―¡Abuelo! ―gritó Anjali angustiada al ver a su abuelo caer al piso, trató de alcanzarlo para intentar que no se golpeara, más no lo logró, todo sucedió en cuestión de segundos ―¡Ayuda! Por favor. Anand se quedó petrificado mirando a su padre en el piso. La puerta se abrió con un estruendo, y Aisha y su madre entraron corriendo. ―¡Papá! ―gritó Indira asustada. ―Alguien que llame una ambulancia ―Pidió Aisha tratando de encontrar el pulso de su abuelo. Angustiada se dio cuenta de que era muy débil. ―La ambulancia viene en camino ―dijo Gabriel un minuto después. ―Por favor, despejen el área para que Brahma pueda respirar ― dijo sacando de la habitación a todas las personas que habían ingresado al lugar. ―Anand, ve hasta la puerta y dile a seguridad que dejen pasar a los paramédicos y asegúrate de que lleguen aquí. Los demás despejen el paso. Indira, Aisha y Anjali estaban frente a Brahman hablándole. ―Por favor. Abuelo, resiste, la ayuda viene en camino ―dijo Aisha. ―Papá no me dej
Aisha y Gabriel junto a las chicas llegaron al hospital solo para ver a Indira paseando nerviosa por la sala de espera. ―Mamá ―la llamó Aisha ― ¿te han dicho algo? ―Nada aún, se lo llevaron nada más llegar, alguien vino y me trajeron esto ―dijo señalando uno documentos que tenía en la mano. ―Debemos llenarlos, mamá, son datos del abuelo ―dijo Aisha para mantener a su madre ocupada mientras salía alguien a darles información ―ven vamos a sentarnos aquí. ―¿Qué ocurrió después de que me fui? ―preguntó Indira. Aisha le contó lo sucedido. ―Como me negué a casarme con ese hombre, papá, amenazó con casar a Meena con él, por eso me la traje. ―Se pueden quedar a vivir con nosotros, chica, sé que es lo que querría papá ―aseguró Indira. ―Mientras que el abuelo esté enfermo, se quedaran con nosotros, mamá, no quiero que el tío las esté presionando si se quedan en casa del abuelo ―señaló Aisha. ―¿Podré volver a la universidad? ―preguntó Meena que apenas había terminado el primer año de est
―La señora Aisha Lombardi, por favor ―dijo el doctor Baker al entrar en la sala de espera. Sorprendida por la llamada del doctor, Aisha se levantó de la silla, seguida de Gabriel y se acercó al médico de inmediato. ―¿Qué sucede? ¿Dónde está mi madre? ―preguntó Aisha con preocupación. ―Su madre tuvo una subida de tensión arterial, creo que fue emocional, ver a su padre entubado y con tantos aparatos conectados a su cuerpo la alteró bastante. Le dimos un calmante y está controlada, se quedará hospitalizada esta noche para tenerla en observación, puede pasar a verla. ―dijo el médico a Aisha con calma. ―Su esposo puede acompañarla si lo desea, señora, ―Le propuso el médico a Aisha mirando a Gabriel a los ojos, queriendo trasmitirle que debía entrar. ―Gracias, doctor, vamos, Gabriel. ―Los demás familiares del señor Khan les sugiero que vayan a descansar, no habrá más visitas por hoy ―dijo el médico en voz alta. ―Anjali, Meena, nos vamos ―ordenó Anand aprovechando que Aisha y Gabriel e
A la mañana siguiente Anand, Kiran, junto a sus esposas e hijos se instalaron en la sala de espera de la unidad de cuidados intensivos. La familia estaba a la espera de noticias y ellos de la oportunidad de ver con sus propios ojos el estado de Brahma. Ninguno le prestó atención a la pareja que estaba sentada en un rincón, eran los encargados de velar por Brahman y de escuchar las conversaciones de los hermanos. Anand y Kiran estaban parados cerca de la puerta esperando la salida de una de las enfermeras para pedirle que los dejaran entrar. Cuando una de ellas salió enseguida se le acercaron. ―Enfermera, somos los hijos del señor Kahn, queríamos saber cómo pasó la noche nuestro padre ―. Pregunto Kiran ―El señor Kahn está estable, no puedo decirles nada más, deberán hablar con el doctor Baker, él podrá responderles mejor. ―Enfermera, ¿no permitiría ver a nuestro padre? ¿Aunque sea solo unos minutos? ―pidió Anand ―Lo lamento, señor, el señor Khan tiene las visitas restringidas por o
