Mi querida niña…
La señora Caterina y el abuelo Alberto, después de cenar, se fueron al estudio a platicar del asunto que les aquejaba.

— Alberto, ya revisé la información que nos hizo llegar tu abogado. Desafortunadamente, no tengo buenas noticias, tu supuesto socio se fue con millones y ha ofendido a una de las familias más prominentes de tu país, por lo que veo complicado el poder hacer algo inmediatamente.

— ¿Qué sugieres? No tengo mucho, podría entregarme y evitar todas estas molestias.

— No, Alberto, no recomiendo que te entregues. Lo que es cierto es que no podemos hacer mucho hasta dar con el verdadero responsable.

— Entonces, ¿qué es lo que me recomiendas hacer?

— Estuve analizando las posibilidades y solo tenemos una, pero no te va a gustar.

— ¿Cuál es?

— Nuestra familia cuenta con algunas propiedades no declaradas; he pensado que tal vez te puedas quedar ahí, por lo menos en lo que logramos localizar a tu socio. Sé que tan pronto se den cuenta de que has salido del país, te buscarán por todo
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo