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Al día siguiente, en la oficina de la empresa del CEO Phillips. 

— No puedo salir a verme con otro, ni tener una relación romántica con nadie más durante el mes de contrato. — Comentó Savannah mientras leía una de las cláusulas.  

Alexander quien estaba sentado en su silla trás el escritorio asintió lentamente. 

— Tal como lo estipula. 

— La relación debe mantenerse secreta aún después de finalizado el contrato de amante por treinta días, nadie más puede saber que estuve involucrada contigo… Ja~ no es como si quisiera presumirlo, ¿Era necesaria esta cláusula? — Preguntó ella riendo. 

— Lo es. — Sonrió él altivo.  

— Oh, debo acudir a ti inmediatamente y sin excepción a tus llamados o el contrato queda cancelado y sufriré las consecuencias de ello… ¡Oye! ¿No te estás sobrepasando con esta? ¿Qué pasa si estoy enferma, o cuando comience mi periodo? ¿Piensas que acuda a ti, aún así? 

— No seas ignorante, continúa leyendo, eso queda a mi decisión. 

Savannah vio a su jefe y frunció el ceño. 

"Hay cada mínimo detalle escrito aquí… Es tan meticuloso y controlador" 

Pensó ella.

"Aunque, fue una enorme suma de dinero la que gastó en mi padre y nuestras deudas familiares" 

— Entiendo, seguiré leyendo después, dame una pluma, voy a firmar. 

— ¿En serio no leerás hasta el final? — Preguntó él viéndola seriamente. — Caerá bajo tú responsabilidad cualquier inconveniente que tú decisión actual represente a futuro. — Añadió. 

— Lo sé, sé cómo son los contratos, voy a firmar es demasiado y yo tengo que trabajar; me están llenando de llamadas cada cinco minutos, es la primera vez en un año aquí que debo suplir a Susan; además, hay un evento importante y yo… Cómo sea, solo dame la pluma. — Pidió Savannah levantándose de la silla, apoyando el contrato en el escritorio de ese hombre y extendiendo su mano a él. 

Alexander le entregó su pluma y ella firmó en cada parte requerida. 

— ¡Un momento! — Exclamó ella tras un pensamiento fugaz que tuvo. 

Rápidamente posó sus bellos ojos verdes limón en ese CEO. 

— ¿Sucede algo? — Preguntó él notando que ella se había detenido antes de firmar todo el contrato.

— ¿No tengo que hacer ese tipo de "cosas" en la oficina contigo verdad? Antes dijiste que no mezclas trabajo con asuntos personales. — Preguntó ella avergonzada. 

— Jajaja~ — El CEO Phillips no pudo evitar reírse en ese momento. — ¿En serio preguntas eso? Jaja~ pensé que era algo más importantes, no te preocupes, NO haré nada en mi lugar de trabajo… A no ser… ¿Tienes la fantasía de hacer ese tipo de "cosas" en la oficina con tu jefe? — Preguntó él sonriendo coquetamente a Savannah. 

La hermosa secretaria se ruborizó de inmediato y terminó de firmar el resto del contrato. 

— ¡Tenga! ¡Me voy! Tengo trabajo. — Dijo ella casi huyendo de la oficina. 

Él continúo riéndose un poco más una vez ella se marchó. 

"Ella no es una mujer nada aburrida~ me agrada" 

Pensó animado el CEO Phillips. 

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Esa misma noche, él se encontraba en el bar del club que frecuentaba, mismo, en el que conoció a Savannah. 

Alexander tomaba junto a sus dos mejores amigos. 

— Así que ya tienes a tu nuevo "juguete mensual" pobre chica, me gustaría saber quién es la víctima~ — Reía, Jake Smith, un amigo de Alexander desde la universidad. 

— Se llama Savannah Stewart, es exactamente el tipo de mujer que me gusta~ su cuerpo es perfecto para mí, supongo que al menos me va a entretener un mes. 

— Oh, la chica debe ser alguien candente, ¡Necesito conocerla! Ella será "la señorita enero" Jajaja~ — Exclamó Jake entusiasmado. 