Anand tomó su móvil y llamó por enésima vez a Anjali y Meena, de nuevo su llamada fue desviada hacia la contestadora, estaba furioso porque sus hijas no habían acudido al hospital y necesitaba verlas para poder presionarlas, más aún si estaban solas, sin los metiches de Gabriel y Aisha. ―¿Aún no contestan? ―preguntó Kiran. ―No, y no sé qué iremos a hacer, vas a tener que ceder y que sea una de las tuyas las que se case con Hari. ―Jasmín está en el último año de carrera y debe terminar antes de casarse y Chandra... apenas va por el primer año y sabes que ella es mi niña, no se la daré a ese hombre. ―Pero yo sí puedo darle a Anjali o Meena... ―Tú te metiste en ese lío por las deudas de juego, yo solo estoy ayudándote a salir de él. ―¡Me hiciste creer que estabas conmigo! ―Y lo estoy, eres mi hermano y te apoyaré siempre, pero no te daré a mis hijas. Molesto se levantó de su asiento y caminó por la sala de espera, además de estar molesto y preocupado por su discusión con Kiran, es
―Muy bien, Kiran, habla ―dijo Indira con dureza.―Estoy dispuesto a colaborar, Indira, y a hacer todo lo que esté a mi alcance para enmendar el entuerto que Anand y yo hemos provocado, pero, por favor, no me envíes a la cárcel, ni desampares a mi familia. Mi mujer y mis hijos no tienen la culpa del padre que tienen ―suplicó su hermano.―¿Estás haciendo un trato, Kiran? ―preguntó Gabriel entrecerrando los ojos.―No, pase lo que pase, arreglaré todo, solo les pido que me ayuden.Indira suspiró con alivio, no aceptaría ningún tipo de chantaje, pero si pudiera mostrar compasión por su hermano.―Tu esposa y tus hijos son mi familia también, Kiran, ellos no pagarán por tus errores ―respondió Indira con altivez, a propósito, no agregó que no lo enviaría a la cárcel, era bueno para él que tuviera un poco de miedo y aprendiera lo que era el sacrificio.―Mamá nunca dejaría desamparado a sus sobrinos, tío Kiran, menos aún a mi tía que ha sido tan buena esposa y madre ―aseguró Aisha.Kiran asinti
―¡Oh! Que duro es esto Adam ―dijo Indira quería arrojarse a sus brazos para buscar un poco de consuelo en los brazos de su nuevo amigo. ―¿Cómo se pide el corazón de un ser querido?―Seré yo el que hable con ellos, me gustaría que tú me acompañaras, pero no creo que sea prudente. Voy a darles amos a darle tiempo que se calmen un poco y procesen su pérdida, en un rato ellos deben pedir hablar conmigo para los detalles.―Sí, entonces voy a sentarme a esperar ―dijo Indira señalando hacia donde Aisha y Gabriel estaban sentados. Al llegar Indira les comentó lo que el doctor debía hacer.―¿Y si se niegan a desconectarlo? ―preguntó Aisha.―No lo sé, espero que no se nieguen porque Adam dice que su cerebro está muerto ―afirmó Indira.Unos minutos más tarde, Jaydev se acercó al doctor para hablar con él.―Doctor Baker. ¿Cuándo van a de conectarlo? Nos gustaría despedirnos de él.―Sí, lo entiendo, antes de hacerlo me gustaría hablar con tu madre y todos tus hermanos de algo muy importante.―¿pod
Indira y Aisha entraron a la unidad de cuidados intensivos para ver a Brahma antes de que se lo llevaran para la operación.―Todo saldrá bien, papá, sé que cuando te despiertes estarás triste un tiempo, pero quiero pensar que Anand te está dando su corazón en un gesto de amor. Te quiero y espero poder llevarte a casa pronto ―dijo Indira dándole un beso en la frente a su padre.―Abuelo, recupérate pronto, te extraño mucho ―dijo Aisha acariciando su brazo.Al salir, Indira vio con tristeza como su cuñada y sobrino salieron llorando de la sala donde tenían a Anand. Pronto moriría y sacarían su corazón para su padre después comenzarían a extraer el resto de los órganos.―Pareciera que estuviera dormido, pero la herida en la cabeza es muy grande, al verlo supe que no despertaría ―explicó su cuñada.―Imagino lo difícil que es para ti ―señaló Indira.―Me marcharé, aunque quiero a mi suegro, no creo poder quedarme para esperar las noticias del trasplante ―dijo ella avergonzada.―Te entiende,