No lo llame al día siguiente, ya que la resaca me tuvo todo el día tirada en la cama sin poder levantarme. Lo bueno de todo esto fue que el dolor de cabeza, me impedía pensar en el bochorno de la noche anterior.
Como un torbellino entro Natalia a mi cuarto y levanto las persianas, entrando el sol en mi habitación, me puse la almohada en la cara para que el sol dejara de hacerme daño. Sin un apéndice de piedad tomo mis sabanas y acolchados y me destapo dejando que la mañana primaveral se metiera bajo la piel.
- ¡¡¡ NATALIA !!!
- ¡ Arriba mi heroína !
- Déjame dormir un rato mas, se me parte la cabeza
- Toma - me dio un vaso con un liquido verde, yo la mire preguntándole con la mirada que carajo era eso - es un remedio casero contra la resaca, así llamas a Gonza.
- ¿Gonza? Cuanta confianza con alguien que no conoces ...
- Me cayo bien, solo eso ... tomate el vaso entero y date una ducha, cuando salgas vas a ver que estas impecable.
Sin mas se fue de mi cuarto. Mire el vaso con el licuado verde y ni si quiera quise imaginar que era lo que contenía. Con una mano me tape la nariz y con la otra me lleve el vaso a mis labios y tome todo sin respirar. ¡WAKALA! Era la cosa mas horripilante que jamas había probado. Me pare como un resorte de la cama y corrí al baño a vomitar. Podía escuchar a Natalia reírse por lo bajo y decir para si misma que el vaso verde nunca fallaba.
Una vez que ya no quedaba nada en mi estomago, abrí la ducha y deje que la bañera se llenara. Me merecía un baño de burbujas para darme ánimos a mi misma por la locura que había hecho ayer. Si bien quería no recordar nada, tenia toda la noche a la perfección en grabada en mis retinas. Deje que el agua caliente con las sales de mar hicieran su efecto y relajaran todos mis músculos. Cerre los ojos y disfrute.
Obviamente con Nat en el apartamento mi momento de relax, duro menos de lo que hubiese querido. En menos de 10 minutos la tenia sentada como india en la tapa de water.
- Tu celular estuvo toda la mañana sonando, lo saque de tu cuarto para que no te molestara
- ¿Mi padre o mi madre ?
- Los dos
- M****a, ya me veo lo que me van a decir. Lo mismo de siempre, que no soy suficiente , adornado de palabras cordiales. No quiero hablar con ellos Nat, por lo menos hasta tener un nuevo PLAN.
- Me parece perfecto
- ¿Alguien mas llamo?
- Si... tenes 3 llamadas perdidas de Charles
- ¡¿Que mas quiere de mi este hombre?! Ya me destruyo, me quito todo lo que tenia, hasta mi familia.
- No bella terminando contigo te devolvió algo aun mas importante de todo lo que te quito...
- ¿Que?
- A ti misma, se merece un gracias.
- Jamas
Natalia se fue del baño y me dejo vestirme en paz. Se muy en el fondo que ella tiene razón, si me hubiese casado con Charles, nunca hubiese conocido lo fuerte que puedo llegar a ser vestida en rojo. Lo aventurera y osada que soy. Al romper nuestro compromiso, el me libero de mi familia. Realmente me dio mucho mas de lo que me quito.
El timbre del apartamento sonó. Yo me apure a terminar de vestirme y me asome a la puerta del baño para ver quien era. Natalia estaba hablando por el intercomunicador, con la persona que había tocado en nuestra casa:
- Te vas ya mismo, no sos bienvenido en esta casa - escuche que decía ella y luego agrego - no te quiere ver, asi que besito chau.
Con esta ultima frase corto la comunicación, a lo que en menos de 5 segundos había alguien prendido en el timbre de nuestro apartamento. Salí del baño con una toalla en mi cabeza y le pregunte:
- ¿Es Charles ?
- Si, ya lo eche
- Evidentemente no entendió la indirecta
- Te aseguro que fui muy directa, ¿Que queres hacer?
- Lo voy a atender - dije yo acercándome al intercomunicador y le dije - subí Charles.
Le pedí con la mirada a Natalia que se fuera a su cuarto y me diera privacidad, ella sin decir una palabra acepto mi petición. Pero antes de irse la soreta, puso en nuestro audio la canción de Emilia - No Mas, yo le sonreí, mientras negaba con la cabeza. Tocaron tres veces en la puerta, tome un respiro y fui a abrirle.
Lo mire en el marco de mi puerta, entendía como podía haber estado tan embelesada con el durante 7 años de mi vida. Era realmente lindo, de esos chicos que ves caminado por la calle y lanzas un suspiro al aire, era la persona con la que quisieras casarte y tener hijos. Por lo menos todo eso era cuando no conocías como era realmente. Me corrí de la puerta para dejarlo entrar a mi nuevo apartamento vintage.
- Me gusta el lugar ... - dijo el mientras caminaba por el pequeño pasillo que funcionaba de hall de entrada, cerré la puerta con llave y le indique con la mirada que me siguiera.
- Si, se siente perfecto - le respondí yo y agregue - ¿Te puedo ofrecer algo? ¿Agua, te, café?
- Un vaso de agua seria perfecto
Abrí las puertas de vidrio que dejaban salir al balcón, donde teníamos un juego de sillones de mimbre con almohadones blancos y una mesa ratona, ya que era un lindo día, creí que era el lugar ideal para tener esta conversación. El se sentó en uno de los sillones y se puso a leer su celular, mientras yo iba a buscar un vaso de agua para cada uno.
- Aquí tienes - puse un porta vasos enfrente suyo y apoye su agua en el e hice lo mismo con mi agua.
- Gracias - dijo el y tomo un sobro de su vaso. Me senté en el sillón mas alejado a el y lo mire. Supongo que me veía ridícula con mi piyama y la toalla en la cabeza, así que disimuladamente me solté el pelo y apoye la toalla en la baranda del balcón - me gusta tu corte nuevo, y las puntas azules, estas diferente.
- A mi también, hagamos corto esto Charles , ¿Que queres?
- Quería verte, me sentí muy mal despues de lo que paso ayer
- ¿Sabe mi prima que estas acá ?
- No lo sabe
- Entonces creo que es mejor que te vayas, no quiero mas problemas de los que ya de por si tengo.
- No se tiene porque enterar, solo quería pedirte perdón en mi nombre y en el suyo .
- No necesito ninguna tipo de disculpas de tu parte, te pido que por favor te vayas
- Marie Anne, estoy aqui de buena fe, tenes que entender que lo nuestro termino, superarlo, lo que hiciste ayer fue algo muy fuera de lugar
- ¿ Como pasaste de pedirme perdón a darme un sermón ?, algo que solo Charles Monserneur puede hacer
- Tenes que crecer Marie Anne, no todo es una de esas películas románticas que ves, no sos la protagonista de nada...
- Tenes razón, no soy la protagonista... de nada que tenga que ver contigo, te pido por favor que te vayas, quédate tranquilo, no te voy a perseguir , ni ahora, ni nunca.
- Sos una inmadura
- Si a mucha honra.
El se levanto ofendido y se fue de mi casa dando un portazo. Enseguida estaba la chusma de Natalia queriendo saber todos los detalles de nuestra conversación. Pedimos un helado y decidimos pasar lo que quedaba de la noche, charlando y viendo las peores películas románticas de la historia.
Cuando fui a recibir el helado, no pude evitar preguntarme que seria de la vida de mi chico de los helados. ¿ Ahora que conocía a Gonzalo, lo volvería a ver?
Estaba parada en la puerta de la oficina principal de Travellers, era una casona antigua con grandes ventanales, que iban desde el techo hasta el piso. Parte de las ventanas estaban ploteadas con diferentes productos que ellos ofrecían.Tenía terror de dar el paso y entrar, siempre supe que mi lugar estaba en la agencia de mi familia, desde chica en vez de jugar a ser maestra o doctora, yo jugaba a que vendía pasajes aéreos a Tailandia, a los 7 años ya sabía cuáles eran las principales ciudades turísticas del mundo y que tenían para ofrecer. Amaba ver mapas e investigar cada país que me parecía que podría tener una historia interesante que descubrir. Mi abuelo me contaba grandes historias sobre cómo se viajaba antes, como su abuelo había sido un aventurero en su época y había recorrido el amazonas en una balsa de madera con un indígena local como guía. Era extraño estar por intentar entra
Tome un respiro dándome fuerza para encontrarme cara a cara con mi futuro jefe. ¿Sabría el que era su nueva asistente?, por las dudas preferí hacerme la boba y cuando me lo encontrara dentro de unas horas en la oficina, actuaria como si estuviera sorprendida. Seria una pequeña mentira piadosa. Porque si lo analizamos fríamente yo no sabia que iba a ser mi jefe hasta ayer a la noche, cuando vi i ese articulo con su foto. Listo, voy a hacer de cuenta que eso nunca paso. ¡Pronto! estaba borrado de mi cabeza.Verlo a él nuevamente solo con sus boxers, hizo que tuviera unas ganas casi incontrolables a tirarme nuevamente en sus brazos, porque no hay que mentir el "heredero de oro", como lo llaman en la prensa amarilla, estaba tallado a mano, era la persona perfecta para una noche de sexo sin compromiso.
El gato se había comido mi lengua, la impresión de verlo allí me había dejado sin habla y eso que yo ya estaba mentalmente preparada para verlo. Antes de abrir mi boca, estudie su expresión, no había ninguna duda que no estaba feliz de verme sentada frente a él. ¿Qué le diría? Al fin de cuentas era mi jefe, tenía que comportarme como era debido, es más toda mi vida había sido educada para ser una buena chica sumisa, pero estar frente a él, me daba una fuerza interior que no sabía que tenía, me convertía en una chica rebelde y sin pelos en la lengua. Pero en ese preciso momento eso no me seria de mucha ayuda. Al parecer estuve demasiado tiempo en silencio porque el tomo la palabra nuevamente.-¿Esto es una broma de mal gusto?- pregunto él sin un apéndice de gracia en su voz, no me quedaba ninguna duda, estaba que ardía de furia.
