su cuerpo es perfecto y por eso, antes de que se vaya a la cocina, tiro de su brazo para hacerla caer en mi regazo. Ella me mira con sus ojos abiertos, su pecho subiendo y bajando por la expectativa, mi boca se acerca a su cuerpo y la siento ahogar un jadeo, un sonido que me gusta por lo que no me detengo.

Un quejido se escapa de ella cuando mis manos suben por su espalda y llegan a su brasier, pero antes de deshacerme de él, dejo su cuello para verla a los ojos.

—Te deseo… —ella pasa saliva y asiente—. ¿Es un sí de «lo sé» o un sí de «no pares»?

Ella me explica que no quiere que pare y eso para mí es carta libre para demostrarle cuánto la amo. Me quito la playera para quedarme piel con piel, le quito el brasier y luego de eso la aprieto contra mi cuerpo, haciendo que se frote con aquella parte de mi cuerpo que se ha despertado.

Con cierta timidez se mueve sobre mí, haciendo que todo se vuelva más difícil, me pongo de pie con ella aferrada a mi cuerpo y me la llevo a la cama, en donde la dejo con mucho cuidado y me quedo prendado de la visión que me regala.

Sus labios rojos e hinchados por nuestro beso apasionado, su pecho subiendo y bajando por la excitación y su cuerpo expresando lo mismo que siento yo…

—¿Estás segura de que quieres que siga? —ella asiente y yo me quito el pantalón. No hay mejor expresión de amor que esta y yo lo quiero todo, quiero que me marque para jamás estar con ora mujer, porque estoy más que seguro de que quiero a Lily Smith como mi esposa.

Lily Smith

Cuando abro los ojos, Jake está sentado al borde de la cama, vestido y con un vaso de agua para mí, me siento con cuidado, me duele todo y es obvio, lo que hicimos fue salvaje e íntimo. Me cubro un poco, pero él baja la sábana para exponer mis senos y sonríe.

—Eres preciosa, no te avergüences de tu cuerpo —deja un beso sobre mi hombro y se pone de pie—. Iré a la farmacia, no usamos protección y creo que lo mejor será que tomar precauciones.

Asiento, porque lo último que me puede pasar es quedarme embarazada.

Sin embargo, cuando estoy caminando al baño para ducharme y vestirme, mi teléfono suena y eso me sorprende, porque quienes me conocen suelen escribirme. Contesto y la voz de una mujer me dice.

—Señorita Smith, sé que no puede responderme, pero debía llamarle para darle una noticia importante, la llamo del Hospital Saint Bartholomew, su abuelo acaba de ingresar por un accidente… necesitamos que venga lo antes posible.

Mi mundo se remece como nunca, dejo caer el teléfono al piso por la noticia y siento que un vacío me invade profundamente… mi abuelo no, por favor.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo