me quedé dormida, lo siento, este es el segundo de ayer, en unas horas no leemos con los de hoy, las amo
Isabella Llevamos quince días con esta nueva campaña promocional, y la verdad los eventos nos han llegado con más frecuencia, ahora tenemos una agenda llena por dos meses. Además están solicitando servicios completos como en él promocional, eso nos está generando mayor alcance, y así nos ayudamos entre proveedores de servicios; esto y poder ver como crece mi bebé, son de las alegrías mas grandes de mi vida en este momento.Hoy es mi día libre, así que mi pequeño y yo salimos de paseo al parque que se encuentra cerca de casa, el día está con un poco de nubes, es ideal pues no hace tanto calor y podemos disfrutar con mas calma. Hace tanto que no sonreía de forma genuina, que casi me duele la cara de tanto hacerlo.Durante este año me la pasé llorando la mayor parte del tiempo, las sonrisas eran mas por compromiso que por gusto, y hoy es como si algo dentro de mí, me gritara que soy libre de ser feliz, de poder vivir y continuar, como si una enorme noticia estuviera por llegar.Pasamos
Clark —Deja de dar vueltas ¡maldita sea! Me vas a volver loco Ritchson —grita Frank. —Lo siento pero ver esas fotos me tiene completamente eufórico. —Escucha, entiendo todo eso, el niño es adorable, es toda tu cara —Dice lo último entre dientes y finge tos. —Si, es hermoso —veo al donde de su nuevo cuarto. —Pobre Isa, no sabe lo que le espera contigo —vuelve a hablar entre dientes —en fin, vamos que se hace tarde. Salimos de la nueva casa, porque obviamente tenía que comprar un espacio nuevo para empezar de nuevo; estoy mas que emocionado, pero con enormes dudas aún. Durante este mes y medio a pesar de enviar a gente a averiguar algo sobre ella, la verdad es que no han conseguido mayor información. El investigador tiene la misma información que ya conocíamos, en un accidente perdió la memoria y al consultar con un neurólogo nos recomendó no forzarla; aunque no voy a mentir, esta espera me tiene vuelto loco. Necesito que lleguen ya, y que de una vez z por todas esta bend
Isabella —¡Ah! —me levanto de golpe y mi cabeza choca con algo muy duro —¡auch! —nos quejamos ambas pues chocamos nuestras cabezas. —Carajo Isa, tienes la cabeza bien dura mija —se queja Fabi, sobando su frente y yo la mía. —Pero si buenos días —ambas reímos. —Cada vez más, hablas mejor, oye nena ¿que estabas soñando? Andas toda roja y sudada —la cara me hierve de la pena —¡Uy! Andabas soñando con el cuero de tu hombre. Y ni lo niegues, sola te delatas. —Pues para que lo niego, el regresar a Texas, me tiene emocionada de más, pero también preocupada. —Quítate esas telarañas de la cabeza y mejor ve a darte un baño, en dos horas salimos y todavía tienes que arreglar a mi príncipe hermoso, yo haré lo mismo, date prisa y deja de pensar en el papucho. Dice mientras avanza a la puerta y le lanzó un cojín, esa Fabi, es un casa fuera de este mundo. Un caso que tiene razón, me levanto de la cama y efectivamente, estoy empapada en sudor, corro a la ducha y dejo que el agua fría me
IsabellaEs Magie, es ella, el corazón salta en mi pecho emocionado,esperaba con toda mi alma encontrarla y afortunadamente sigue aquí; doy un paso en su dirección y levanto mis brazos, Magie, se ve más rápida y me envuelve en un bello abrazo.—Mi niña, te hemos esperando por tanto tiempo ¿dónde estabas? —dice entre sollozos .—¡Hay Magie! —es todo lo que el llanto me permite decir —solo vengo por mis documentos de identidad —hablo tras varios minutos abrzadas —en cuento termino unos pendientes regresaré y prometo contarte todo.—Mi niña, es que hay tanto que debo decirte, yo pensé que nunca te volvería a ver y ...—Lo sé, lo sé, prometo regresar lo antes posible, te extrañé mucho.No dejo que me diga nada mas, voy a seguir el plan que tengo con Fabi, terminar el trabajo y buscar a mis padres y a Clark; solo pensar en él, mi corazon se desboca, ya con mi identificación en mano regreso a la sala y me despido de Magie.Pido un taxi de camino a abajo, yo como siempre corriendo, las cosas
IsabellaHace un par de días llegó la confirmación de la reserva en el hotel más lujoso de todo el estado, es para le fecha de nuestro aniversario.Últimamente Frank, mi esposo, ha estado un poco cariñoso conmigo, y eso es como un sueño hecho realidad. Por primera vez en tres años de matrimonio, puedo ver una pizca de afecto hacia mi de su parte.Estoy terminando de aplicar el labial sobre mis labios, me compré un conjunto de lencería en encaje, espero que el negr* sea de su agrado. Salgo de casa con toda la felicidad del mundo, al fin nuestro matrimonio empieza a sentirse real. Hace cuatro años que salí de la universidad, entre a trabajar en Silver Corporation; me volví la mano de derecha de don Augusto Silver, patriarca de la familia Silver.Él me propuso un acuerdo matrimonial con su nieto Franklin, pues decía que juntos lograríamos llevar a la empresa a niveles jamás vistos.Yo acepte con todo el gusto del mundo, pues desde la universidad, yo estaba enamorada de Frank; fue un sue
IsabellaSolo veo su espalda alejarse, las piernas me fallan y caigo de rodillas aún dentro de la caja metálica. Ese hombre tiene razón, soy tan ridícula y patética. Me levanto aun con el ardor del golpe, abrazo la poca dignidad que me queda y salgo del hotel cubriendo mi rostro. Escucho la voz de Frank, a mi espalda y apresuró el paso, no quiero oírlo, no quiero tenerlo cerca. Paro el primer taxi que pasa y me alejo viendo como sigue gritando mi nombre.—¿A donde la llevo señorita? —me pregunta el taxista.—Solo avance por favor.Me giro sobre el respaldo y veo a Frank, que trata de alcanzar el auto, le pido al chófer que no pare. Mi vista sigue fija atrás, no puedo volver a confiar en él.Por un minuto pienso en ir a casa y recoger mis cosas; ya es de noche y no creo poder entrar y menos si ellos están ahí.Mi móvil suena distrayendo mis pensamientos, por un momento creí que era Frank, más al ver la pantalla, es el abuelo quien llama.—Hola abuelo —trato de sonar normal. —Mi quer
IsabellaMe toma de la barbilla con demasiada fuerza, el dolor hace que una lagrima salga y solo entonces es que deja de ejercer presión, más no me suelta. Me jala abrazándome y por más que quiera luchar contra él, tiene mis brazos aprisionados entre los suyos. Tengo miedo de él, jamás me había gritado siquiera y ahora no solo me... Eres tonta Isabella.—Frank, por favor suéltame, no tiene caso está escena, mira si lo que quieres es que tu familia no sepa de su relación; no hay problema, solo dejame regresar a mi antigua casa, te juro que no los voy a molestar pero no me hagas esto por favor —digo al borde del dolor, con cada palabra su agarre se hace más fuerte.—No, es que no lo entiendes, vamos a casa mi amor, por favor vamos a hablarlo. Hay cosas que no sabes y tengo que decirte —dice mientras toma mi rostro entre sus manos.Su mirada suplicante me pide que en silencio una oportunidad, más mi corazón me grita que ya nos lastimó y mi cerebro me hace poner las manos sobre su pecho
Narrador omniscienteEl hombre sintió la necesidad de abrazarla, había escuchado y visto todo pues la puerta estaba abierta. Desde que la vio al salir del ascensor cuando llegó, algo se removió en su pecho.Parecía un acosador esperando a la frágil chica; y claro que lo era ¿quien en su sano juicio espía a una desconocida?Dentro del elevador esperó hasta que la chica entró y pidió la planta baja, se aguanto las ganas de acercarse y poder abrazarla, su frío corazón la añoraba, sin embargo, se abrazó a si mismo y solo la veía.Cuando al fin llegaron a su destino, le tendió el pañuelo qué su madre le dio cuando era pequeño, era un recuerdo invaluable qué regresaría a él de una u otra forma.Salió fingiendo que no le afectaba, pero con la idea firme, de volver a verla y más pronto de lo que se esperaba.Al llegar a su oficina, le pidió a su asistente que retirara todos los beneficios de la antigua socia, ya no necesitaría de sus incompetentes servicios; era hora de hacer liquidaciones.—