Diyat era uno de los pocos pueblos donde no existía ningún avance en cuanto a la autonomía de las mujeres, era solo ahí y en en los pueblos vecinos, en otras partes, las mujeres empezaban a hacer rebeliones para exigir los derechos que se les negaban.Cualquier hombre podía matar, violar, y sentirse dueño de cualquier mujer a la que le tocara la mala suerte de ser su esposa, muchas de las veces en matrimonios obligados, incluso menores de edad eran obligadas a casarse con hombres mayores.Zeynep se arrepentía una y mil veces de haber viajado a un lugar como ese, pensaba que sí no hubiera ido, la habrían buscado e intentado llevar a la fuerza, pero al estar en Estados Unidos, donde hay leyes que protegen a las mujeres, tal vez hubiera podido salvarse.Kerem la soltó de la mano en cuanto dieron la vuelta a la sala, ya que la chica no podía verlos.—Me debes una, te salve de tu enamorada.—No te debo nada. —Parecía que su mal humor había regresado.—Perdón, se me olvidaba que eres el gra
Los días siguientes para Zeynep fueron terribles, Kerem intentaba estar cerca de ella, la dieron de alta, él insistió en llevarla al auto entre sus brazos.La chica se negó a hablar desde ese momento, estaba acostada sobre la cama todo el tiempo, Ayse la ayudaba, y le daba de comer en la boca, sentía que las fuerzas la habían abandonado.Kerem se había cambiado a la habitación contigua, así no la atormentaría y estaría pendiente de ella, en sus ojos podía ver reflejado el terror cada vez que se le acercaba, su madre no estaba de acuerdo que durmieran separados.—No tienes por que salir de tu habitación, hijo, después de todo lo que hiciste era tu derecho, es tu esposa y puedes tomarla cuantas veces quieras, que te casaste para eso.—¡Basta! Por favor, madre, ya basta con eso.La mujer no entendía a su hijo, era un tonto, ¿Cómo podía sentirse culpable por lo que había hecho? Después de todo, la mujer no había muerto.—Sabe una cosa madre, agradezco a Alá que no le haya enviado una hija
Al día siguiente, Zeynep se levantó para desayunar en la terraza, Kerem se sintió muy bien por ello cuando fue informado, sentía que Ayse era una buena compañía para su esposa, así que decidió que desde ese momento estaría solo a su servicio.—No, me niego rotundamente, esa chica pertenece al servicio de la casa, no está aquí para atenderla a ella exclusivamente.—A esa chica la han traído aquí sus padres, y han hablado conmigo, yo soy quién les pagó, y lo siento mucho madre, no le estoy pidiendo su autorización, le estoy avisando.—Por Alá, fue un gran error traer a esa mujer aquí, definitivamente te ha cambiado —dijo completamente alterada.—No, madre, me di cuenta de que estaba siendo injusto con ella, después de todo, tanto ella como yo, fuimos obligados a casarnos.—Alá me de fuerzas para soportar todo esto que estoy escuchando.La mujer se abanicaba fuertemente con la mano, totalmente escandalizada por lo que estaba pasando, su hijo había amenazado con enviarla fuera de la casa,
Dos días después, la madre de Kerem se comunicó con Frank, el ex novio norteamericano de Zeynep.—Veo que ha seguido al pie de la letra mis instrucciones, y ha evitado regresar a Diyat pacientemente, mañana llevaré a Zeynep a la inauguración del nuevo hospital de Marduk, el pueblo donde estás, mi hijo tiene que acudir a una reunión en compañía de su padre, así que tendrán el tiempo suficiente para escapar.La mujer se sentía satisfecha de que las cosas iban tal y como lo había planeado.—Le prometo que nos marcharemos y no nos volverán a ver jamás.—Ingenuamente creía en lo que le decía la mujer.La madre de Kerem sonrió maliciosamente, sabía perfectamente que era verdad que no los volverían a ver jamás, al escapar, Zeynep estaría vendiendo su destino, no podía creer que el norteamericano fuera tan estúpido.Por la tarde, cuando Kerem volvió de la oficina, Neylan tuvo que hablar con él.—Hijo, me han invitado el día de mañana a la inauguración del nuevo hospital de Marduk, me gustaría
