「 ✦ DEJAR LAS COSAS EN CLARO✦ 」 ―¿Y bien? ¿Qué tiene mi esposa? Santino no soltaba la mano de Sophia. Ella Aún estaba en un profundo sueño y ya habían pasado casi dos horas. El médico le había extraído sangre a Sophia y para luego ser llevada al laboratorio por uno de los hombres de Alexei. ―No tiene nada de qué preocuparse ―dijo el Dr. con una pequeña sonrisa, dejando su teléfono a un lado. ―Su mujer se recuperará. Es joven, sana y fuerte. Creo que quizás ha estado sometida a mucho estrés últimamente. Eso, combinado con el estrés del embarazo… ―¿El estrés de qué? ―los ojos de Santino se abrieron como platos. ―Podría haber exacerbado su ansiedad ―continuo el médico ―Pero no tiene nada que temer, el bebé está perfectamente sano también. ―¿De qué coño está hablando? ―preguntó mirando fijamente al médico, tratando de asimilar lo que acababa de decir. ―Usted dijo… ―Santino sacudió la cabeza, intentando convencerse de que le había escuchado mal. ―¿Acaba de decir… bebé? ―Sí, los sínto
「 ✦LA INTERVENCIÓN DE ALEXEI✦ 」La tensión entre Artem y Santino se convirtió en un aire gélido que podría congelar la sangre.―¿Y qué? ¿Vas a seguir pretendiendo que todo está bien entre tú y Sophia? Ella nunca olvidará que mataste a su padre ―Artem lanzó las palabras como si fueran cuchillos, sabiendo exactamente dónde golpear para herir más.Santino, cuya ira se encendía con cada palabra, respondió con una voz que destilaba veneno.―Lo que haya entre Sophia y yo no es de tu m*****a incumbencia. Ella me ha aceptado, a diferencia de ti, que no puedes aceptar la realidad. Así que cuida tus palabras, Artem. Estás jugando con fuego.―¿Fuego? ―Artem se rio, un sonido frío y sin alegría. ―El único fuego aquí es el que arde en tu interior, un fuego de celos y posesión. Sophia merece algo mejor que un hombre que solo sabe mentir y manipular.Esa fue la chispa que encendió la pólvora. Santino, con los ojos ardiendo de furia, perdió todo atisbo de control.―¿Algo mejor? ¿Como tú? No me hagas r
「 ✦¿HASTA DÓNDE LLEGA TU LEALTAD? ✦ 」En la habitación, Sophia atendía las heridas de Santino; sin embargo, estaba molesta por el altercado que había tenido con Artem. Mientras limpiaba con cuidado, Santino no pudo evitar reírse y comentar.―Deberías haber visto cómo Artem se tambaleaba después de mis golpes. Parecía que estaba bailando.Sophia apretó los labios, visiblemente frustrada, y presionó con demasiada fuerza una herida, sacándole un “¡Auch!”, a su marido.―Esto no es un juego, Santino. ¿Qué necesidad había de llegar a los golpes? ¿No podías haber hablado como dos personas civilizadas?Santino, tratando de aligerar el momento, acarició las caderas de Sophia y luego deslizó sus manos hasta su vientre, acariciándolo suavemente.―Escucha, pequeño, tu mamá es la gruñona más hermosa del mundo. Pero no te preocupes, juntos aprenderemos a manejarla.Esto logró arrancarle una carcajada a Sophia, y luego ella terminó de limpiar sus heridas.―Por favor, no causes más problemas mientra
「 ✦CITA PRENATAL✦ 」Dos días después, Santino se encontraba en el estudio de Alexei, el aire entre ellos era frío y distante, marcado por una tregua más que por una verdadera alianza.―¿Alguna novedad sobre Rocco? ―la pregunta de Alexei salió cortante, sus pequeñas reservas sobre confiar en Santino aún latentes.Santino, con su postura relajada que contrastaba con la tensión del momento, miró a Alexei antes de responder.―Rocco ha estado moviéndose y…― Pero ¿qué esperabas? ―interrumpió Alexei con una mueca ―El hombre es una serpiente.La incomodidad de Santino era palpable, pero la desesperación lo empujó a hablar.―André me ha dicho algo… Rocco se ha hecho con el control total de mi organización. Está corrompiendo a mis hombres, robando mis territorios. Me ha apuñalado por la espalda. ―su voz, aunque contenida, destilaba una mezcla de ira y traición.Alexei arqueó una ceja y sonrió.―Interesante. Rocco piensa que puede desestabilizarnos. Pero ahora que estamos en la misma página, ha
