Capitulo 29. Chantajes.Rosaura despierta notando la cama vacía, lo que la hace pensar que Emmanuel no vino ha dormir, llenándola de pensamientos que la hacen dudar, incluso no recuerda como llego a la cama y es una de esas noches donde su cuerpo se siente muy cansado y decide quedarse en la cama un poco más, antes de enfrentarse a Samantha. Rosaura se levanta después de varios minutos sintiéndose un poco mareada, las nauseas la invaden, llevándola al baño a vomitar lo poco que tiene en el estómago. Varios minutos en el baño y una ducha rápida, la lleva nuevamente a cambiarse y salir de la habitación notando que en casa no hay nadie, la duda en su mente crece y el sonido de su celular la distrae, una llamada de Emmanuel la sorprende, así que no duda en responder. R: ¿Bueno? E: ¿Cómo estás Rosaura? R: Bien, ¿Puedo preguntarte por Samantha? No ha llegado. E: Lo sé, no irá, tendrás que atenderte sola como querías. R: ¿Cambiaste de opinión? E: No, ella irá a limpiar los días que t
Capitulo 30. Rosaura lo abraza, sintiendo que él, en ocasiones puede ser muy duro, pero también tiene un poco de sentimientos como su padre, en ocasiones, los compara, llegando a pensar, que Emmanuel, se a semeja en muchas cosas a su papá, quien eres una persona muy tratable y amorosa, quien difícil, pero con un gran corazón, en ocasiones, Emmanuel le recuerda a su padrino. —Hice de comer tu favorito, todo está listo, te serviré. Rosaura se mueve a la cocina emocionada, cuando de repente, nota una llamada en su celular, si corazón se acelera, es increíble que después de tanto tiempo, la este llamando. Rosaura siente pánico, un pánico que hace mucho no sentía, ni siquiera con Emmanuel, la llamada en su celular la hace palidecer, ella se sienta en la mesa intentando calmarse en la espera de que la llamada cese, pero no pasa, su padre sigue insistiendo, logrando desequilibrarla y distraerla, poniendo más nerviosa a Rosaura, quien mira a los lados esperando que Emmanuel no aparezca, s
Capitulo 31. Inició de una nueva etapa. Al escucharlas, Rosaura, sale muy enojada pasando frente a ellas, sin prestarles atención, sin bajar la cabeza y camina hacia su esposo muy enojada sin detenerse a su encuentro. —¿Qué paso Rosaura? ¿A dónde vas?— Rosaura no le da respuesta, camina saliendo de la tienda sin detenerse.— Rosaura, detente, Rosaura…— Emmanuel la toma del brazo, deteniendo sus pasos y la atrae contra su pecho, enfocándola muy agitado.— ¿Qué demonios te pasa? —No quiero estar aquí, quiero irme a otro lugar. —¿Qué paso Rosaura? —Pregúntale a tus empleadas, ella sabrán responderte. Emmanuel tensa la mandíbula, tomándola de la mano la lleva de vuelta. —No quiero volver.— Intenta soltarse, pero Emmanuel no lo permite, la lleva de vuelta a la tienda, dónde la gerente se aproxima. —Ven aquí…— Ordena en un tono fuerte. —¿Sucede algo señor?— Pregunta La mujer muy nerviosa. —Reúne a todo el personal. —¿A todos señor? —¿Eres sorda? A TODOS. Emmanuel los e
Capitulo 32. Todo a su manera. Rosaura muy feliz, sigue al chico por los pasillos, grabando casa cosa que le enseña en su memoria. —Este es el pasillo de las aulas de clases, por aquí está la biblioteca, y si bajas por estás escaleras, regresaras por el pasillo de la dirección, la salida, al caminar a la derecha, encontraras otra entrada para llegar al jardín norte y por aquí…— El joven abre una gran puerta, dándole paso a Rosaura al increíble jardín de la terrazas donde están todos los estudiantes reunidos.— ¡Bienvenida al jardín del Edén! Rosaura sonríe ligeramente mirando a todos los presentes, chicos jugando con patinetas, bicicletas, juegos como el ajedrez, otros cantan en un rincón, algunas porristas en la cancha, todo lo que se ve en la tv, es real, todo esto se lo ha estado perdiendo. —Está es la clase de arte y diseño, esta es tú parada, de aquí, tienes dos salones más, ven, te llevaré. —Santiago, ¿No llegaré tarde? —No, aún no suena la alarma. De repente la alarm