Verlos allí a los dos, juntos, era una imagen demasiado bella para ser real. Los dos a su forma tienen una belleza hipnótica, pero verlos una al lado del otro aumenta de una forma exponencial en encanto de cada uno.Tienen estilos muy diferentes, Gonzalo se nota mucho más relajado, accesible mientras que Matthew Nicolás (no se aun como llamarlo, imagino que será Matthew), tiene un aura más inaccesible como si todo el tiempo estuviera esperando meterse en una discusión, pero a la vez sé que puede tener un gran humor, solo que esta última semana ha perdido su sentido del humor y era un ogro.Me soltó suavemente de su agarre, mi cuerpo me traiciono porque reacciono a el. Sentí como cada bello de mi piel se erizaba. Espero que el no se haya dado cuenta. Nos miramos por un momento a los ojos y el me regalo su sonrisa arrogante y tomen nota: no es para nada una sonrisa simpática.Yo me acomode como pude la ropa, me fije que mi falda estuviera donde tenía que estar. No qu
Llegue a mi apartamento hecha una ola de rabia e ira. Busque por toda la casa a Natalia para contarle lo que me había exigido el imbécil de Mat, pero no había ni un solo rastro de ella. Puse a cargar mi celular, que se había quedado sin batería. Cuando por fin se prendió vi que me había enviado un mensaje que decía que no volvía a casa. Cuando llegara íbamos a tener que tener una charla sobre qué fue lo que le paso en la noche.Estaba enojada porque me iba a ir a Ibiza. ¡Estoy loca!, pero en realidad me molesto la forma en que me lo pidió, que digo pido, como me lo demandó. Y tuvo el descaro en amenazarme con quedarme sin trabajo. Era un déspota, lo detestaba. Si él me hubiese dicho Marie Ann el martes deberíamos irnos a Ibiza, ¿Podrías acompañarme?, yo hubiese gritado de la felicidad y colgado en su cuello, pero él prefirió tratarme como su sirvienta nuevamente. ¿Quién se cree?
Volví a mi asiento con mi cabeza gacha, me daba vergüenza, sobre todo tener que sentarme nuevamente junto a él. ¿Qué nos pasa? O mejor dicho ¿Que me pasa? Lo detesto, de eso no tengo ninguna duda, pero a la vez necesito estar con él, pero no es a un nivel sentimental, nada más alejado a la realidad, lo necesito físicamente. Me sorprende que mi cuerpo reaccione asi a su alrededor. Lo único que me tranquiliza es que mi cabeza aun lo tiene todo bajo control ¿No?Me puse mis auriculares y unos lentes de sol, pasamos las pocas horas que no faltaban para llegar a Madrid en completo silencio. No se giró a verme ni una sola vez. Se mantenía como si fuera una estatua. ¿Qué estaría pensando? Seguramente se estaba mentalmente auto flagelando por haber infligido su ética laboral. Idiota.Llegamos Madrid. Teníamos aproximadamente 3 horas de escala ant
Mire en el espejo enorme del baño mi look por última vez antes de bajar a desayunar. Había escogido un short de tiro alto de color beige algo suelto, tenía un especie de cinturón que se ajustaba en mi cintura como un lazo. Elegí una musculosa blanca básica que metí por debajo de ellos. Me puse un blazer marrón largo que llegaba apenas por arriba de mis rodillas. Me calce las zapallitas blancas más cómodas que tenía, ya que hoy si me tocaba trabajar: todo el día yendo de un hotel a otro. Era de primera necesidad estar cómoda.Me fije en el reloj de la televisión la hora y me alarme porque ya eran las 08 am y a las 08:45, tenía que estar en la recepción pronta para comenzar mi recorrido. Iba a visitar alrededor de 10 hoteles ¡Una locura!, tome mi cámara para grabar y sacar unas buenas fotos, una pequeña libretita para anotar datos importantes de cada uno.
En menos de una hora tenía que estar en el salón principal, ya que que teníamos nuevamente una cena con algunos socios de la empresa. La imagen que se reflejaba en mi espejo era espeluznante. Mi pelo estaba ingobernable, parecía la melena de un león, luego tenía los ojos rojos y el maquillaje corrido, dejando líneas negras por todo mi rostro, también en la mitad de mi cara tenía la almohada marcada en mi cara. Me dije a mi misma:-Vamos Maire Ann, que hay trabajo que hacerFui hasta el inmenso baño y aunque moría por un baño de burbujas, no era lo ideal, ya que el tiempo no estaba de mi lado, por lo que fui a la ducha, prometiéndome que cuando volviera de la cena me daría un baño de inmersión ¡ERA LO MINIM