Zeynep estaba decidida a hacer valer su posición como esposa del jefe y no permitiría que Neylan saliera impune de todo lo que había hecho.Después de regresar a la casa, Zeynep se dirigió directamente a la sala principal donde se encontraba su suegro, quería hablar con él y ponerlo al tanto de todo lo sucedido.Al entrar, lo encontró sentado en una silla, pensativo y con una expresión seria en su rostro.—Padre, necesito hablar contigo —dijo con determinación, el padre de Kerem se sorprendió gratamente, era la primera vez que le llamaba padre, tal y como lo marcaba la costumbre.Levantó la mirada y la observó detenidamente, notó la seriedad en su rostro y supo que algo importante estaba pasando.—¿Qué sucede, Zeynep? Pareces preocupada —respondió con calma.Zeynep relató todo lo sucedido, desde la visita de la madre de Kerem hasta el encuentro con Frank en el pueblo, le explicó cómo Neylan había estado involucrada en el plan de escape y cómo había intentado perjudicarla.También menc
Zeynep hacía lo posible por no soltarse a reír cada vez que recordaba la cara que había puesto su querida suegra cuando su marido ordenó que se dividieran los días de la semana para ordenar en la casa.Neylan era una mujer de baja estatura, de tez robusta, bastante pasada de peso, aparentaba tener un carácter tranquilo, pero era meticulosa, planeaba muy bien las cosas antes de hacerlas.Al otro día, a Kerem le pareció extraño que decidió por propia voluntad dejar la cocina en manos de Zeynep, tal vez su madre había decidido llevar la fiesta en paz para no tener más problemas.Kerem subió a la habitación para hablar con Zeynep en cuanto su madre le dijo la decisión que había tomado.—Mi madre ha decidido dejar en tus manos por hoy la cocina, debes encargarte de que todo esté preparado, recibiremos en casa para comer a mi primo y a mi tío, tengo que advertirte que todo tiene que quedar perfecto, como dicen en tu país, no soy el santo de su devoción, y tratarán de humillarme ante cualqui
El padre de Kerem se levantó de su silla, al igual que su tío, decididos a parar aquella tonta pelea entre sus hijos.—¡Basta! Dejen de actuar como chiquillos, este arrebato no voy a permitirlo —el padre de Kerem gritó furioso, esperando así amedrentarlos.—Por lo visto ustedes dos no tienen respeto por sus padres, en cuanto a ti, hijo, te advierto que no estoy dispuesto a pasar una más de tus tonterías, así que se sientan en silencio y comparten el postre con nosotros tranquilamente —el tío de Kerem estaba profundamente molesto por lo sucedido.Kerem apretó los puños, ya llegaría el momento de hacerle tragar sus palabras a su primo, Zeynep se sentía sumamente nerviosa, por un momento creyó que los dos hombres se agarrarían a golpes, ella odiaba la violencia.Más tarde los invitados se despidieron sin que hubiera otro incidente entre los primos, Zeynep se disculpó con su tío para volver a su habitación, ignorando por completo a su tía.—¿Has visto, hijo? Es una majadera, no me ha diri
Kerem suspiró profundamente, por lo visto alguien ya le había ido con el chisme a su madre sobre lo que había ocurrido en la escuela, él había intentado de que ella no se enterara de que Zeynep sería la maestra.—Mamá, no deseo discutir ahora, me siento cansado, y Zeynep, como puedes ver, no se encuentra del todo bien.—Hasta que alguien se atrevió a ponerla en su lugar, ya que tu no puedes hacerlo, te falta autoridad para lograr que tu mujer te obedezca.—¡Mujer! Por Alá, deja de meterte en el matrimonio de nuestro hijo, recuerda como te enfurecía que mi madre se metiera contigo.Naylan se quedó callada, pero era obvio que estaba disfrutando al saber que alguien había golpeado a Zeynep de esa manera.—Ayse, sube la comida a nuestra habitación, hoy comeré con Zeynep, más tarde prepara un baño relajante para ella, necesita descansar para recuperarse.—Sí, señor, enseguida.La chica se apresuró a la cocina, para preparar la comida.A Zeynep no le agradaba la compañía de Kerem, pero al v