Capitulo 33. Dudas. Un día muy interesante y diferente, Rosaura no solo ha conocido a Santiago, sino que ahora trata a Flor y a Susana, dos chicas becadas que son muy agradables. — ¿Estás casada Rosaura? — Si. — ¿Y como es tu esposo?— Rosaura se sonroja al hablar de Emmanuel. — Si chica, cuéntanos, ¿Cómo es que te casaste tan joven? Rosaura se pone tímida, intentando no decirles. — Cuéntanos Rosaura, no puedes dejarnos así, eres la más joven de las tres, ¿Cómo es que estás casada?— Pregunta la rubia muy intrigada. — Es complicado, fue un matrimonio arreglado entre nuestras familias.— Responde Rosaura un poco nerviosa. — ¿De verdad? ¿Eso aún se hace?— pregunta la china Susana. — Eso parece, pero deja que nos cuente.— Repite emocionada la rubia de lentes. — Bueno, es que no se, no puedo decirles mucho de él. — Por lo menos como es, ¿Es guapo?— Rosaura se sonroja mordiéndose el labio inferior. — Muy guapo, realmente es un hombre muy atractivo, es a
Capitulo 34. Sensaciones. Alucinante, es estar debajo de ella y verla moverse de manera sensual y excitante, se siente tan bien, que controla sus impulsos. Emmanuel la recorre con sus manos desde su trasero, siguiendo el rastro lentamente de su cuerpo, su hermoso cuerpo que se ha vuelto una adicción para él, cada arte que recorre, su feminidad rosadita, sus senos y esos pezones rosados e hinchados, lo atraen, su cuerpo está cambiando, su rostro también lo hace, la mira sintiendo esa presión en su pecho, algo en él se enciende l tenerla, sentirla, no puede detener, no puede evitar hundirse por completo en ella, solo para poder ver esa expresión débil de su rostro, la manera en la que se muerde los labios, es manera en la que frunce el ceño enfocándolo con su mirada, mientras lo acaricia, deslizando sus delicadas y suaves manos por su cabello, intentando de manera desesperada encontrar sus labios y tomarlo en un beso que él le corresponde. La siente tan suya, no puede evitar acariciar
Capitulo 35. Bajo amanezca. Vanessa, Emilia y Tamara, piensan en la situación, planean bien sus estrategias. Mientras que un plan se cocina bajo fuego, Rosaura es sorprendida por Emmanuel, al ver que Santino llega con una carpeta que contiene sus trabajos. — ¿Qué es esto? ¿Los hiciste tú?— Pregunta Rosaura estando en el auto, frente a la entrada de la universidad. — No, los mandé hacer, con esto estará al día con tus trabajos, un equipo se encargo de que no faltará ningún detalle. Ella le regala una amplia sonrisa de dientes blanco y perfecta dentadura, dejando ver sus hermosos hoyuelos que adornan sus mejillas. — Eres increíble, te quiero, no sabes cuando te quiero.— Rosaura lo abraza muy feliz, es un gesto muy bonito, un detalle que ella no había tenido antes de su parte. Rosaura lo besa, lo besa como si el mundo se fuera a acabar y no volverán a verse, incluso se sube sobre su regazo y el beso se profundiza, en la privacidad de los vidrios subidos del auto. E
Capitulo 36. Alianzas Distante, pensativa, Rosaura esperaba tener calma ante tanta tormenta, su corazón no resiste tanto dolor, se siente inquieta, no desea que Tamara destruya la paz y la tranquilidad que había conseguido, es como si el destino se empeñara en destruir todo lo que poco a poco va construyendo y la hace feliz. Ella mira sus cuadernos, sus libros y sus trabajos, todo está destruido, todo, mira su rostro en el reflejo del espejo, sus manos tiemblan, se siente agobiada y el dolor la invade inconsolablemente. Rosaura intenta calmarse, para enfrentar a su esposo quien ya la espera en la entrada, hoy ha venido a recogerla y desea plenamente no lo haya hecho. Al salir del baño, Rosaura camina hacia la salida, siendo detenida por Santiago, quien muy agitado intenta recobrar el aliento, trayendo consigo una bolsa. —Espera Rosaura, pensé que ya te habías ido.— Rosaura mira hacia el auto de su esposo y vuelve a enfocar a Santiago. —¿Para que me buscabas? —Quiero darte est