「 ✦A TU ALREDEDOR✦ 」 Sophia y Tatiana llegaron al hospital, donde fueron recibidas por las enfermeras con una eficiencia que tranquilizó a Sophia. ―Serán atendidas por el médico, de inmediato ―les informó con una sonrisa. Sophia correspondió el gesto y se sentó junto a Tatiana, ambas envueltas en una burbuja de anticipación y nerviosismo. Mientras tanto, a una distancia considerable, un hombre las observaba atentamente, su mirada era fija, evaluando cada movimiento. Sacó un teléfono móvil y marcó un número rápidamente. ―La tengo en la mira ―dijo el hombre con voz baja y controlada. ―Pero no está sola, está acompañada por otra mujer. Del otro lado de la línea, una voz curiosa preguntó. ―¿Quién es ella? Envía una fotografía. El hombre tomó una fotografía discreta y la envió. Hubo un breve silencio antes de que se escuchara una carcajada desde el otro lado. ―Vaya, vaya, parece que es nuestro día de suerte ―bromeó la voz, reconociendo a Tatiana en la foto. ―Esa es la esposa de Alex
「 ✦ESCAPE✦ 」En el tenso silencio del consultorio, con el caos resonando más allá de sus paredes, Santino fijó su mirada penetrante en el médico, cuyo nerviosismo se había vuelto palpable. La atmósfera cargada de tensión apenas disimulaba la sospecha que crecía en el aire.―Sabes algo que no estás diciendo ―la voz de Santino era baja y peligrosa.El médico, tragando saliva, evitó la mirada de Santino. La presión del momento era abrumadora, y finalmente, las palabras comenzaron a fluir, entrecortadas por el miedo.―No… no fue mi intención. Pero ellos… ¡Ellos me obligaron, me dijeron que si no cooperaba…!Santino avanzó un paso, su presencia imponente fue más que suficiente para hacer que el médico se detuviera.―Eres una asquerosa rata ―dijo, su voz fría como el hielo ―Y eso no tiene perdón.Santino se volvió hacia ellas, su expresión suavizándose apenas un segundo antes de volver a endurecerse, preparado para actuar.―No se preocupen, estarán seguras ―aseguró ―Nadie les hará daño mien
「 ✦ESCAPE (II)✦ 」La brisa acariciaba sus rostros mientras Santino y Sophia lograban salir del hospital, el caos quedando atrás, pero una sensación de incompletitud pesaba en el aire. Sophia, con el corazón latiendo aceleradamente, giró su cabeza buscando una figura familiar que no estaba a su lado.―¿Dónde está Tatiana? ―pregunto con la voz cargada de pánico y confusión.Santino, cuya mente había estado enfocada en llevar a Sophia a un lugar seguro, se detuvo en seco, escaneando el área. La ausencia de Tatiana se hizo evidente y la realidad de su futuro fue cruda.―Debe haber sido atrapada por los hombres de Rocco ―murmuró, su mandíbula, tensándose ante la idea.Sophia, impulsada por el miedo y la lealtad, se giró hacia su esposa.―¡No podemos dejarla! Tenemos que regresar.Pero Santino, negó con la cabeza firmemente.―No podemos hacerlo, Sophia. Mi deber es mantenerte a ti a salvo.Las palabras de Santino golpearon a Sophia como un puñetazo en el estómago.―Pero si Rocco la tiene, s
「 ✦ESCAPE (III)✦ 」 Tatiana corrió sin parar, sus pies golpeando el pavimento con una urgencia que resonaba con cada latido de su corazón. Los autos y los edificios parecían cerrarse a su alrededor, pero no podía detenerse, no ahora que había tomado la decisión más importante de su vida: escapar de Alexei. La indiferencia y el desdén con los que Alexei la había tratado eran como cadenas invisibles que la habían mantenido prisionera. Pero en ese momento, con el hospital desapareciendo detrás de ella, Tatiana se sintió más libre de lo que había estado en años. No podía, no quería seguir viviendo bajo el yugo de Alexei, soportando su indiferencia y su control. Tenía que alejarse, no solo de él, sino también de su familia, de su padre, de todos los que habían contribuido a su sufrimiento. Con el corazón palpitando en su pecho y el miedo nublando su mente, detuvo un taxi. ―Por favor, llévame al aeropuerto ―suplicó, su voz temblorosa pero decidida. El conductor, sorprendido por la urgenc