Olivia fue llevada hasta la casa de seguridad, instalada en la habitación principal, Santino personalmente iba a encargarse de velar por la recuperación de Olivia. Tenía muchas dudas y estaba convencido de que en su equipo de seguridad había un traidor e iba a encontrarlo tarde o temprano, se vengaría de quien saliera responsable.
—¿Cómo está? —Alessia preguntó apenas entró a la habitación de su hermano. Observó el cuerpo de Olivia sobre la cama, parecía que solo dormía. —Estable por el momento y espero que continúe así, ha sido sedada por Jai, tardará horas en despertar —Santino se sentó en la silla próxima a la cama. —Estaba de camino a casa, cuando el mensaje llegó, estuve a pocos metros, es una suerte que ella pensara en mi —Alessia se paró, cerca de los pies de la cama. —Parece ser su destino mantenernos con vida —susurró, después de la muerte de sus padres, solo se tenían el uno al otro. —Tal parece que si Alessia —Santino, observóSantino abandonó la boca de Olivia por fuerza de voluntad, no porque realmente lo deseara, esa pequeña boca majadera estaba volviéndose una obsesión para él, como una droga por la que estaba dispuesto a convertirse en un adicto.—Estás herida Olivia, es mejor que descanse, ve a dormir, mañana será un nuevo día —Santino echó mano de todo su autocontrol para abandonar su habitación, dormiría en la de invitados; pero la pregunta de Olivia le hizo detenerse.—¿Sabes quién organizó todo esto? —Olivia, sabía que no debía preguntar, pero había sido impulsiva y no tenía más que esperar por una respuesta de Santino.—Ya he tomado venganza por esto Olivia —Santino dejó a Olivia sola en la habitación. Fue entonces que se dio cuenta que había perdido su laptop y
—Arthit, sabes que tengo razón, si quieres ver a tu padre libre, permite que hable con él, necesitar salir del país y nosotros recitamos que lleve un cargamento con él —Olivia espero paciente, sabía que estaba presionando a Arthit.—Estás jugando sucio Olivia, estás utilizando la información en mi contra y en contra de mi padre, no debía confiar en ti —Arthit estaba molesto.—Lo sé, perdóname Arthit, pero Santino necesita mover su mercancía y necesitamos a tu padre para eso, la libertad de tu padre depende de ti —Olivia, se mordió el labio, sabía que estaba jugando con Arthit, emocionalmente estaba llevándolo a un callejón sin salida, donde su única opción era ella. Pero Santino había estado de mal humor durante las últimas horas, las exigencias del cliente en Am&eacut
—Estoy terriblemente celosa —Alessia dijo, mientras desayunaba al lado de Olivia.—¿Soy responsable de tus celos? —Olivia mordió el trozo de melón, mientras observaba a Alessia y esperaba la respuesta de su amiga.—Sí y no, siendo sincera, nunca imaginé que tú y mi hermano terminarían juntos. Santino no te soportaba en absoluto ¿dime que hiciste? Quiero saberlo todo Olivia, quiero saber qué es lo que tengo que hacer para atrapar al chico que me gusta —Olivia casi se atraganta con el pedazo de melón al escuchar a Alessia.—No se supone que tienes una relación a escondidas de tu hermano, razón por la cual la ventana de la mansión estaba cerrada por fuera —Olivia le recordó, la conversación que habían tenido tiempo atrás, antes de que fueran atacados.&
Olivia no podía creer lo que había ocurrido entre Alessia y ella; pero no podía obviar la molestia en su voz. Silvio Rossetti, ese hombre le causaba sentimientos encontrados, odio y sospechas; pero también algo más profundo que no podía identificar la situación debía estar volviéndola loca. Entró a su habitación solo para darse cuenta que la nota continuaba en su lugar y Santino seguía sin aparecer. Se dio una ducha rápida, solo quería dormir y olvidarse de lo sucedido con Alessia, quizás mañana podían intentar hablar; pero lo dudaba Alessia no era el tipo de persona que se arrepentía de sus palabras, pero era su amiga, idiota o no seguía siendo su amiga y la hermana del hombre que ama.Olivia abrió los ojos al escuchar la puerta abrirse, se fijó en la mesita de noche para ver la hora, era cerca de las dos de la mañana
—Maldita sea tengo que sacarla de ahí —Luciano se puso de pie, no sabía con certeza lo que haría; pero una cosa era segura Santino, destrozaría a Olivia sin dudarlo y no podía permitirlo, por nada de este mundo podía permitir que su pequeña hermana pagar lo crímenes que no habían cometido. Luciano subió a su auto, pensando en todas las veces que tuvo que atacar a Santino para defenderse.—Miera, mierda —Luciano golpeo el volante con fuerza, mientras marcaba el número de Silvio. Debía impedir que se viera con Olivia o que siquiera la buscará, debía primero tener un plan para evitar el desastre—Silvio, repite el nombre de la novia de Santino —Luciano aún tenía la esperanza de que todo fuera un error y que su hermana no fuera la mujer del demonio Ferrari.—Olivia —S
Silvio, estacionó el auto a un lado de la carretera, no habían pasado ni diez minutos para que Alessia finalmente explotara en cólera.—¿Puedo saber qué diablos te traes con Olivia? —Alessia destilaba furia por cada poro de su cuerpo, su rostro era la clara evidencia de los celos que corroe su alma. Algo que Silvio no iba a permitir avanzar.—Realmente tienes un problema Alessia, ayude a tu cuñada, porque era evidente que está pasándola mal, si no puedes comprender eso, es mejor que dejemos las cosas hasta aquí, no estoy interesado en mantener una relación con una inmadura como tú — Silvio tenía suficiente enojo en su interior, Olivia siendo su hermana tenía prioridad en su vida, por mucho que Alessia Ferrari le gustase, no iba a permitir que llevará las cosas hasta el punto de poner en peligro a Olivia con su celos infundados.&n
Olivia se sobresaltó al escuchar la puerta abrirse de nuevo, esperaba encontrarse de nuevo con Santino, pero en su lugar estaba Flavio y su mirada llena de odio le dijo que no podía esperar nada bueno de él.—¿Qué haces aquí? —Olivia se incorporó; pero no lo suficiente rápido para evitar que Flavio la tomara del cuello y la lanzara sobre la cama de nuevo. Olivia rodó sobre la cama para alejarse de Flavio, corrió hacia la puerta; pero estaba cerrada de nuevo.—¿Crees que vas a escapar Olivia? —sonrió antes de tomarla del brazo de nuevo—Déjame en paz Flavio, no te atrevas a tocarme —el hombre sonrió antes de darle un puñetazo. El dolor atravesó el rostro de Olivia, podía sentir el sabor metálico de su sangre sobre su lengua, el miedo atravesó su cuerpo cuando Flavio volvió
—¿Qué ha ocurrido Silvio? ¿Por qué Olivia ha llegado en ese estado? —Luciano preguntaba con desesperación a su hermano, mientras el doctor atendía a Olivia, en la habitación que siempre espero por ella.—No lo sé con seguridad Luciano, iba de camino al hospital para visitar a Alessia y ni siquiera vi venir a Olivia, por un momento creí que la había golpeado con el auto; pero Olivia cayó antes que pudiera rozarla —Silvio tenía el corazón encogido de miedo por Olivia. No podía perderla cuando apenas la había encontrado.Luciano Berlusconi, estaba impaciente, como nunca antes lo había estado, desesperación había en su pecho y la ausencia de noticias no hacía; más que empeorar su estado de ánimo, deseaba ir por Santino y matarlo a golpes; pero Olivia era su prioridad.&n