13

—Estoy… estoy estudiando para el examen—, le miré por un segundo y luego bajé la mirada al cuaderno. —Pero aún falta para los exámenes—, dijo al quitarme el cuaderno de las manos. Apreté los labios y le miré. Sentía mi rostro quemar, podía jurar que estaba sonrojada ante la cercanía y mirada de Adiel. El sonrió y preguntó —¿Qué tienes? Estás roja, pareces un tomate. Joder, tuve que dirigir la mirada a otra parte porque no podía seguir mirándole. —Nada, es del sol—, me excusé porque había pasado casi diez minutos bajo el sol. Por supuesto Adiel no se tragó ese cuento —Puede entregarme mi cuaderno—, dije al mirarlo. Adiel me miró intensamente, fue tan intensa su mirada que el sonido de mi corazón tapó mis oídos, este órgano golpeaba con tanta fuerza mi pecho que incluso me estaba quedando sin aliento, mis manos y pies se helaron, más cuando el lápiz rodó de mis dedos y cayó por mis pies. Adiel se inclinó a recogerlo, pero no desconectó la mirada de mí y su rostro se acercó demasiado al
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo