Se bajo de su automóvil pegando un portazo. Estaba indignada, nadie se había burlado así de ella, jamás en su vida. Camino a grandes pasos hasta aquella puerta, llevaba en su mano una revista, la extraña que alguna vez haya podido ver en su vida, la leyó con indignación total.Salía cada detalle de lo sucedido hace 5 años durante el divorcio de ella y del Maxwell.El desenlace de cómo el Maxwell busco a su hijo durante 5 añosTambién un reportaje de cómo la rubia les había ganado en la demanda por el apellido de su familia porque casualmente ella era quien cuidaba a ese pequeñoSaltándose la parte desconocida del orfanato, sus vidas más personales, sus sufrimientos, hasta llegar donde se mencionaba que el Maxwell le había ofrecido trabajo a esta y se hicieron novios al poco tiempo¡Y dejándola como la villana de la película!Estaba más que indignada, ¡Furiosa!Toco el timbre de aquella mansión una, dos y tres veces, muchas más con desesperación, nadie le hacía eso a Susan Relish y se
Llegaron por fin a casa, se habían retrasado bastante por la hora, es que la pasaron tan bien que se distrajeron demasiado y se dieron cuenta de la hora cuando ya era eso de las siete de la tarde siendo que salieron como a las diez de la mañana. No podían quejarse, fue un día de esos que recordarían toda la vida, estaban seguros, fue la primera vez que andaban solos como padre e hijo, los que ahora sabían que realmente eran. Bajo alegre de aquel automóvil en el que habían llegado, no podía esperar para contarle a su madre lo bien que se la había pasado, no podía esperar para ver como esta sonreía al decirle lo feliz que él estaba. Y ya no podía esperar para que llegara el momento de darle aquel regalo Veía con una sonrisa a aquel pequeño niño, el cual ya no era tan pequeño, caminaba con impaciencia hasta aquella puerta. El plan era, que ese pequeño distrajera a la rubia mientras él iba a esconder aquel regalo, tenía que dárselo y sabia cuando quería hacerlo, el más oportuno de los
Para él engañar a los adultos era más que sencillo Para engañar a tus enemigos primero debes engañar a tus amigos Ese niño era de armas tomar En la guerra y el amor todo se vale Y si ella quería guerra, guerra tendría ¿Qué tal si adelantamos un poco la conversación?, seria divertido, ¿no Relish? –pregunto con malicia el pequeño apretando los mismos botones en ambos aparatos— “no es porque no quiera, sencillamente no puedo decírtelo porque ya mandé a deshacerme de ese niño, dudo que siquiera siga con vida” “lo hiciste desaparecer, mandaste a alguien a que lo hiciera por ti” “podría ser niñito, podría ser, pero eso es algo que no te importa” “claro que si, ¿Por qué no le dices de una vez que ese niño está muerto para que dé una vez deje de ilusionarse con algún día encontrarlo?, espera… no puedes, porque sabes que se te acusaría de asesinato indirecto dependiendo de las causas de su muerte” “no eres más listo que yo mocoso, ¿acaso seria yo la culpable de un accidente?” “No lo
Los recuerdos venían y venían a su mente, no podía dejar de mirar aquel papel que traía en la mano, no podía… Estaban bajo la copa de ese gran árbol mirando el cielo, era su entretención favorita desde hace años, se la pasaban allí días enteros de relajo, otros jugando bajo ese árbol y otros simplemente dormían allí, aquellas noches de verano siempre estarían en su mente con sus dos mejores amigas pasando aquellos tranquilos momentos. Aunque en ese instante solo estaba con una de sus amigas, ambas relajadas mirando el cielo, era la única forma que tenían de soñar, de ver el mundo de otra forma en vez de aquellas crueles realidades en las que siempre vivían, ya que aquellos sueños de que una familia se las llevara eran solo sueños, a sus edades no podían desear aquello, siempre se llevaban a los más pequeños para ello. Y ellas eran quizás demasiado jóvenes… Los pasos apresurados de alguien alejo sus miradas del cielo, sentándose para mirar como su otra amiga llegaba corriendo junto
Acababa de salir del baño del aeropuerto, se sentía horrible, no recordaba haberse sentido tan mal la última vez que viajo, seguramente el estrés mental hacia estragos con ella, eso y que no había comido nada en todo el día pues ni hambre le había dado. Miro la hora, había pasado casi una hora allí encerrada. Suspiro, al menos se sentía mejor, lo único que había comido era el desayuno y ahora ni eso tenía en el estómago. Tomo de uno de sus bolsillos el comprobante para ir a buscar sus maletas y se fue directo donde estaba el mesón de las maletas. Al retirar un bolso, el cual cabe decir que no era demasiado grande, se dirigió a la salida de aquel inmenso lugar, debiendo pasar por un detector de metales y la seguridad policial. Uno de ellos se paró frente a ella impidiéndole el paso, su gorro de guardia tapaba su rostro solo dejándole ver su mueca de sonrisa de superioridad y diversión, se estreso más por ello, no estaba para el juego de nadie. No se enoje señorita, solo procedimient
Al abrir aquella puerta enseguida sintió como alguien se abrazaba a sus piernas. Sonrió al bajar la mirada y distinguir una pequeña mota de pelo rojizo de seis añitos de edad. Su sonrisita deslumbraba incluso en los días de lluvia y sus ojitos negros eran los más brillantes que hasta ese momento conocía. Bienvenida a casa mami–sonrió el pequeño soltándole, momento en que ella se agacho abrazando muy fuerte a su pequeño— ¡Te extrañe mucho mi pequeño! –Sonrió como una verdadera pequeña de cinco años mientras abrazaba a su hijo con las mejillas rojas, al igual que el niño las tenía riendo— ¡Yo también te extrañe mucho mami! –expreso el pequeño refregando su mejilla con la de su mamá, ambos riendo, ambos haciendo la misma acción— Ambos queriéndose… Recordó aquellos días que sucedía reiteradamente la misma escena. Abrió la puerta, hora solo el olor a encierro reinaba, hace mucho ella vivía allí, es más, alcanzo a ser menos de un año que estuvieron allí de emergencia, donde después bus
Se inclinaba varias veces frente a su superior. Miraba de reojo asesinamente al pequeño pelirrojo quien tenía cara de puchero, lagrimas falsas y expresión de miedo, todo eso junto a que estaba pegado a su padre poco menos que aterrorizado era la razón de la situación.Lo siento jefe–volvió a repetir en medio de la reprimenda el Martínez, inclusive el perro tenía la cabeza gacha en son de disculpas como su amo, pero ambos tenían una gota anime—KarmaDe todas las veces que se metían en problemas voluntariamente, la única vez que no hacían nada malo les estaban regañando.Ese mocoso sí que era listoEl gran grito que este pego junto al llanto y las lágrimas de cocodrilo que saco eran la causa de todo. El espectáculo que monto atrajo de inmediato a los demás guardias y luego al jefe del aeropuerto. En complicidad, el azabache hizo la de padre preocupado por el pequeño a quien le calmaba el llanto hasta que más tranquilo seguía con su puchero, y claro, matando con la mirada falsamente ind
Sus mandíbulas estaban desencajadas, el pequeño comenzó a rascarse la cabeza con desesperación, ahora si no sabía qué hacer. 29 de diciembre, habían perdido todo el día para nada A parte del trafico y los desvíos, ya era tarde, esperando encontrar alguna pista de su madre, también pasaron con los Vasile, a quienes asombraron por la noticia, cosa que les dio a entender que no tendrían ni una sola pista de ella. Ese desvió les tomo la mitad del día puesto que la mansión de ellos no quedaba muy cerca de la ciudad, por suerte tenían al Martinez de chofer o realmente habrían tenido todo el día para buscar la mansión, Ramon la conocía, después de todo, los Vasile eran una de las familias más importantes de aquella región. Finalmente habían llegado a tocar la puerta de una peli azul de ojos anaranjados la cual les miro con extrañeza, nunca había visto a ninguno de ellos. El solo nombre de Emily hizo que esta sonriera y les dejara el paso libre. Bajo la impaciencia de todos ella había pr