— Ya deja eso de lado, si sigues siendo un mujeriego nunca van a tomarte en serio, no podrás encontrar el amor y ser feliz casado con una buena mujer. — Comentó seriamente, Gavin Scott, el mejor amigo de Alexander. 

— ¡No le hagas caso a Gavin, Alexander! Mírame a mí, me case por amor y mi ex esposa terminó siendo infiel. Tú haz lo que quieras, además Gavin está casado en un matrimonio arreglado, él no es quien para opinar de la felicidad verdadera. — Crítico Jake, llevando su copa de whisky a su boca. 

— De hecho, yo también me casaré en un matrimonio arreglado. — Confesó Alexander mientras veía a sus amigos. 

Ambos hombres guardaron silencio. 

La noticia de Alexander, les cayó de sorpresa.  

— ¿Con quién? — Preguntó él hombre de cabello oscuro y ojos verdes, Gavin Scott. 

— Aún estoy trabajando en conquistar a mi objetivo, pero tengo en la mira a la única hija del CEO Bailey. 

— ¡Entonces no estás apuntado a ella, si no a la compañía de su padre! Jaja~ ¡Que interesado eres Alex! — Rió Jake. — ¿Tendrás una amante mientras conquistas a tu futura prometida? Eso sería bastante osado de tú parte~ 

— Sí, eso haré~ — Admitió Alexander colocando su copa de whisky vacía sobre la mesa. — Sin embargo, pienso hacer una pausa hasta que se dé el matrimonio, así que Savannah será mi última "amante mensual" lo dejaré un tiempo después de ella. 

— Realmente has cambiado mucho, hace seis años no eras así Alex… cuando Katerine aún vivía.  

Jake volvió a ver sorprendido a Gavin. 

¡Estaba prohibida la mención de esa mujer delante de Alexander! 

Seguidamente ambos hombres volvieron a ver a su amigo. 

Alexander Phillips se levantó de inmediato de la silla en la que se encontraba en el interior del bar. 

— Me voy. 

— ¡No! Espera hermano, no lo tomes en serio, Gavin te tiene envidia por qué vives tú vida como quieres y él está atrapado en un horrible matrimonio. — Decía Jake, quien le dedicó un mirada de advertencia a Gavin para después, seguir a Alexander.  

Gavin posó sus ojos verdes oscuros en su copa de whisky la cual sostenía en su mano derecha. 

"Algún día tienes que afrontarlo y… Superarlo" 

"Comenzaste a salir con chicas por un mes para volver a encontrar el amor, pero en un punto parece que enviaste todo eso a la basura y comenzaste a jugar con las mujeres" 

Pensó Gavin para después seguir tomando de su bebida. 

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Esa misma noche, en el apartamento de Savannah Stewart. 

La hermosa mujer rubia llamó preocupada a la primer secretaria del CEO Phillips. 

— Me encargué de todos los preparativos, la segunda semana de enero comienza el evento de empresas en Hawái… ¿Realmente está bien que sea yo la que vaya con el CEO Phillips? — Preguntó nerviosa Savannah. 

— ¡Claro! Si no eres tú, ¿Quién más? — Decía Susan Roberts, del otro lado de la línea telefónica. — Eres la secretaria secundaria, para eso estás, es tu trabajo, sé que lo harás bien, si lo llevas de manera correcta te irán dando más oportunidades en la empresa.

— Entiendo… Haré mi mejor esfuerzo. 

— ¡Oh claro que debes hacerlo! De lo contrario tu puesto podría correr peligro, es un evento muy importantes para la empresa. 

Una vez, dicho eso, Susan se despidió de Savannah y finalizó la llamada. 

La joven rubia se recostó en su sofá largo preocupada con su mirada puesta en el techo. 

"Que incómodo… Seré solo yo con mi jefe… Un hombre que también es… Mi… Amante por un mes" 

"Un mes…treinta días decía el contrato, ¿Por qué tienen que ser treinta?"

"Por la cantidad de dinero que él me dio, pudo pedir más, ¿Pero solo eso? ¿Tiene una obsesión con ese número?" 

— ¡Cierto! ¡El contrato! Aún no lo reviso todo… Bueno… Lo haré después, tengo mucho sueño~ 

Sonrió Savannah desinteresada.