84. Nuevo Orden

Mientras tanto, en una de las celdas más oscuras y alejadas, Román estaba recostado en su cama, disfrutando de la perturbación que había causado. La luz que entraba por la pequeña ventana de la celda apenas iluminaba su rostro, pero la sonrisa que se dibujaba en sus labios era inconfundible. Sabía que todo estaba marchando según sus planes, y la sensación de control absoluto lo llenaba de satisfacción.

Los otros reclusos lo miraban con respeto y temor. Para ellos, Román no era simplemente un hombre; era una leyenda viviente, un ser casi mitológico cuyo poder trascendía las rejas y muros del reclusorio. Había ganado su apodo, "El demonio", no solo por sus actos de crueldad, sino por la frialdad con la que ejecutaba sus planes, sin un atisbo de duda o remordimiento.

Los rumores de su despiadada naturaleza corrían como un río entre los pasillos del reclusorio. Cuentos sobre cómo había torturado a aquellos que se atrevían a cruzarse en su camino, cómo había manipulado y destruido vidas si
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo