Ashley
— ¿Te casarías conmigo? — preguntó William sonriendo arrodillado ante mí, sosteniendo una cajita de terciopelo con un anillo hermoso en su interior.— Lo siento William, pero no puedo aceptar. — respondí sintiéndome terrible, él es un gran hombre y no se merece que lo rechace, pero no podía aceptar, mi hermano esta demasiado enfermo en este momento, yo no podía preocuparme por nada más que por él. — sabes que Josh esta enfermo, él me necesita, yo no tengo tiempo para ser una esposa ni organizar una boda, su tratamiento es demasiado costoso, tengo que seguir encargándome de él.Aunque me encantaria poder casarme con William porque lo amo demasiado, yo no podía ser egoísta, mi hermano era mi prioridad en este momento, su tratamiento era demasiado costoso, ya yo tenia muchas deudas debido a esto y si me caso con William mis deudas se convertirían en las suyas, yo no quería hacerle esto.Él tenia un negocio pequeño y no le iba mal, pero ayudarme a cubrir los gastos de mi hermano podrían significarle una gran perdida, no quería empezar nuestro matrimonio poniéndolo en esta situación, le terminaría debiendo mucho dinero, las cosas no funcionarían bien, tendría que cargar con una deuda conyugal, eso podría destruir un matrimonio.— Lo entiendo. — dice sorprendiéndome mientras se vuelve a poner de pie. — Te he estado ocultando algunas cosas, tengo dinero, mi negocio no es pequeño como te lo he dicho este tiempo, puedo cubrir los gastos de Josh, no tendrás que preocuparte más por eso.— ¿De que hablas? — pregunté incrédula.— Ashley yo soy el CEO de la compañía Thomson, si aceptas casarte conmigo, no tienes que preocuparte por el dinero ni el tratamiento de tu hermano. — respondió él un poco ansioso.Sabía cual era esa empresa, era de las más poderosas en el país, pero aunque sabía que este era su apellido, nunca me moleste en averiguar más, porque no pensé que un hombre sencillo como William podría tener algo que ver con esa familia que estaba en la cima.— ¿Me estuviste mintiendo todo este tiempo? — pregunte, molesta y herida, al dame que él no parecía estarme mintiendo ahora, pero que lo hubiese estado haciendo todo este tiempo que teníamos juntos me rompía el corazón.— Discúlpame, es que quería estar seguro de que no te estuvieses acercando a mi por dinero y creo que ahora que ya tenemos un año de relación puedo estar seguro de que eres la mujer correcta, tú tienes un gran corazón y no te importa el dinero a pesar de que luchas día a día con lo de tu hermano. — Explicó William, creyendo que estas palabras de verdad me darían algo de tranquilidad, cuando estaba muy alejado de eso lo que sentía en este momento.— No puedo creer que hicieras algo como esto. — dije furiosa, no entendía como todo este tiempo él había asumido que era una mujer avariciosa, tuvo que pasar un año para que él se diera cuenta de que no lo era y me confesara la verdad, me sentía muy estúpida en este momento, él había acabado con toda la confianza que le tenía en este instante.— Lo siento, se que estuve equivocado, pero ahora podemos casarnos, puedo darte la vida que mereces. — espetó William sin entender muy bien que me había lastimado con esto que hizo.— No me pienso casar contigo, me estuviste mintiendo demasiado tiempo, pensaste que yo podía ir detrás de tu dinero, eso demuestra que no confías en mí. — grité sin poder contener mis lagrimas, él pensaba que las cosas eran simples que podía mentirme y lastimarme y aun así yo aceptaría casarme con él.Eso no pasaría, no lo quería ni ver y salí corriendo del restaurante, pero luego de haber cruzado la calle, lo escuche llamar mi nombre seguido de un estruendo y voltee de inmediato para verlo tirado en el suelo, había sido atropellado por un auto, por lo que me acerque de prisa con mi corazón martillando fuertemente contra mi pecho, yo no quería que a él le pasara nada malo.El conductor se bajo del auto preocupado y empezo a llamar a una ambulancia, mientras yo tomaba la mano de William temblando para tomar su pulso, él tenia los ojos cerrados.— Tienes que estar bien por favor. — le susurre una vez que comprobé que su corazón seguía latiendo y poco después llego la ambulancia en la que lo acompañe, en todo el camino no pude soltar su mano, no dejaba de pedir porque él estuviera bien, me sentía terrible al pensar que se había lastimado persiguiéndome.Mientras William estaba siendo atendido quede en la sala de espera, caminando de un lado a otro cada vez más preocupada y cuando por fin el doctor salió y me dijo que él estaba bien y quería verme me emocione y entre a su habitación de prisa.— ¿Cómo te sientes? — pregunte acercándome a él, afortunadamente no había sido nada grave lo que le sucedió, solo tenía heridas superficiales y se tenia que quedar esta noche en el hospital para ser observado en caso de una contusión.— Estoy bien físicamente, solo me duele el corazón, Ashley yo no quiero perderte, yo te amo, perdóname si me equivoque al no contarte, pero es que estaba cansado de las mujeres que se acercaban a mí solo por dinero, tenía miedo de enamorarme de ti y que solo estuvieras conmigo por eso. — se disculpó William, parecía genuinamente arrepentido, pero esto no podía disipar en mí las dudas que tenía sobre nuestra relación, él me había mentido durante mucho tiempo y no se si pueda volver a confiar en él.— Esta bien. — susurre, él ya estaba lastimado y esto había ocurrido por mi culpa, no quería hacerlo sentir peor.— Gracias mi amor. — dijo William mientras se recomponía y me atraía hacia él para abrazarme. — Ashley cásate conmigo por favor. — pidió él mirándome con ojos cariñosos y asentí, no sabía si de verdad esto era lo correcto, pero me sentía realmente culpable por lo que acababa de pasar, además a pesar de sus mentiras lo sigo amando.— Gracias por aceptarme, no te volveré a mentir mi amor. — me aseguro William antes de dejar un pequeño beso sobre mis labios. — mañana vamos a hacer una cena familiar para contárselo a mi familia y presentarte con ellos.— ¿Tan pronto? — pregunte sorprendida y un poco renuente, esto estaba pasando demasiado rápido.— Si mi amor, me muero por anunciarles a todos que me voy a casar con la mujer más hermosa del mundo. — respondió él emocionado y no fui capaz de negarme.…Había llegado la hora de conocer a la familia de William, ya habíamos llegado a la enorme mansión de ellos y caminamos juntos hacía la entrada, me sentía muy nerviosa y esperaba poderles agradar a todos.— Buenas noches. — saludó William cuando entramos, todos estaban sentados en el sofá y de inmediato se levantaron a saludarnos.William me presento a cada uno de los miembros de su familia y ellos fueron amables, aunque podía sentir que ellos no estaban contentos con mi presencia en esta cena.Cuando ya todos estábamos en el comedor listos para comenzar a comer, William se levanto de su asiento.— Me alegro que estemos todos reunidos aquí, porque quiero anunciarles que me voy a casar con esta preciosa mujer a mi lado. —dijo él con una enorme sonrisa, tomando mi mano para que me levantara y así lo hice. — Pensamos casarnos en unos días en una ceremonia pequeña.Las caras de prácticamente todos los presentes eran malas y mi incomodidad crecía, tenía muchas ganas de decirle a William que no deberíamos hacer esto, pero antes de que yo pudiera hablar alguien más lo hizo.— Si que mi cuñada esta apurada en amarrarte a ella, debe necesitar dinero en este momento, hermano deberías de tener cuidado. — dijo su hermano Clay en un tono burlón y yo lo mire sin poderlo creer.— En eso tienes razón Clay, ella debe estar desesperada por pagar todas sus deudas y William es su salida. — lo secundo su otro hermano Drake y mis ojos comenzaron a cristalizarse, no podía creer que ellos se atrevieran a decir algo así.William me había contado muy pocas cosas sobre su familia, pero al parecer si les había hablado de mí a ellos y en este momento lo estaban utilizando en mi contra para lastimarme.— Hagan silencio, si escucho una palabra más sobre mi futura esposa perderán su trabajo en la empresa. — Amenazó William con voz autoritaria. — Ahora discúlpense con ella.— Lo sentimos. —dijeron Drake y Clay al mismo tiempo a regañadientes y yo asentí, no quería hacer la cena más incomoda.— Bueno mejor olvidemos este momento poco agradable y continuemos con la cena. — dijo la mamá de William con voz conciliadora mientras sonreía.Volvimos a tomar asiento y William se llevo mi mano a su boca para dejar un pequeño beso en el dorso, para darme fuerzas de continuar con esto supongo.— Ashley, se que no tienes a tus padres, me gustaría ir mañana contigo a ver vestidos, yo me ocupare de todos los gastos de la boda. — se ofreció ella, dejándome muy sorprendida, era lindo que ella quisiera hacer esto por mí.— Muchas gracias señora Elizabeth, pero no creo que sea necesario, la boda será muy sencilla.— Tonterías, te comprare un hermoso vestido igual, así que mañana iremos de compras. — aseguró ella sin aceptar ninguna objeción en su tono.Poco después la cena terminó y William me dejo en mi apartamento, él hoy tenía que trabajar horas extras para terminar un nuevo producto que estaba por salir al mercado, así que luego de él se fue yo me quede dormida de inmediato.A la mañana siguiente me desperté y arregle rápidamente porque sabía que Elizabeth me mandaría a buscar con el chofer en poco tiempo y así fue.— Ashley deberías probarte este vestido. — me dijo Elizabeth cuando ya estábamos en una de las tiendas, señalando un hermoso vestido.— Esta bien. — acepte con una pequeña sonrisa.Al estar en el probador luego de ponerme el vestido, me quede viéndome por unos segundos frente al espejo, pensando en que me encantaría que mi hermano pudiera estar mi boda, que él me entregara y en ese momento se abrió la puerta y Elizabeth entro.— Te ves muy linda, pero quiero hacerte una propuesta. — dijo Elizabeth y yo la mire desconcertada, esperando que continuara. — tengo el donante de medula ósea para tu hermano, pero tienes que cancelar la boda y alejarte de mi hijo para siempre.Al escuchar sus palabras no podía creer esto, me quede petrificada, nunca espere que ella me dijera algo así, no lo entendía ¿Qué le había hecho yo a ella? ¿Por qué me estaba exigiendo algo así?— Señora Elizabeth, ¿por que me pide esto? — pregunte sintiendo como mi corazón se rompía y mis ojos comenzaban a cristalizarse.— Porque no quiero a una cazafortunas cerca de mi hijo.— No lo soy, no me importa el dinero de su hijo, yo acepte casarme con él porque lo amo. — asegure, queriendo decirle que ni siquiera sabía que él tenia tanto dinero hasta ayer.— No te creo, piensa mi propuesta, ya me voy. — después de decir esto salió del probador, dejándome atrás, sintiéndome entre la espada y la pared.Ni siquiera había podido ir tras ella para intentar convencerla de que no estaba con William por su dinero, ya que aun tenía el vestido de novia puesto.Ashley Tan solo faltaban un día para mi boda y había venido a visitar a mi hermano, quería abrazarlo y decirle que ya todo estaba listo y que era una lastima que él no pudiera asistir, pero que tomaría muchas fotos para enseñárselas después, pero esto no pudo ser, él estaba muy sedado y no me habían permitido pasar a su habitación, solo me dejaron verlo a través de un cristal. Él estaba acostado ahí, tan quieto, luciendo tan debil y palido, haciendo que un enorme dolor se propagara por todo mi corazón, no soportaba mirarlo así, quería verlo sonreír de nuevo, poder abrazarlo y bromear con él como antes, pero ni siquiera podía tocarlo en este momento ya que su sistema inmune estaba muy débil. No sabía cuanto más Josh podría seguir aguantando, pero el pronóstico no era bueno y eso me estaba matando, me sentía muy mal y no podía dejar de pensar en la propuesta de Elizabeth, ella había conseguido el donante para él, pero para que lo ayudara yo tenía que dejar a William. Era tan injusto q
William Por fin había llegado el día el cual seria el más feliz de mi vida, sabía que después de hoy me convertiría en el hombre más feliz de la tierra. Casarme con la mujer que amaba era un sueño hecho realidad y nada podía opacar toda la felicidad que sentía. Tenía algo de resaca por la despedida de solteros que me habían organizado mis amigos el día de ayer, pero el malestar se disipaba al pensar en Ashley, la mujer que había robado mi corazón desde que la conocí, había quedado completamente cautivado con ella por su belleza, pero a medida que la iba conociendo más, que iba descubriendo que no solo era hermosa, si no que una mujer increíble, era independiente, luchadora, amable, bondadosa y tenia un corazón tan hermoso como ella, por eso estaba seguro de que ella era la mujer perfecta para compartir mi vida. — Señor ya todo está listo.— dijo mi asistente Rebeca al teléfono. — Está bien Rebeca, sé que era tu día libre así que te agradezco mucho lo que haces por mí. — No se preoc
Ashley Al fin pude abrir los ojos a pesar de sentirlos muy pesados y me di cuenta de que estaba en una especie de hospital, era muy extraño, ¿Como terminé aqui? lo último que puedo recordar es que estaba en el auto con Elizabeth y me desmaye.¿Ella me había hecho algo? ¿por que estaba sola aqui? no entendía nada, no tenia idea de cuanto había dormido, pero tenía que salir de aquí. Me quise sentar en la cama y senti un terrible dolor que sentía en el vientre. ¿Qué me hicieron? ¿Por qué me siento de esta manera? Por alguna razón mi corazón empezó a entrar en pánico. — Oh por Dios, señorita recuéstese por favor.— dijo una mujer entrando en la habitación.— sigue muy débil deberá recuperarse primero antes de irse. — ¿Quién es usted? ¿Dónde estoy? ¿Qué me hicieron?. — pregunté, esperando que ella pudiera apaciguar todas mis dudas, tenía mucho miedo en este momento pero no sabía exactamente porqué. — Sé que debe tener muchas preguntas en su cabeza, pero debe calmarse. — dijo ella con voz
Ashley No podía dejar de llorar montada en ese auto, mi vida se había acabado por completo y no sabía cómo estaba mi hermano. Volvía a estar en una encrucijada ¿Voy al hospital a ver si seguía aguantando? ¿Busco a Wiliam en su apartamento y le explico todo lo ocurrido?.— ¿Me podrías llevar al hospital en la calle cincuenta y nueve? Por favor, necesito ir allí pronto.— le pedí a la enfermera que estaba conduciendo, cuando conseguí calmarme. — No hay problema, te puedo llevar.— Aceptó ella amablemente, me era difícil confiar completamente en ella, pero era mi única forma de poder llegar a dónde necesitaba.— necesitas atención médica para terminar de curarte.— No voy para atenderme.— dije arrugando mi cara por el dolor que aparecía de vez en cuando en mi vientre.— tengo que visitar a mi hermano que está hospitalizado ahí. — ¿Fueron las mismas personas? — Cuestionó ella con temor en su mirada.— no sé si será buena idea que nos acerquemos a ese sitio.— No fueron las mismas personas.—
Ashley — Si quieres que nadie se entere de todos tus actos, esta vez si tendrás que conseguir el donante para mi hermano y arreglar su operación. — continúe diciendo, sentía que me temblaban las piernas parada frente a ella.— ¿Qué pensaría tu hijo si se entera que su propia madre le quitó la oportunidad de ser padre? Creo que te odiaría con todo su corazón. Hablar de esto me dolía inmensamente y aun no sabía si podía ser capaz de decirle esto a William, pero necesitaba que ella accediera a conseguir el trasplante para Josh. — Creo que estás muy equivocada querida.— respondió ella soltando una carcajada, llena de victoria, parecía que ella sabía algo que yo desconocía. — mi hijo no te permitirá nunca más que te acerques a él y deberías ver las noticias.¿Qué tenían que ver las noticias con lo que estábamos hablando? No estaba entendiendo esto, pero no era la prioridad para mí en este momento.— Su hijo me ama y sé que me va a creer todo porque me conoce, sabe que no le mentiría.— Ase
Ashley Había caído en un sueño profundo, sentía demasiado cansancio en mi cuerpo por todo lo que había pasado. No sabía qué me dolía más, si mi corazón o mi herida, pero debía descansar para tener toda la fuerza necesaria para enfrentarme a esa mujer.A mitad de la noche vino a mi mente un sueño que me arrugó el corazón por completo, estábamos Wiliam y yo en lo que parecía una especie de un parque y a lo lejos escuchaba las risas de unos niños y uno de ellos con un gran parecido a él, nos sonreía. Me desperté con el corazón acelerado, fue un sentimiento horrible, solo pude llorar desconsoladamente y no pude volver a conciliar el sueño, afortunadamente los primeros rayos del sol empezaron a pasar a través de la ventana y me levanté para hacerle desayuno a Valeria, ella ayer había aceptado ayudarme a pesar de que era un enorme riesgo el que estaba tomando y yo estaba muy agradecida por eso, porque así podía tener al menos un rayo de esperanza en que esa mujer pague por lo que hizo. Si
William Abrir los ojos era casi tan doloroso como respirar, había hecho de mi habitación el sitio perfecto para pasar mis días y recuperarme de todo el dolor que sentía.Entre tanto alcohol y sufrimiento ya había olvidado lo que era tener una vida normal, me levanté con mucha dificultad para ir al baño, estaba completamente desnudo y ver mi reflejo en el espejo me hizo entender qué por más fuerte que seamos, siempre llega un momento que te desploma completamente.Encendí la luz de la habitación para buscar algo de ropa y noté la gran cantidad de botellas de whisky en el suelo, parecía que había dado una gran fiesta aquí, pero era solo el resultado de un corazón roto, el mío el cual no dejaba de doler por más alcohol que consumiera.Debía volver a la realidad, superar de una vez por todas a la mujer que jugó conmigo y nos robo. En ese preciso momento recordé el caos que debía haber en la empresa y yo, el presidente ejecutivo, estaba con la mayor resaca que había tenido en mi vida.Busq
Ashley Desperté muy temprano en la mañana, esto me recordaba los días que empecé a trabajar cuando tenía diecisiete años, en ese momento mi mamá había fallecido, dejándonos solos a mi hermano y a mí, por lo que había tenido que trabajar mucho y en lo que encontrara para poder sostenernos, había sido bastante duro, pero lo soporte por mi hermano, él siempre me ha dado fuerza. Esta vez era diferente, mi único objetivo era encontrar las pruebas necesarias en contra de Elizabeth Thomson.— Buenos días Valeria.— dije al entrar en la cocina y encontrármela cocinando.— es muy temprano ¿Ya te vas al trabajo?.— Buenos días Ashley, si, ingresaron varias personas heridas el día de ayer.— respondió, mientras le daba la vuelta a unos emparedados rápidamente.— Al parecer pertenecen a la mafia. — Espero estés bien en ese terrible lugar.— Si, no te preocupes por mí, y tú, ¿A dónde vas tan temprano?.— Creo que di un pequeño paso, por casualidad encontré un empleo en la empresa que compró el softwa